El ojo que todo lo ve
Miércoles, 28 de Diciembre de 2016

El pacto PP-PAL hace aguas

Desde hace algo más de dos meses la desconfianza entre las dos formaciones que sellaban el pasado mes de marzo el acuerdo de gobierno, es más que evidente de puertas para adentro de la Casa Consistorial.

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Los desencuentros han comenzado desde que en el PP ven con temor la habilidad de Pablo Peyuca González para meterse en las fotos y la hiperactividad que desarrolla al frente de la Concejalía de Comercio, dejando en un segundo plano al alcalde, a quien el PAL en la intimidad califican de "pan sin sal" y de cuyos discursos públicos se mofan por el "tufillo a sotana y sacristía" que desprenden. Fue muy evidente entre los representantes del PAL, el "cachondeo" que provocó la "homilía" -como denominan desde el PAL los discursos de Arsenio García- en la cena de la Junta Profomento de la Semana Santa, donde el arrobo manifestado por el regidor dejó pequeñas las palabras, incluso, del obispo, un hecho muy comentado también entre algunos comensales.

 

Fuentes del PAL han confirmado a Astorga Redacción "estar cansados" de los discursos del alcalde en los que "no dice nada, salvo recordar una y otra vez su condición de funcionario de carrera, la condición de funcionario de carrera de alguno de sus antepasados e incluso de los de Húsar Tiburcio, y de la carrera de fondo que un pobrecito chaval del barrio de Puerta de Rey ha tenido que desarrollar para 'marcarse' unos 'tochos infumables' sobre la Guerra de la Independencia", han señalado las citadas fuentes de la formación liderada por Pablo Peyuca González sin haber leído un sólo libro del que apoyan en el gobierno.

 

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Las fuentes consultadas por este periódico también han lanzado sus dardos sobre el concejal de Recursos Humanos, Manuel Ortiz, por "el ambiente irrespirable que está provocando entre los trabajadores del Ayuntamiento", han indicado. Todo parece indicar, que el PAL se está desmarcando de la "caótica política de personal", así la han calificado porque, entre otras situaciones, ha provocado recientemente el cierre de la Biblioteca Municipal durante un par de tardes por no haber previsto que una de las trabajadoras tenía que disfrutar de los días para asuntos propios que le reconoce la ley. 

 

Desde el PAL también se mofan del concejal "estratega", así es como califican a Manuel Ortiz, cuyos discursos también son dignos de analizar. "Este va de padre por la vida y se 'pega' a la rueda de Peyuca por su incapacidad para emprender proyectos por sí mismo", indican esas mismas fuentes del PAL. "Tanta estrategia, tanta estrategia, pero es incapaz de sacar adelante el contrato de la basura...", han manifestado. La capacidad de observación de algún miembro del PAL asiduo a los plenos municipales, ha advertido a esta redacción de que "el cachondeo con los discursos cargados de estrategia del susodicho concejal, es palpable entre el alcalde y el concejal Ángel Iglesias, que con solo mirarse cada vez que Ortiz pronuncia la palabra 'estrategia' se parten el pecho de risa". 

 

Aunque de estrategias "también va servida Silvia Cobos y su Plan Director de Turismo, con el que se ha gastado una 'pasta' para que una empresa diga lo que todos sabíamos", apuntan las fuentes del PAL, quienes empiezan a estar cansados "del lustre de agua y jabón que están aplicando a la fachada de la ciudad pero que en cuanto rascas un poco, esto no hay quien lo apoye".

 

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El más que evidente mal ambiente entre los socios de gobierno que están generando los discursos y las estrategias inconclusas, también es extensible a los propios compañeros del equipo del PP. La elegida en este caso es la responsable de Servicios Sociales, Laura Galindo. Desde la máxima discreción y con miles de ojos abiertos para asegurarse de que nadie escuchaba esta conversación con Astorga Redacción (periódico, al que por cierto, algunos miembros del gobierno leen en la clandestinidad), el o la concejal 'disidente' ha indicado que "me hago cruces sólo de pensar cómo esta mujer puede bajar a pisar el barro de, por ejemplo, los pabellones de la Renfe con los zapatitos de tacones con que se presenta cada día en el Ayuntamiento. Me inclino a pensar que nunca baja". 

 

Con esta inocencia se expresaban las fuentes consultadas del PAL que han augurado que "en cuanto empiece a 'oler' a elecciones nosotros nos desmarcamos de este sainete y de todos los estómagos agradecidos que rodean al PP".

 

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