Las obras del vaso del CTR comenzarán a principios de 2017
La Junta y Gersul han firmado el convenio de un proyecto que supondrá una inversión 11,8 millones de euros, incluida la construcción y su futuro sellado
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El convenio firmado este viernes implica a la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, al Consorcio para la Gestión de Residuos Sólidos Urbanos de la provincia de León (GERSUL) y a la Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente de Castilla y León (Somacyl) y tiene por objeto la construcción y gestión durante quince años de un nuevo vaso de rechazos en el Centro de Tratamientos de Residuos Sólidos Urbanos de San Román de la Vega y su sellado final una vez colmatado.
Somacyl construirá, gestionará y sellará el vaso y Gersul asumirá el mantenimiento su mantenimiento y su desgasificación. De esta forma ha sido anunciado en la Diputación de León la ampliación del Centro de Tratamiento de Residuos (CTR) de San Román de la Vega, un proyecto que fue aprobado a pesar de la abstención histórica por falta de documentación en relación al convenio financiador.
En la firma del proyecto, las partes han asegurado que no hay motivo de alarma, que se cumplirán los plazos y que no se subirán las tasas. "Vamos a llegar a tiempo sí o sí", ha sentenciado Suárez Quiñones, quién ha admitido que no se dará la situación de no disponer de un lugar para depositar los residuos, y ha añadido que se trata de un problema que afecta a los 208 municipios de la provincia.
El proyecto supondrá una inversión global de 11,8 millones de euros, de los que la Consejería de Fomento y Medio Ambiente aportará el 30 % del nuevo vaso. El resto de la financiación correrá a cargo de Gersul que lo repercutirá de forma diferida en la tarifa que pagan los leoneses, que asciende a 9,47 euros por tonelada. La construcción del vaso supone una inversión de 6.170.466 euros y su futuro sellado otros 5.641.076 euros.
El nuevo vaso ocupará una superficie de más de 130.000 metros cuadrados, con una capacidad de dos millones de toneladas de residuos que permitirá una vida útil de quince años, teniendo en cuenta que la producción anual de residuos asciende a 150.000 toneladas.
Las obras comenzarán a principios de 2017 con un plazo de ejecución de 11 meses y un desarrollo en cuatro fases que serán selladas a medida que se vayan colmatando. Igualmente, el proyecto incluye la impermeabilización, desgasificación, dren de seguridad, tratamiento de lixiviados y programa de vigilancia y control.
El CTR de San Román de la Vega funciona desde 2004 y dispone de una planta de tratamiento y depósito de rechazos con capacidad para 1,7 millones de toneladas. Actualmente, está ya sellado parcialmente y prácticamente finalizando su vida útil por lo que se hace necesaria la construcción de un nuevo vaso de rechazos que siga dando servicio los próximos años. Esta planta de reciclaje y compostaje de residuos sólidos urbanos, titularidad de Gersul, cuenta con una autorización ambiental que integra las prescripciones sobre eliminación de residuos mediante el depósito en vertedero y contaminación atmosférica y la autorización de vertido de aguas continentales.
El convenio firmado este viernes implica a la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, al Consorcio para la Gestión de Residuos Sólidos Urbanos de la provincia de León (GERSUL) y a la Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente de Castilla y León (Somacyl) y tiene por objeto la construcción y gestión durante quince años de un nuevo vaso de rechazos en el Centro de Tratamientos de Residuos Sólidos Urbanos de San Román de la Vega y su sellado final una vez colmatado.
Somacyl construirá, gestionará y sellará el vaso y Gersul asumirá el mantenimiento su mantenimiento y su desgasificación. De esta forma ha sido anunciado en la Diputación de León la ampliación del Centro de Tratamiento de Residuos (CTR) de San Román de la Vega, un proyecto que fue aprobado a pesar de la abstención histórica por falta de documentación en relación al convenio financiador.
En la firma del proyecto, las partes han asegurado que no hay motivo de alarma, que se cumplirán los plazos y que no se subirán las tasas. "Vamos a llegar a tiempo sí o sí", ha sentenciado Suárez Quiñones, quién ha admitido que no se dará la situación de no disponer de un lugar para depositar los residuos, y ha añadido que se trata de un problema que afecta a los 208 municipios de la provincia.
El proyecto supondrá una inversión global de 11,8 millones de euros, de los que la Consejería de Fomento y Medio Ambiente aportará el 30 % del nuevo vaso. El resto de la financiación correrá a cargo de Gersul que lo repercutirá de forma diferida en la tarifa que pagan los leoneses, que asciende a 9,47 euros por tonelada. La construcción del vaso supone una inversión de 6.170.466 euros y su futuro sellado otros 5.641.076 euros.
El nuevo vaso ocupará una superficie de más de 130.000 metros cuadrados, con una capacidad de dos millones de toneladas de residuos que permitirá una vida útil de quince años, teniendo en cuenta que la producción anual de residuos asciende a 150.000 toneladas.
Las obras comenzarán a principios de 2017 con un plazo de ejecución de 11 meses y un desarrollo en cuatro fases que serán selladas a medida que se vayan colmatando. Igualmente, el proyecto incluye la impermeabilización, desgasificación, dren de seguridad, tratamiento de lixiviados y programa de vigilancia y control.
El CTR de San Román de la Vega funciona desde 2004 y dispone de una planta de tratamiento y depósito de rechazos con capacidad para 1,7 millones de toneladas. Actualmente, está ya sellado parcialmente y prácticamente finalizando su vida útil por lo que se hace necesaria la construcción de un nuevo vaso de rechazos que siga dando servicio los próximos años. Esta planta de reciclaje y compostaje de residuos sólidos urbanos, titularidad de Gersul, cuenta con una autorización ambiental que integra las prescripciones sobre eliminación de residuos mediante el depósito en vertedero y contaminación atmosférica y la autorización de vertido de aguas continentales.
