Redacción
Viernes, 29 de Marzo de 2019

La valía de las mujeres astorganas resumida en las cuatro galardonadas por los Premios Augusta

Cuatro representantes de las mujeres astorganas han recogido este viernes los Premios Augusta otorgados por la Concejalía de Servicios en la gala celebrada en el Teatro Gullón. Sagrario González, Cruz Campa, las voluntarias de Manos Unidas y Paula del Río han protagonizado el acto con el que se ha puesto el punto final al programa de actividades en torno al mes dedicado a la mujer.

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Son cuatro representantes de otros tantos colectivos en los que la presencia de las mujeres es vital para seguir armando una sociedad más igualitaria y justa. En la gala, conducida por Milagros Alonso Cepedano, se dieron cita representantes de las instituciones y colectivos de la ciudad que arroparon con su presencia la entrega de los premios consistentes en la reproducción de una moneda romana del sigo IV después de Cristo encontrada en las Termas Menores de la calle Padre Blanco, se trata de un ejemplar que el emperador Constantino I dedicó a su madre, Helena Augusta, que aparece en el anverso. La moneda engarzada en una corona de laurel es obra del maestro joyero José Manuel Santos.

 

La primera en subir al escenario del Teatro Gullón fue la joven deportista Paula del Río para recoger el Premio Joven Promesa "en reconocimiento a su prometedor recorrido en el mundo de la natación, su esfuerzo, superación y valores deportivos y personales". Entre los méritos de la nadadora la presentadora de la gala destacó que desde los comienzos es habitual verla en los pódium. Entre otros muchos premios, en su palmarés destaca por ser varias veces campeona de Castilla y León absoluta en la prueba de 100 braza, 3 veces seleccionada por Castilla y León para disputar el Campeonato de España por comunidades, 3 veces consecutivas disputando el campeonato de España individual, quedando 8ª en la prueba de 100 braza, aun compitiendo contra deportistas de mayor nivel y preparación. Desde los 12 años ha estado entre las 3 mejores bracistas de toda Castilla y León, y este año acudirá por 4ª vez consecutiva al campeonato de España que se celebrará en Madrid a finales de julio. Aunque más allá de los méritos deportivos Paula dle Río también es reconocida por ser "una persona responsable, muy trabajadora, altamente exigente consigo misma, buena persona y gran compañera". La premiada aseguró sentirse "orgullosa" y dio las gracias a su familia, compañeros del Club Natación Astorga, a su entrenador Estiz González así como a todas las personas que le apoyan. Le entregó el premio la concejala de Servicios Sociales, Laura Galindo.

 

Las voluntarias de Manos Unidas fueros las siguientes en recoger el galardón, en esta ocasión el Premio a la Solidaridad. Toñi, Charo, Mercedes... y tantas otras mujeres que hoy siguen 'tirando del carro' de una organización no gubernamental que comenzó a dar sus primeros pasos en la diócesis de Astorga hace 60 años. Aseguraba la presentadora de la gala que "en el año 1959, un grupo de mujeres astorganas, que formaban parte de Acción Católica, deciden unirse a la llamada de un nuevo proyecto que supone un reto casi utópico a nivel mundial: declarar la guerra al hambre. Este fue el grito de esperanza con el que nació la primera Campaña contra el hambre. Una semilla con 60 años de abundante cosecha". Y aquel "sueño que comenzó hace 60 años, y que gracias al trabajo, el esfuerzo y la tenacidad de todas las personas voluntarias que conforman Manos Unidas, consiguen que ese sueño cada día esté más cerca de convertirse en realidad". El premio a la ONG supone el reconocimiento de toda la ciudad a la la dedicación constante desde la fundación de la Asociación en Astorga, por parte de todas las mujeres que la han integrado, por sus esfuerzos en la búsqueda de financiación y por sus valores solidarios, humanos y sociales. Las voluntarias señalaron que este premio supone "una alegría muy grande y un estímulo para seguir trabajando. Este premio es de todas las personas que llevan trabajando desde hace tanto tiempo, ojalá algún día podamos decir que no somos necesarias. Lo hacemos extensivo a todas las voluntarias que trabajan en la diócesis, porque nosotras sin las comarcales y los voluntarios no podemos funcionar". Les entregó el galardón al diputado provincial José Miguel Nieto.

 

El Premio Mujer Embajadora recayó en la fotógrafa Cruz Campa  en reconocimiento "a su brillante trayectoria profesional en el mundo de la fotografía, con una importante proyección internacional". Antes de recoger el galardón de manos del delegado territorial de la Junta, Guillermo García, la presentadora de la gala ponía de relieve su trabajo en proyectos nacionales e internacionales, todos ellos realizados con "pasión, renovación y tenacidad son las tres palabras que definen su trabajo y que la han convertido en todo un referente en la industria de la fotografía en nuestro país. Y, no solo lo es en el panorama nupcial con sus reportajes de boda, preboda y postboda, sino a nivel general, gracias a sus colaboracionesen diferentes medios de comunicación de tirada nacional". La galardonada aseguraba que este premios "es un orgullo que me hace valorar aún más la ciudad y que supone un impulso para seguir levantándome cada día con fuerza".

 

La última en subir al escenario del Teatro Gullón fue la empresaria Sagrario González, Premio Mujer Astorgana del Año. Hija y hermana de empresarios hosteleros y hoteleros. Milagro Alonso destacó de la galardonada su compromiso con la ciudad a través de las numerosas responsabilidades adquiridas con asociaciones y colectivos astorganos,"muy comprometida con su trabajo y su ciudad, Sagrario es conocida por ser una mujer decidida, trabajadora, emprendedora, tenaz, que no duda en demostrar carácter por defender sus objetivos, y por encima de todo, una persona muy unida a su familia". Hoy la premiada está al frente del Atlético Astorga, el club de fútbol que preside desde el año 2010 cuando atravesaba un momento difícil pero que supo revertir con la ilusión y las ganas puestas junto a los equipos directivos, esta faceta que provocó "un revuelo mediático al ser una de las pocas mujeres al frente de un equipo de fútbol". Con ella al frente, la afición astorgana disfrutó con el ascenso a Segunda B. Sagrario González dio las gracias a sus amigos, familia y en especial a sus hijos y a sus padres "el mejor ejemplo que he podido tener, de los que aprendí los valores importantes en la vida, los mismos que hoy intento transmitir a mis hijos". El alcalde fue el encargado de entregale la estatuilla.

 

 

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