El equipo de prevención de la BRIF de Tabuyo realiza quemas controladas en Cabrera
El Equipo de Prevención Integral de Incendios Forestales (Eprif) de la base BRIF de Tabuyo del Monte se encuentra estos días realizando quemas controladas en los montes de la comarca de Cabrera. Los trabajos desarrollados este lunes en la zona de Pozos y Manzaneda no han pasado desapercibidos en Astorga y en diferentes puntos de nuestras comarcas, debido a la impresionante columna de humo perfectamente visible desde el Paseo de la Muralla que ha alertado a numerosas personas.
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Se trata de quemas dirigidas por los técnicos BRIF de Tabuyo fuera de la campaña para prevenir los incendios forestales. El Eprif que trabaja estos días en Cabrera forma parte de la red de equipos diseminados por las zonas de mayor utilización del fuego, diseñada para conciliar intereses con la población rural con el fin de gestionar el territorio y de servir de nexo de unión entre la Administración autonómica, que es quien coordina estos equipos, y los habitantes de las localidades que, en algunas zonas, tienen muy arraigada la utilización del fuego, por ejemplo, para la regeneración de pastos para el ganado. "Los EPRIF consensúan con las poblaciones cuándo y cómo se realizarán las quemas prescritas o controladas en la superficie solicitada por los propietarios de los montes", asegura el técnico de Tabuyo, Roberto López, en el libro '25 años BRIF: un relato forjado a fuego'.
Estas quemas controladas, o prescritas, las solicitan a los agentes medioambientales de la zona o al Servicio de Protección de la Naturaleza de la Junta de Castilla y León las juntas vecinales, ganaderos o titulares de los cotos de caza. Durante la actuación del Eprif "es muy importante que los solicitantes estén presentes en todos los pasos de la planificación", señala Roberto López. Primero hablan con el interesado para saber cuáles son los motivos para realizar una quema, "si vemos que es técnicamente posible redactamos una memoria con las prescripciones a tener en cuenta, ya que adaptamos el tipo de fuego a los objetivos del solicitante".
En la comarca de La Cabrera, numerosas superficies tradicionalmente aprovechadas para pastos están en la actualidad invadidas por matorral ante el descenso del número de cabezas de ganado. En esos casos, "debemos utilizar una intensidad de fuego adecuada para evitar rebrotes muy altos de las plantas pirófitas, como los brezos y algún tipo de escobas. Una vez redactado el plan de quema, buscamos el día idóneo. En la zona de actuación del Eprif de Tabuyo podemos tener como máximo unos 15 días idóneos al año, por lo que hemos de seleccionar muy bien los tratamientos a aplicar", explica el técnico de la base de Tabuyo.
Estas labores de prevención no solamente se realizan mediante las quemas controladas, también a través de desbroces, podas, clareos, etc., a las que los agentes de la BRIF se dedican fuera de la campaña de incendios, entre los meses de noviembre y abril. "Nuestra misión -asegura el técnico- es asesorar a los interesados sobre si es viable o no la quema porque, por ejemplo, algunas solicitudes no las podemos atender al encontrarse el terreno en un área natural protegida o por la existencia de masa arbolada. El uso del fuego en la zona del Eprif de Tabuyo del Monte está muy vinculado a la gestión del territorio, pero no tiene por qué ser la única herramienta, por ejemplo, las Brigadas de Labores Preventivas (BLP) desbrozan pistas, cortafuegos, crean fajas auxiliares de pistas… con desbrozadoras y motosierras".
Se trata de quemas dirigidas por los técnicos BRIF de Tabuyo fuera de la campaña para prevenir los incendios forestales. El Eprif que trabaja estos días en Cabrera forma parte de la red de equipos diseminados por las zonas de mayor utilización del fuego, diseñada para conciliar intereses con la población rural con el fin de gestionar el territorio y de servir de nexo de unión entre la Administración autonómica, que es quien coordina estos equipos, y los habitantes de las localidades que, en algunas zonas, tienen muy arraigada la utilización del fuego, por ejemplo, para la regeneración de pastos para el ganado. "Los EPRIF consensúan con las poblaciones cuándo y cómo se realizarán las quemas prescritas o controladas en la superficie solicitada por los propietarios de los montes", asegura el técnico de Tabuyo, Roberto López, en el libro '25 años BRIF: un relato forjado a fuego'.
Estas quemas controladas, o prescritas, las solicitan a los agentes medioambientales de la zona o al Servicio de Protección de la Naturaleza de la Junta de Castilla y León las juntas vecinales, ganaderos o titulares de los cotos de caza. Durante la actuación del Eprif "es muy importante que los solicitantes estén presentes en todos los pasos de la planificación", señala Roberto López. Primero hablan con el interesado para saber cuáles son los motivos para realizar una quema, "si vemos que es técnicamente posible redactamos una memoria con las prescripciones a tener en cuenta, ya que adaptamos el tipo de fuego a los objetivos del solicitante".
En la comarca de La Cabrera, numerosas superficies tradicionalmente aprovechadas para pastos están en la actualidad invadidas por matorral ante el descenso del número de cabezas de ganado. En esos casos, "debemos utilizar una intensidad de fuego adecuada para evitar rebrotes muy altos de las plantas pirófitas, como los brezos y algún tipo de escobas. Una vez redactado el plan de quema, buscamos el día idóneo. En la zona de actuación del Eprif de Tabuyo podemos tener como máximo unos 15 días idóneos al año, por lo que hemos de seleccionar muy bien los tratamientos a aplicar", explica el técnico de la base de Tabuyo.
Estas labores de prevención no solamente se realizan mediante las quemas controladas, también a través de desbroces, podas, clareos, etc., a las que los agentes de la BRIF se dedican fuera de la campaña de incendios, entre los meses de noviembre y abril. "Nuestra misión -asegura el técnico- es asesorar a los interesados sobre si es viable o no la quema porque, por ejemplo, algunas solicitudes no las podemos atender al encontrarse el terreno en un área natural protegida o por la existencia de masa arbolada. El uso del fuego en la zona del Eprif de Tabuyo del Monte está muy vinculado a la gestión del territorio, pero no tiene por qué ser la única herramienta, por ejemplo, las Brigadas de Labores Preventivas (BLP) desbrozan pistas, cortafuegos, crean fajas auxiliares de pistas… con desbrozadoras y motosierras".
