Los vigilantes de la proliferación de vertidos incontrolados
Nació como plataforma para denunicar la gestión del Centro de Tratamiento de Residuos de San Román de la Vega, y se acaba de convertir en asociación con entidad jurídica propia y capacidad legal para denunciar ante la Fiscalía, las administraciones y organismos públicos la gestinón de los residuos. Los miembros de la Plataforma por una Gestión Transparente y Eficaz del CTR han dado el paso para ser más eficaces en la vigilancia de los vertidos incontrolados que maltratan y deterioran los paisajes de nuestras comarcas.
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La Asociación 'Plataforma Gestión Residuos' ha sido presentada este martes en Astorga con tres vertidos en el punto de mira. Las primeras actuaciones se han concretado en la presentación de dos escritos, uno ante la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) solicitando información acerca de los parámetros del contenido los vertidos de lixiviados que se realizan reiteradamente desde el centro de San Román exterior, mientras que el segundo escrito ha sido dirigido a la Consejería de Fomento y Medio Ambiente por el depósito de lodos de depuradora en una finca de Piedralba.
En su declaración de principios, el colectivo califica de "nefasta" la gestión de residuos en la provincia, en la comunidad autónoma y en el Estado, y carga la responsabilidad en unas administraciones que se han dotado de una legislación medioambiental. "que dista mucho de cumplir unas mínimas garantías de control que eviten una posible contaminación de nuestra tierra, nuestros ríos, arroyos, acuíferos" enclavados en el entorno rural y que suponen "nuestro futuro y el de las futuras generaciones".
![[Img #20576]](upload/img/periodico/img_20576.jpg)
Una de esas gestiones "nefastas" es la de la basura de la provincia en un centro de tratamiento que se ha convertido en un "vertedero", desde el momento en que la Junta de Castilla y León permitió el depósito sin previa selección de las miles de toneladas de residuos sólidos urbanos de León y su alfoz almacenados durante décadas en la finca de Santa María del Páramo, aseguran los miembros del colectivo, quienes comenzaron vigilando ese traslado y han continuado por convertirse en testigos del vertido incontrolado de lixiviados hacia Estébanez de la Calzada, que están transformando el 'patio de atrás' del CTR en un gran lodazal.
![[Img #20572]](upload/img/periodico/img_20572.jpg)
Otro de los puntos negros sobre los que ha fijado su atención la asociación es el vertido de lodos de depuradora que durante meses extendieron con nocturnidad numerosos camiones en una finca privada de aproximadamente 2,5 hectáreas en el término municipal de Santiagomillas, visible desde la carretera de Val de San Lorenzo (en la margen contraria al parque de placas solares). La acumulación de estos residuos está contaminando el arroyo Huertajusta. En el escrito dirigido a la Consejería quieren saber si tienen conocimiento de estos vertidos y si no es así que proceda a la inspección.
![[Img #20574]](upload/img/periodico/img_20574.jpg)
![[Img #20573]](upload/img/periodico/img_20573.jpg)
La asociación también ha centrado su atención en la contaminación de las aguas del caudal que corre por el molino de Toralino de la Vega. En este caso los vertidos proceden del polígono industrial de Riego de la Vega.
La gestión de las depuradoras de aguas residuales
En sus primeras declaraciones, los miembros de la 'Plataforma Gestión Residuos' denuncia "la desastrosa gestión de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León de las EDAR (Estaciones de depuración de aguas residuales)". Argumentan que según el protocolo suscrito en diciembre del 2010 entre el Ministerio de Medio Ambiente y la Junta, se acordó aplicar el segundo Plan Nacional de Calidad de las Aguas, con el que se traslada a Castilla y León la Directiva Comunitaria 91/271. En el mismo, se obliga a todos los estados miembros a disponer de un saneamiento y depuración adecuados en función de los habitantes, con el objetivo de evitar en lo posible la contaminación de las aguas continentales y costeras. Para ejecutar todas estas actuaciones, tanto el Ministerio de Medio Ambiente (a través de la CHD y la Sociedad Aguas del Duero), como la Junta "se repartieron las obras a realizar. Por una parte, el Gobierno central aportaba 350 millones de euros para toda Castilla y León, mientras que la Junta se comprometía con otros 700 millones".
Además de este "reparto" denuncian la existencia de numerosos casos en los que estas obras están inacabadas o no funcionan correctamente, "claro ejemplo" son las dos denuncias presentadas en 2014 por la Estación Biológica Internacional (EBI) y su representante en España, Europarques, contra la Junta de Castilla y León ante el organismo anticorrupción de la OLAF - Oficina Europea de Lucha contra el Fraude y ante la Dirección de Medioambiente de la Comisión Europea. Las denuncias afirman que la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, presidida entonces por Antonio Silván, "financió con fondos europeos la construcción de cinco Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (EDAR) en el entorno del Lago de Sanabria".
"Los vertidos y sus consecuencias para el ecosistema, se han producido como consecuencia de numerosas irregularidades que implican a organismos, funcionarios y empresas privadas en connivencia con la administración", concluye el colectivo.
Cambio de mentalidad
El colectivo nace para espolear un cambio de mentalidad de las instituciones en la recogida y tratamiento de los residuos domésticos, con el fin de que legislen para conseguir una recogida selectiva que separe los residuos orgánicos de los que serán rechazados como inservibles para ser reutilizados. Para ello entienden que es "necesario un compromiso de aprovechamiento máximo de los residuos y su reciclaje.
La asociación busca la complicidad de la sociedad en la adquisición de "un compromiso y una concienciación, para que en cada uno de nuestros hogares podamos cambiar un futuro, el cual no es muy esperanzador, para garantizar una vida saludable a las generaciones venideras".
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La Asociación 'Plataforma Gestión Residuos' ha sido presentada este martes en Astorga con tres vertidos en el punto de mira. Las primeras actuaciones se han concretado en la presentación de dos escritos, uno ante la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) solicitando información acerca de los parámetros del contenido los vertidos de lixiviados que se realizan reiteradamente desde el centro de San Román exterior, mientras que el segundo escrito ha sido dirigido a la Consejería de Fomento y Medio Ambiente por el depósito de lodos de depuradora en una finca de Piedralba.
En su declaración de principios, el colectivo califica de "nefasta" la gestión de residuos en la provincia, en la comunidad autónoma y en el Estado, y carga la responsabilidad en unas administraciones que se han dotado de una legislación medioambiental. "que dista mucho de cumplir unas mínimas garantías de control que eviten una posible contaminación de nuestra tierra, nuestros ríos, arroyos, acuíferos" enclavados en el entorno rural y que suponen "nuestro futuro y el de las futuras generaciones".
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Una de esas gestiones "nefastas" es la de la basura de la provincia en un centro de tratamiento que se ha convertido en un "vertedero", desde el momento en que la Junta de Castilla y León permitió el depósito sin previa selección de las miles de toneladas de residuos sólidos urbanos de León y su alfoz almacenados durante décadas en la finca de Santa María del Páramo, aseguran los miembros del colectivo, quienes comenzaron vigilando ese traslado y han continuado por convertirse en testigos del vertido incontrolado de lixiviados hacia Estébanez de la Calzada, que están transformando el 'patio de atrás' del CTR en un gran lodazal.
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Otro de los puntos negros sobre los que ha fijado su atención la asociación es el vertido de lodos de depuradora que durante meses extendieron con nocturnidad numerosos camiones en una finca privada de aproximadamente 2,5 hectáreas en el término municipal de Santiagomillas, visible desde la carretera de Val de San Lorenzo (en la margen contraria al parque de placas solares). La acumulación de estos residuos está contaminando el arroyo Huertajusta. En el escrito dirigido a la Consejería quieren saber si tienen conocimiento de estos vertidos y si no es así que proceda a la inspección.
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La asociación también ha centrado su atención en la contaminación de las aguas del caudal que corre por el molino de Toralino de la Vega. En este caso los vertidos proceden del polígono industrial de Riego de la Vega.
La gestión de las depuradoras de aguas residuales
En sus primeras declaraciones, los miembros de la 'Plataforma Gestión Residuos' denuncia "la desastrosa gestión de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León de las EDAR (Estaciones de depuración de aguas residuales)". Argumentan que según el protocolo suscrito en diciembre del 2010 entre el Ministerio de Medio Ambiente y la Junta, se acordó aplicar el segundo Plan Nacional de Calidad de las Aguas, con el que se traslada a Castilla y León la Directiva Comunitaria 91/271. En el mismo, se obliga a todos los estados miembros a disponer de un saneamiento y depuración adecuados en función de los habitantes, con el objetivo de evitar en lo posible la contaminación de las aguas continentales y costeras. Para ejecutar todas estas actuaciones, tanto el Ministerio de Medio Ambiente (a través de la CHD y la Sociedad Aguas del Duero), como la Junta "se repartieron las obras a realizar. Por una parte, el Gobierno central aportaba 350 millones de euros para toda Castilla y León, mientras que la Junta se comprometía con otros 700 millones".
Además de este "reparto" denuncian la existencia de numerosos casos en los que estas obras están inacabadas o no funcionan correctamente, "claro ejemplo" son las dos denuncias presentadas en 2014 por la Estación Biológica Internacional (EBI) y su representante en España, Europarques, contra la Junta de Castilla y León ante el organismo anticorrupción de la OLAF - Oficina Europea de Lucha contra el Fraude y ante la Dirección de Medioambiente de la Comisión Europea. Las denuncias afirman que la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, presidida entonces por Antonio Silván, "financió con fondos europeos la construcción de cinco Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (EDAR) en el entorno del Lago de Sanabria".
"Los vertidos y sus consecuencias para el ecosistema, se han producido como consecuencia de numerosas irregularidades que implican a organismos, funcionarios y empresas privadas en connivencia con la administración", concluye el colectivo.
Cambio de mentalidad
El colectivo nace para espolear un cambio de mentalidad de las instituciones en la recogida y tratamiento de los residuos domésticos, con el fin de que legislen para conseguir una recogida selectiva que separe los residuos orgánicos de los que serán rechazados como inservibles para ser reutilizados. Para ello entienden que es "necesario un compromiso de aprovechamiento máximo de los residuos y su reciclaje.
La asociación busca la complicidad de la sociedad en la adquisición de "un compromiso y una concienciación, para que en cada uno de nuestros hogares podamos cambiar un futuro, el cual no es muy esperanzador, para garantizar una vida saludable a las generaciones venideras".






