El PP defiende los cambios laborales en Diputación por ser "necesarios"
Juan Martínez Majo admite y defiende la modificación de la estructura orgánica y de la relación de puestos de trabajo que se aprueba este miércoles, así como los concursos de traslados que se desplegarán durante todo 2017. Algo que "jamás se ha hecho en la institución".
2017 será un año que marcará un antes y un después en la estructura laboral de toda la vida de la Diputación de León. Su presidente, Juan Martínez Majo, ha admitido que los procesos de modificación de la estructura orgánica y de la relación de puestos de trabajo que se aprobarán este miércoles en el Pleno de la Diputación, está por ver con qué apoyos de los partidos de la oposición cuenta. También confirmó que a lo largo del próximo ejercicio se aplicarán muchos concursos de traslados para resituar a funcionarios al amplio número de interinos de larga duración en el Palacio de los Guzmanes.
Para Majo, es algo que "jamás se ha hecho en la institución" y que defendió como necesario, imprescindible, así como aplicando "criterios y baremos de méritos" y siempre en el marco de una mesa negociadora formada por los sindicatos, de quines aseguró en numerosas ocasiones que cuenta con el apoyo mayoritario, aunque no se trasladó así en la reunión del pasado día 19 de diciembre. Una completa "reestructuración de la plantilla" que se realice sin que haya "inquietudes de los trabajadores", defendió en la rueda de prensa en la que presentó los presupuestos para 2017. "Conllevará quebraderos de cabeza, pero es necesario", añadió.
La Relación de Puestos de Trabajo (RPT), con los cambios que se propondrán, dejarán la plantilla de la Diputación en 1.158 empleados públicos. Y uno de los principales cambios será la separación de nuevo del Servicio de Asistencia a Municipios (SAM) y de Cooperación, algo que se hace para buscar encaje tras sucesivos varapalos judiciales perdidos contra los recursos sistemáticos de algunos funcionarios, pero que Majo recordó también que "se ha pedido muchas veces desde los ayuntamientos, las juntas vecinales" e incluso "los partidos políticos" de la institución.
2017 será un año que marcará un antes y un después en la estructura laboral de toda la vida de la Diputación de León. Su presidente, Juan Martínez Majo, ha admitido que los procesos de modificación de la estructura orgánica y de la relación de puestos de trabajo que se aprobarán este miércoles en el Pleno de la Diputación, está por ver con qué apoyos de los partidos de la oposición cuenta. También confirmó que a lo largo del próximo ejercicio se aplicarán muchos concursos de traslados para resituar a funcionarios al amplio número de interinos de larga duración en el Palacio de los Guzmanes.
Para Majo, es algo que "jamás se ha hecho en la institución" y que defendió como necesario, imprescindible, así como aplicando "criterios y baremos de méritos" y siempre en el marco de una mesa negociadora formada por los sindicatos, de quines aseguró en numerosas ocasiones que cuenta con el apoyo mayoritario, aunque no se trasladó así en la reunión del pasado día 19 de diciembre. Una completa "reestructuración de la plantilla" que se realice sin que haya "inquietudes de los trabajadores", defendió en la rueda de prensa en la que presentó los presupuestos para 2017. "Conllevará quebraderos de cabeza, pero es necesario", añadió.
La Relación de Puestos de Trabajo (RPT), con los cambios que se propondrán, dejarán la plantilla de la Diputación en 1.158 empleados públicos. Y uno de los principales cambios será la separación de nuevo del Servicio de Asistencia a Municipios (SAM) y de Cooperación, algo que se hace para buscar encaje tras sucesivos varapalos judiciales perdidos contra los recursos sistemáticos de algunos funcionarios, pero que Majo recordó también que "se ha pedido muchas veces desde los ayuntamientos, las juntas vecinales" e incluso "los partidos políticos" de la institución.






