Niebla al mediodía
![[Img #20068]](upload/img/periodico/img_20068.jpg)
Lo bueno si breve dos veces bueno. Y esto es precisamente lo que hoy destacamos del libro: 'Niebla al mediodía' de Tomás González, que ha sido publicado por la Editorial 'Alfaguara'.
'Niebla al mediodía' está construida alrededor de un enigma que prácticamente se desvela desde el principio. Sin embargo, como sucede en toda buena obra literaria, el misterio está en otra parte: amarrado a la fuerza de las voces, a la belleza inquietante de los escenarios, a la conversación solitaria de sus cuatro personajes.
Julia desapareció hace siete meses, después de abandonar a Raúl. Sólo quedan su recuerdo persistente, su presencia fantasmal y su voz. Raúl observa el paisaje y siente a Julia en los silencios. Su amor por ella fue grande y opresivo, y casi lo enloquece su abandono. Raquel vive en Nueva York y enseña literatura. Detesta a Julia, pero su fantasma la ronda en las noches como un presentimiento lúgubre. Aleja es amiga de Julia y cuenta la otra parte de la historia.
Con la poderosa precisión de su lenguaje, Tomás González logra una vez más la proeza de convertir una historia sencilla de desamor en un , poderoso ejercicio de exploración del alma humana.
Lo bueno si breve dos veces bueno. Y esto es precisamente lo que hoy destacamos del libro: 'Niebla al mediodía' de Tomás González, que ha sido publicado por la Editorial 'Alfaguara'.
'Niebla al mediodía' está construida alrededor de un enigma que prácticamente se desvela desde el principio. Sin embargo, como sucede en toda buena obra literaria, el misterio está en otra parte: amarrado a la fuerza de las voces, a la belleza inquietante de los escenarios, a la conversación solitaria de sus cuatro personajes.
Julia desapareció hace siete meses, después de abandonar a Raúl. Sólo quedan su recuerdo persistente, su presencia fantasmal y su voz. Raúl observa el paisaje y siente a Julia en los silencios. Su amor por ella fue grande y opresivo, y casi lo enloquece su abandono. Raquel vive en Nueva York y enseña literatura. Detesta a Julia, pero su fantasma la ronda en las noches como un presentimiento lúgubre. Aleja es amiga de Julia y cuenta la otra parte de la historia.
Con la poderosa precisión de su lenguaje, Tomás González logra una vez más la proeza de convertir una historia sencilla de desamor en un , poderoso ejercicio de exploración del alma humana.
