Una final de bolos con sonido de castañuelas de fondo y un vinín
![[Img #39204]](upload/img/periodico/img_39204.jpg)
![[Img #39194]](upload/img/periodico/img_39194.jpg)
La final del Campeonato de Bolos Maragatos de las fiestas de la Carballeda del Val de San Lorenzo estaba programada para las cinco, pero las tardes todavía son largas y en día de fiesta se requiere una larga siesta para recuperar. Además algunos de los participantes no disfrutaban de día festivo y había que esperar a que terminaran sus respectivas jornadas laborales. Mientras tanto los niños y algunos adultos disfrutaban de los hinchables en el parque. El ambigú se iba animando así que se acercaban las siete. Era el momento para probar una tirada y comprobar lo difícil que es a esa distancia con una piedra amurada sobre el suelo, encajar la bola sobre los bolos.
![[Img #39205]](upload/img/periodico/img_39205.jpg)
![[Img #39195]](upload/img/periodico/img_39195.jpg)
![[Img #39199]](upload/img/periodico/img_39199.jpg)
A eso de las siete y media fueron llegando los participantes y comenzó la disputa entre los contendientes. El ganador indiscutible del tiro a la piedra era ya Vicente Fernández. Sin embargo faltaba por decidir quién sería el ganador del tiro a la poza, pues había un empate entre tres de los participantes: Ismael Cuesta, Miguel Ángel Cuervo y Joaquín Alonso. Saliendo vencedor del triple empate Ismael Cuesta.
![[Img #39196]](upload/img/periodico/img_39196.jpg)
![[Img #39200]](upload/img/periodico/img_39200.jpg)
Comenzó entonces la final por equipos. En la pista del ambigú ya bailaban los valuros y valuras al son de flauta y tamboril y las castañetas no paraban de croar.
![[Img #39202]](upload/img/periodico/img_39202.jpg)
![[Img #39198]](upload/img/periodico/img_39198.jpg)
Finalistas eran el equipo C y el equipo D. La disputa era a ocho juegos y se fueron adelantando el uno al otro hasta que al final el resultado fue de ocho a cinco para el equipo formado por Vicente Fernández Palacio, Paulo M. Brito y Juan José Sanguina, quedando en segundo lugar el equipo formado por Miguel Luengo Perandones, Jaime Alonso Martínez y Miguel Ángel Cuervo Geijo.
![[Img #39206]](upload/img/periodico/img_39206.jpg)
![[Img #39197]](upload/img/periodico/img_39197.jpg)
Entre tanto a los espectadores se les había invitado a unas pastas y a un ‘vinín’ que repartían de una caja los organizadores. Se procedió a la entrega de premios mientras continuaba el baile en la pista y la lumbre era todavía abundante en las parrillas.
La final del Campeonato de Bolos Maragatos de las fiestas de la Carballeda del Val de San Lorenzo estaba programada para las cinco, pero las tardes todavía son largas y en día de fiesta se requiere una larga siesta para recuperar. Además algunos de los participantes no disfrutaban de día festivo y había que esperar a que terminaran sus respectivas jornadas laborales. Mientras tanto los niños y algunos adultos disfrutaban de los hinchables en el parque. El ambigú se iba animando así que se acercaban las siete. Era el momento para probar una tirada y comprobar lo difícil que es a esa distancia con una piedra amurada sobre el suelo, encajar la bola sobre los bolos.
A eso de las siete y media fueron llegando los participantes y comenzó la disputa entre los contendientes. El ganador indiscutible del tiro a la piedra era ya Vicente Fernández. Sin embargo faltaba por decidir quién sería el ganador del tiro a la poza, pues había un empate entre tres de los participantes: Ismael Cuesta, Miguel Ángel Cuervo y Joaquín Alonso. Saliendo vencedor del triple empate Ismael Cuesta.
Comenzó entonces la final por equipos. En la pista del ambigú ya bailaban los valuros y valuras al son de flauta y tamboril y las castañetas no paraban de croar.
Finalistas eran el equipo C y el equipo D. La disputa era a ocho juegos y se fueron adelantando el uno al otro hasta que al final el resultado fue de ocho a cinco para el equipo formado por Vicente Fernández Palacio, Paulo M. Brito y Juan José Sanguina, quedando en segundo lugar el equipo formado por Miguel Luengo Perandones, Jaime Alonso Martínez y Miguel Ángel Cuervo Geijo.
Entre tanto a los espectadores se les había invitado a unas pastas y a un ‘vinín’ que repartían de una caja los organizadores. Se procedió a la entrega de premios mientras continuaba el baile en la pista y la lumbre era todavía abundante en las parrillas.