Conversación con Pablo de Unamuno, nieto de Miguel de Unamuno
Pablo de Unamuno: "Los pilares de la sanidad pública tenemos que protegerlos por encima de todo"
'Conversaciones sin Red' puso frente a frente este sábado en Veguellina de Órbigo a Tomás Néstor Martinez y Pablo de Unamuno, médico y nieto del reconocido escritor y pensador Miguel de Unamuno, justo cuando se cumple el 80 aniversario de su histórico discurso ‘Venceréis, pero no convenceréis’ ante el golpista José Millán Astray y su grito de “Muera la inteligencia”.
Con la colaboración de Tomás Néstor Martínez y bajo el impulso de la Concejalía de Educación, Cultura y Juventud que dirige Balbino Ferrero, Pablo Unamuno se explayó sobre la figura de su abuelo y sobre el peligro por el que pasa la sanidad pública española.
De esa prolongada conversación que duró algo más de una hora extraemos aquí a modo de entrevista lo que consideramos fundamental.
![[Img #25283]](upload/img/periodico/img_25283.jpg)
Tomás Nestor: “Aquí mis nietos se quedan/ alentando mientras puedan/ respirar/ La vista fija en el suelo,/ ¿Qué pensarán de un abuelo/ singular?.
Pablo de Unamuno médico, profesor de la Universidad de Salamanca, ya se dedica a disfrutar del tiempo y sobre todo está muy comprometido con la sanidad pública, tanto en Salamanca como en Castilla y León. Cuando hubiere alguna reclamación o algo que pedir ahí estaría Pablo de Unamuno. ¿Siempre sin bata, no?
¿Qué diagnóstico le harías tú a la sanidad actual?
Pablo de Unamuno: Que está malita, está malita la sanidad, pero yo creo que puede mejorar y si todos ponemos un poco de interés, pienso que todavía no está grave. Es recuperable. En los últimos cinco años los recortes en sanidad la han deteriorado un poco. Al ser la mejor sanidad del mundo, bueno de las mejores, yo creo que el deterioro no va a ser tan grave, y si el gobierno, los ciudadanos y los profesionales que trabajan en ella se empeñan la recuperaremos.
¿Quién te manda a ti, con lo bien que estarías en el club de los 60, viajando por ahí, meterte en estos líos de la sanidad pública, manifestándote?
La has liado. Nuestra sanidad es una de las mejores del mundo. Se basa en cuatro pilares muy importantes, cuatro columnas que no deben de resquebrajarse que son: la universalidad, es para todo ciudadano del territorio español, sea español o no sea español, se perdió la universalidad en abril de 2012, porque hay 800.000 ciudadanos no españoles que perdieron este derecho; fue un error, pues se han creado con ello muchos problemas sanitarios. Segundo pilar, la solidaridad: la sanidad la paga el Estado, no es gratis, la pagamos todos a través de los impuestos, por eso es solidaria. Tercer pilar: la equidad, a pesar de que no todos pagamos lo mismo, todos tenemos los mismos derechos. La cuarta columna: la accesibilidad, todo el mundo tiene un acceso fácil, que se está perdiendo. Uno va a su médico de cabecera, que hasta hace nada era de un día para otro, en Castilla y León cada vez se demora más. Esos cuatro pilares nos daban distinción y tenemos que protegerlo por encima de todo.
Pero qué ha pasado recientemente, ¿cuál era el negocio en España de las grandes empresas, de los ‘lobbies’ internacionales, de las grandes fortunas? El negocio hasta hace cinco años era la construcción, era el chollo para que los que ya tienen tuvieran mucho más, cuando esto se vino abajo ¿dónde había dinero en España? En sanidad. Con lo cual las empresas que antes estaban en la construcción ahora están invirtiendo en la sanidad, y están construyendo hospitales y están queriendo atraer parte del dinero público de la sanidad pública a la privada. Si se traslada el dinero de lo público a lo privado, lo público se va a deteriorar para mejorar lo privado. Y si se deteriora, lo público se termina ahí, quedaría como en Estados Unidos, lo que es público es de beneficencia y lo que es privado son para unos pocos. Y aquí no debieramos de permitir que eso sucediera.
Una pregunta que seguro que nunca, nunca te han hecho. Tu abuelo a qué se dedicaba.
Enlazando con el último verso del poema que has leído que dice "¿Qué pensarán de un abuelo singular?" Cuando yo era niño ya me preguntaban ¿Y tu abuelo qué es? Y yo decía, sabio. Mi abuelo para mí que era un niño, era sabio. Después me he enterado, leyendo la obra de mi abuelo que él no quería ser conocido como sabio, quería ser conocido como poeta. Y creo que lo ha logrado, pues en los últimos 20 años ya todo el mundo conoce más a Unamuno como poeta que como ensayista, publicista o novelista.
Al hilo de lo que estás diciendo llevamos unos años en que se vuelve a citar muchísimo a Miguel de Unamuno. Por ejemplo: su Majestad el Rey en la entrega de los premios Princesa de Asturias, citó a Unamuno. En el parlamento, los más ilustrados también citan a Unamuno, los ‘desilustrados’ lo citan mal. ¿Está de moda otra vez?
Sí, está de moda. En los últimos cinco años se le están haciendo constantes reconocimientos y homenajes. Casi todos ellos en las inmediaciones de Salamanca, y yo tengo que estar allí. Les digo a mis amigos: mi abuelo se me ha subido a la chepa y no se me baja, pues paso todos los días en homenajes y reconocimientos. Los estudiosos siguen encontrando cosas de provecho en la obra de Don Miguel de Unamuno. Ahora mismo se están recopilando las cartas que recibió de 4800 personas; también están reeditándose sus artículos como publicista, de los que cada vez salen más.
Tú también has sido actor en una película que se titula: ‘Natura non dat, Salamanca non presta’.
Sí, pero no fue una película, fue un paseo teatralizado. En el 2012 se declaró en Salamanca 'Año Miguel de Unamuno', con motivo del 75 aniversario de su fallecimiento. Y entre la infinidad de homenajes el Ayuntamiento organizó un ‘Paseo teatralizado’ y su director Roberto García Encinas puso en diálogo a La Latina, que fue la profesora de latín de Isabel la Católica con mi abuelo, Miguel de Unamuno. Yo hacía de Unamuno, por el parecido físico. Beatriz Galindo hacía el papel de la Latina y dada su profesionalidad me transmitía tranquilidad. La representaciós se hacía paseando por la calle, parándonos en distintos escenarios y representando aquellos diálogos, con la muchedumbre que nos acompañaba. Si yo me equivocaba Beatriz sabía sacarme del mal paso.
![[Img #25280]](upload/img/periodico/img_25280.jpg)
“Los hijos de mis hijos, si llegan, han de ser las obras de mi obra, llevando mi alma en pie.” ¿Lo hacéis?
Sí, lo hacemos. Yo creo que todos. Me está tocando a mí el papel más visible de la familia, por ser el único nieto que vive en Salamanca. Creo además que estoy manteniendo la orden de mi abuelo de mantener viva su obra, su espíritu y representando a la familia.
Tú realmente no lo conociste, pues Unamuno había muerto nueve años antes. Pero lo conoces a través de la familia.
Yo he oído a mi padre, también yo era niño cuando murió mi padre, pero mucho le oí contar. A mis tías, a mis primos mayores. Luego he leído mucho de lo que la familia escribió en relación con su padre o con su abuelo.
En Alemania era muy conocido y Curtius dice de él ‘Excitator Hispaniae’ y el Conde de Keyserling añade que es el español más importante de los tiempos modernos después de Goya. Y mientras tanto aquí ha dormido el sueño de los justos durante unos años.
Sí, ha dormido porque en el 36, tras aquel incidente que todo el mundo conoce, del 12 de octubre de 1936, hace ahora 80 años justos, ha sido injustamente condenado y olvidado, incluso algunas de sus obras pasaron al índice. Luego, poco a poco se fue recuperando la obra y el nombre de Miguel de Unamuno, pero es que en los últimos cinco años ha habido un boom, que lo ha puesto absolutamente de moda.
Tengo aquí un artículo de 1964, de un periódico de una ciudad cercana a Veguellina que dice así: “Unamuno está de moda en la Universidad española y entre los universitarios. Mal maestro. La obra de Don Miguel ha sido condenada por diferentes y muchos prelados…” ¿Al fin lo recuperamos?
Sí, y en Salamanca también recuperó el título de Alcalde Vitalicio de la ciudad, del que fue despojado a partir de aquella intervención del 12 de octubre.
¿‘La Isla del viento’ ya se ha estrenado o se estrena ahora?
Lo hará entre el 15 y el 18 de noviembre. Se ha hecho ya un preestreno en Salamanca el día 11 de octubre.
A mí una de las cosas que me más me llamó la atención de Miguel de Unamuno fue eso de la ‘Cocotología’. No me imagino a don Miguel siendo ‘cocotólogo’.
El llamaba ‘cocotología’ a la papiroflexia, al arte o a la afición de doblar el papel y hacer pajaritas de papel. Los que nos dedicamos a la cocotología llamamos pajarita a cualquier figura de papel. Unamuno hacía pajaritas con muchísima frecuencia, y no solamente en casa, sino en la cafetería. Luego esas figuritas que regalaba eran disputadas. En su época de destierro en París, le hizo una pajarita de papel a un niño y el niño le preguntó si aquella pajarita hablaba y a propósito de aquello escribió un poema que creo que se titula ‘Habla pajarita habla’.
“Procuremos más ser padres de nuestro porvenir que hijos de nuestro pasado.” Es una frase que te citarán con frecuencia ¿esto lo lees con frecuencia en algún escrito, en alguna lápida?
Ahí me has pillado…
¿No hay una inscripción en la casa…?
Donde vivió desde 1914 y en la cual murió en 1936.
![[Img #25279]](upload/img/periodico/img_25279.jpg)
Vamos con el abuelo. Fue un personaje complejo, un personaje muy discutido y muy discutible, pero él siempre dijo: “Quienes cambian son los otros. Yo nunca he cambiado.”
Para él, era la verdad ante todo siempre…
Efectivamente hay un aforismo suyo que dice “Primero la verdad, antes que la paz”.
No era un hombre de partido y no se ceñía a mandatos de nadie Seguramente de estar el otro día en la votación de investidura no hubiera seguido las directrices. El militó en su juventud en el Partido Socialista, pero enseguida dejó debido al encontronazo de esas directrices con su conciencia personal.
Eso me trae a cuento que Azaña le consultaba determinados temas, los franquistas lo alababan y él ponía a caldo a los 'hunos' con hache y a los 'hotros' con hache. Es decir que coincide a la perfección con lo que venimos comentando.
Efectivamente, él no se casaba con nadie y si tenía que decir la verdad la decía por encima de quién fuese.
“Venceréis porque tenéis sobrada fuerza bruta, pero no convenceréis porque convencer significa persuadir.” Hace 80 años, un 12 de octubre, sentado a una mesa, habiéndose jurado que no iba a abrir la boca, el rector de Salamanca de entonces, Maldonado…
No, era todavía él. Nada más producirse el alzamiento del 18 de julio, él era el rector. Como se adhirió a la sublevación, lo tengo que decir aunque no me haga muchísima gracia, ya que creyó que aquella sublevación era para rectificar los errores de la República. Con motivo de esa adhesión fue destituido por la República. Cuando Franco se asentó en Salamanca, en el Palacio del Obispo, en su Cuartel General, lo restituyó como rector.
Hay un comentario, no sé si rumor, que nunca ha sido suficientemente estudiado y es la visita que Don Miguel de Unamuno hace al General Franco, en el palacio obispal, un mes después de su polémica declaración para entregarle una lista de personas que pedía que no fueran fusiladas.
Eso fue antes del 12 de octubre no en noviembre. A partir de ese 12 de octubre ya no salió casi de casa. Salió el 13, que fue cuando le abuchearon en el casino y luego ya no volvió a salir. Un mes antes o así del 12 de octubre llevaba una lista de amigos suyos que estaban encarcelados, que eran entre otros muchos, Neto Villalobos y Atilano Coco, este era un pastor protestante muy amigo de él, y acudió a interceder por sus vidas, cosa que no consiguió pues a Atilano Coco lo fusilaron.
En ese mismo acto hay quien dice que tuvo que salir protegido por Carmen Polo, que lo acompaño debido a que los ánimos estaban pero que muy exaltados. Él iba decidido a no hablar, pero cuando oyó al profesor Maldonado criticando como cánceres al País Vasco, a Cataluña, él que era vasco y el obispo de aquel momento era catalán, no pudo aguantar más y fue cuando se lió la gresca.
Parece que no quería intervenir en aquel acto. Estaba muy preocupado por lo que estaba ocurriendo en España, a lo que él llamaba un 'suicidio colectivo'. Pero cuando oyó eso de ‘el cáncer de España’ hablando de vascos y catalanes, empezó a tomar notas precisamente en la carta de la mujer de Atilano Coco y fue cuando dijo lo de “Venceréis pero no convenceréis”.
Qué recuerdos tienes de la familia del destierro que había sufrido anteriormente en las Islas Canarias.
Fueron seis años muy duros, desde 1924 a 1930, en los que dejó de cobrar su sueldo. La familia tuvo que vivir un poco de las publicaciones, del trabajo de los hijos mayores. Fue de mucha dureza el destierro a Fuerteventura. Hasta que huyó a París y mantuvo un exilio voluntario. Lo pasó muy mal por la separación de su mujer, a la que adoraba, de sus hijos y de Salamanca y del País Vasco también, pues él jamás renunció a su condición de vasco.
![[Img #25281]](upload/img/periodico/img_25281.jpg)
Cuando estaba exiliado en Fuerteventura recibe una visita de la profesora Delfina Molina, que llevaba 30 años enviándole cartas, y un buen día se presenta con su marido y su hija a hacerle una visita. ¿No habría tenido otro momento de visitarlo para ir tan lejos? ¿o había algún enamoramiento?
Sí que lo había, pero no era correspondido. Llevaban más o menos 30 años carteándose, pero de literatura, no de amor. Cuando llegaron las cartas de Delfina Molina, me han contado mis tíos, mi abuela le decía. “Ahí tienes una carta de esa enamorada tuya, toma, toma la carta”. Mi abuela murió el 15 de mayo de 1934, Delfina Molina siguió escribiendo a mi abuelo. Unamuno no volvió a abrir ninguna de esas cartas.
Unamuno y Portugal. La relación fue morbosa, incluso le llegaron a nombrar ‘Presidente de Honor de los Ferrocarriles Portugueses’.
Por eso el viajaba a Portugal gratis. Viajaría en primera a dónde quisiera. Y bajaba y volvía a subir, según su capricho. En uno de sus escritos que se titula Guarda, él venía de Coimbra y al llegar a Guarda, se dice, anda no conozco esta ciudad, se bajó…
¿Y el tren esperó?
No, hicieron noche.
Pues cuenta que una vez hicieron una parada en una estación para comer y el tren esperó a que acabara la comida. Para eso era presidente de honor.
Allí en Guarda hizo noche, visitó Guarda y al día siguiente volvió a coger el tren. Tenía muchísimos amigos en Portugal, entre otros y destacado, el poeta Guerra Junqueiro.
Dónde encajarías en el año 2016 lo siguiente. “Solo el que ensaya lo absurdo es capaz de conquistar lo imposible.” Yo cuando leía esto mi cabeza se iba directamente a un partido político nuevo que hay hoy.
Sucede con muchos de los escritos de Miguel de Unamuno son de total actualidad, aunque tengan más de 80 años. En estos últimos años no han parado de preguntarme sobre lo que diría Miguel de Unamuno de la corrupción política actual.
¿Le publicarían eso que dijese todos los medios de comunicación?
No lo creo, su arma era la pluma. Hay una anécdota que me contó un salmantino un día paseando por la calle. Me dijo que su padre se encontró una vez con mi abuelo en la comisaría. El padre de mi interlocutor acudía a una revisión de un arma y Unamuno sacó su lápiz del bolsillo y le dijo: esto, esto sí que hace daño y no eso.
![[Img #25282]](upload/img/periodico/img_25282.jpg)
Con la colaboración de Tomás Néstor Martínez y bajo el impulso de la Concejalía de Educación, Cultura y Juventud que dirige Balbino Ferrero, Pablo Unamuno se explayó sobre la figura de su abuelo y sobre el peligro por el que pasa la sanidad pública española.
De esa prolongada conversación que duró algo más de una hora extraemos aquí a modo de entrevista lo que consideramos fundamental.
Tomás Nestor: “Aquí mis nietos se quedan/ alentando mientras puedan/ respirar/ La vista fija en el suelo,/ ¿Qué pensarán de un abuelo/ singular?.
Pablo de Unamuno médico, profesor de la Universidad de Salamanca, ya se dedica a disfrutar del tiempo y sobre todo está muy comprometido con la sanidad pública, tanto en Salamanca como en Castilla y León. Cuando hubiere alguna reclamación o algo que pedir ahí estaría Pablo de Unamuno. ¿Siempre sin bata, no?
¿Qué diagnóstico le harías tú a la sanidad actual?
Pablo de Unamuno: Que está malita, está malita la sanidad, pero yo creo que puede mejorar y si todos ponemos un poco de interés, pienso que todavía no está grave. Es recuperable. En los últimos cinco años los recortes en sanidad la han deteriorado un poco. Al ser la mejor sanidad del mundo, bueno de las mejores, yo creo que el deterioro no va a ser tan grave, y si el gobierno, los ciudadanos y los profesionales que trabajan en ella se empeñan la recuperaremos.
¿Quién te manda a ti, con lo bien que estarías en el club de los 60, viajando por ahí, meterte en estos líos de la sanidad pública, manifestándote?
La has liado. Nuestra sanidad es una de las mejores del mundo. Se basa en cuatro pilares muy importantes, cuatro columnas que no deben de resquebrajarse que son: la universalidad, es para todo ciudadano del territorio español, sea español o no sea español, se perdió la universalidad en abril de 2012, porque hay 800.000 ciudadanos no españoles que perdieron este derecho; fue un error, pues se han creado con ello muchos problemas sanitarios. Segundo pilar, la solidaridad: la sanidad la paga el Estado, no es gratis, la pagamos todos a través de los impuestos, por eso es solidaria. Tercer pilar: la equidad, a pesar de que no todos pagamos lo mismo, todos tenemos los mismos derechos. La cuarta columna: la accesibilidad, todo el mundo tiene un acceso fácil, que se está perdiendo. Uno va a su médico de cabecera, que hasta hace nada era de un día para otro, en Castilla y León cada vez se demora más. Esos cuatro pilares nos daban distinción y tenemos que protegerlo por encima de todo.
Pero qué ha pasado recientemente, ¿cuál era el negocio en España de las grandes empresas, de los ‘lobbies’ internacionales, de las grandes fortunas? El negocio hasta hace cinco años era la construcción, era el chollo para que los que ya tienen tuvieran mucho más, cuando esto se vino abajo ¿dónde había dinero en España? En sanidad. Con lo cual las empresas que antes estaban en la construcción ahora están invirtiendo en la sanidad, y están construyendo hospitales y están queriendo atraer parte del dinero público de la sanidad pública a la privada. Si se traslada el dinero de lo público a lo privado, lo público se va a deteriorar para mejorar lo privado. Y si se deteriora, lo público se termina ahí, quedaría como en Estados Unidos, lo que es público es de beneficencia y lo que es privado son para unos pocos. Y aquí no debieramos de permitir que eso sucediera.
Una pregunta que seguro que nunca, nunca te han hecho. Tu abuelo a qué se dedicaba.
Enlazando con el último verso del poema que has leído que dice "¿Qué pensarán de un abuelo singular?" Cuando yo era niño ya me preguntaban ¿Y tu abuelo qué es? Y yo decía, sabio. Mi abuelo para mí que era un niño, era sabio. Después me he enterado, leyendo la obra de mi abuelo que él no quería ser conocido como sabio, quería ser conocido como poeta. Y creo que lo ha logrado, pues en los últimos 20 años ya todo el mundo conoce más a Unamuno como poeta que como ensayista, publicista o novelista.
Al hilo de lo que estás diciendo llevamos unos años en que se vuelve a citar muchísimo a Miguel de Unamuno. Por ejemplo: su Majestad el Rey en la entrega de los premios Princesa de Asturias, citó a Unamuno. En el parlamento, los más ilustrados también citan a Unamuno, los ‘desilustrados’ lo citan mal. ¿Está de moda otra vez?
Sí, está de moda. En los últimos cinco años se le están haciendo constantes reconocimientos y homenajes. Casi todos ellos en las inmediaciones de Salamanca, y yo tengo que estar allí. Les digo a mis amigos: mi abuelo se me ha subido a la chepa y no se me baja, pues paso todos los días en homenajes y reconocimientos. Los estudiosos siguen encontrando cosas de provecho en la obra de Don Miguel de Unamuno. Ahora mismo se están recopilando las cartas que recibió de 4800 personas; también están reeditándose sus artículos como publicista, de los que cada vez salen más.
Tú también has sido actor en una película que se titula: ‘Natura non dat, Salamanca non presta’.
Sí, pero no fue una película, fue un paseo teatralizado. En el 2012 se declaró en Salamanca 'Año Miguel de Unamuno', con motivo del 75 aniversario de su fallecimiento. Y entre la infinidad de homenajes el Ayuntamiento organizó un ‘Paseo teatralizado’ y su director Roberto García Encinas puso en diálogo a La Latina, que fue la profesora de latín de Isabel la Católica con mi abuelo, Miguel de Unamuno. Yo hacía de Unamuno, por el parecido físico. Beatriz Galindo hacía el papel de la Latina y dada su profesionalidad me transmitía tranquilidad. La representaciós se hacía paseando por la calle, parándonos en distintos escenarios y representando aquellos diálogos, con la muchedumbre que nos acompañaba. Si yo me equivocaba Beatriz sabía sacarme del mal paso.
“Los hijos de mis hijos, si llegan, han de ser las obras de mi obra, llevando mi alma en pie.” ¿Lo hacéis?
Sí, lo hacemos. Yo creo que todos. Me está tocando a mí el papel más visible de la familia, por ser el único nieto que vive en Salamanca. Creo además que estoy manteniendo la orden de mi abuelo de mantener viva su obra, su espíritu y representando a la familia.
Tú realmente no lo conociste, pues Unamuno había muerto nueve años antes. Pero lo conoces a través de la familia.
Yo he oído a mi padre, también yo era niño cuando murió mi padre, pero mucho le oí contar. A mis tías, a mis primos mayores. Luego he leído mucho de lo que la familia escribió en relación con su padre o con su abuelo.
En Alemania era muy conocido y Curtius dice de él ‘Excitator Hispaniae’ y el Conde de Keyserling añade que es el español más importante de los tiempos modernos después de Goya. Y mientras tanto aquí ha dormido el sueño de los justos durante unos años.
Sí, ha dormido porque en el 36, tras aquel incidente que todo el mundo conoce, del 12 de octubre de 1936, hace ahora 80 años justos, ha sido injustamente condenado y olvidado, incluso algunas de sus obras pasaron al índice. Luego, poco a poco se fue recuperando la obra y el nombre de Miguel de Unamuno, pero es que en los últimos cinco años ha habido un boom, que lo ha puesto absolutamente de moda.
Tengo aquí un artículo de 1964, de un periódico de una ciudad cercana a Veguellina que dice así: “Unamuno está de moda en la Universidad española y entre los universitarios. Mal maestro. La obra de Don Miguel ha sido condenada por diferentes y muchos prelados…” ¿Al fin lo recuperamos?
Sí, y en Salamanca también recuperó el título de Alcalde Vitalicio de la ciudad, del que fue despojado a partir de aquella intervención del 12 de octubre.
¿‘La Isla del viento’ ya se ha estrenado o se estrena ahora?
Lo hará entre el 15 y el 18 de noviembre. Se ha hecho ya un preestreno en Salamanca el día 11 de octubre.
A mí una de las cosas que me más me llamó la atención de Miguel de Unamuno fue eso de la ‘Cocotología’. No me imagino a don Miguel siendo ‘cocotólogo’.
El llamaba ‘cocotología’ a la papiroflexia, al arte o a la afición de doblar el papel y hacer pajaritas de papel. Los que nos dedicamos a la cocotología llamamos pajarita a cualquier figura de papel. Unamuno hacía pajaritas con muchísima frecuencia, y no solamente en casa, sino en la cafetería. Luego esas figuritas que regalaba eran disputadas. En su época de destierro en París, le hizo una pajarita de papel a un niño y el niño le preguntó si aquella pajarita hablaba y a propósito de aquello escribió un poema que creo que se titula ‘Habla pajarita habla’.
“Procuremos más ser padres de nuestro porvenir que hijos de nuestro pasado.” Es una frase que te citarán con frecuencia ¿esto lo lees con frecuencia en algún escrito, en alguna lápida?
Ahí me has pillado…
¿No hay una inscripción en la casa…?
Donde vivió desde 1914 y en la cual murió en 1936.
Vamos con el abuelo. Fue un personaje complejo, un personaje muy discutido y muy discutible, pero él siempre dijo: “Quienes cambian son los otros. Yo nunca he cambiado.”
Para él, era la verdad ante todo siempre…
Efectivamente hay un aforismo suyo que dice “Primero la verdad, antes que la paz”.
No era un hombre de partido y no se ceñía a mandatos de nadie Seguramente de estar el otro día en la votación de investidura no hubiera seguido las directrices. El militó en su juventud en el Partido Socialista, pero enseguida dejó debido al encontronazo de esas directrices con su conciencia personal.
Eso me trae a cuento que Azaña le consultaba determinados temas, los franquistas lo alababan y él ponía a caldo a los 'hunos' con hache y a los 'hotros' con hache. Es decir que coincide a la perfección con lo que venimos comentando.
Efectivamente, él no se casaba con nadie y si tenía que decir la verdad la decía por encima de quién fuese.
“Venceréis porque tenéis sobrada fuerza bruta, pero no convenceréis porque convencer significa persuadir.” Hace 80 años, un 12 de octubre, sentado a una mesa, habiéndose jurado que no iba a abrir la boca, el rector de Salamanca de entonces, Maldonado…
No, era todavía él. Nada más producirse el alzamiento del 18 de julio, él era el rector. Como se adhirió a la sublevación, lo tengo que decir aunque no me haga muchísima gracia, ya que creyó que aquella sublevación era para rectificar los errores de la República. Con motivo de esa adhesión fue destituido por la República. Cuando Franco se asentó en Salamanca, en el Palacio del Obispo, en su Cuartel General, lo restituyó como rector.
Hay un comentario, no sé si rumor, que nunca ha sido suficientemente estudiado y es la visita que Don Miguel de Unamuno hace al General Franco, en el palacio obispal, un mes después de su polémica declaración para entregarle una lista de personas que pedía que no fueran fusiladas.
Eso fue antes del 12 de octubre no en noviembre. A partir de ese 12 de octubre ya no salió casi de casa. Salió el 13, que fue cuando le abuchearon en el casino y luego ya no volvió a salir. Un mes antes o así del 12 de octubre llevaba una lista de amigos suyos que estaban encarcelados, que eran entre otros muchos, Neto Villalobos y Atilano Coco, este era un pastor protestante muy amigo de él, y acudió a interceder por sus vidas, cosa que no consiguió pues a Atilano Coco lo fusilaron.
En ese mismo acto hay quien dice que tuvo que salir protegido por Carmen Polo, que lo acompaño debido a que los ánimos estaban pero que muy exaltados. Él iba decidido a no hablar, pero cuando oyó al profesor Maldonado criticando como cánceres al País Vasco, a Cataluña, él que era vasco y el obispo de aquel momento era catalán, no pudo aguantar más y fue cuando se lió la gresca.
Parece que no quería intervenir en aquel acto. Estaba muy preocupado por lo que estaba ocurriendo en España, a lo que él llamaba un 'suicidio colectivo'. Pero cuando oyó eso de ‘el cáncer de España’ hablando de vascos y catalanes, empezó a tomar notas precisamente en la carta de la mujer de Atilano Coco y fue cuando dijo lo de “Venceréis pero no convenceréis”.
Qué recuerdos tienes de la familia del destierro que había sufrido anteriormente en las Islas Canarias.
Fueron seis años muy duros, desde 1924 a 1930, en los que dejó de cobrar su sueldo. La familia tuvo que vivir un poco de las publicaciones, del trabajo de los hijos mayores. Fue de mucha dureza el destierro a Fuerteventura. Hasta que huyó a París y mantuvo un exilio voluntario. Lo pasó muy mal por la separación de su mujer, a la que adoraba, de sus hijos y de Salamanca y del País Vasco también, pues él jamás renunció a su condición de vasco.
Cuando estaba exiliado en Fuerteventura recibe una visita de la profesora Delfina Molina, que llevaba 30 años enviándole cartas, y un buen día se presenta con su marido y su hija a hacerle una visita. ¿No habría tenido otro momento de visitarlo para ir tan lejos? ¿o había algún enamoramiento?
Sí que lo había, pero no era correspondido. Llevaban más o menos 30 años carteándose, pero de literatura, no de amor. Cuando llegaron las cartas de Delfina Molina, me han contado mis tíos, mi abuela le decía. “Ahí tienes una carta de esa enamorada tuya, toma, toma la carta”. Mi abuela murió el 15 de mayo de 1934, Delfina Molina siguió escribiendo a mi abuelo. Unamuno no volvió a abrir ninguna de esas cartas.
Unamuno y Portugal. La relación fue morbosa, incluso le llegaron a nombrar ‘Presidente de Honor de los Ferrocarriles Portugueses’.
Por eso el viajaba a Portugal gratis. Viajaría en primera a dónde quisiera. Y bajaba y volvía a subir, según su capricho. En uno de sus escritos que se titula Guarda, él venía de Coimbra y al llegar a Guarda, se dice, anda no conozco esta ciudad, se bajó…
¿Y el tren esperó?
No, hicieron noche.
Pues cuenta que una vez hicieron una parada en una estación para comer y el tren esperó a que acabara la comida. Para eso era presidente de honor.
Allí en Guarda hizo noche, visitó Guarda y al día siguiente volvió a coger el tren. Tenía muchísimos amigos en Portugal, entre otros y destacado, el poeta Guerra Junqueiro.
Dónde encajarías en el año 2016 lo siguiente. “Solo el que ensaya lo absurdo es capaz de conquistar lo imposible.” Yo cuando leía esto mi cabeza se iba directamente a un partido político nuevo que hay hoy.
Sucede con muchos de los escritos de Miguel de Unamuno son de total actualidad, aunque tengan más de 80 años. En estos últimos años no han parado de preguntarme sobre lo que diría Miguel de Unamuno de la corrupción política actual.
¿Le publicarían eso que dijese todos los medios de comunicación?
No lo creo, su arma era la pluma. Hay una anécdota que me contó un salmantino un día paseando por la calle. Me dijo que su padre se encontró una vez con mi abuelo en la comisaría. El padre de mi interlocutor acudía a una revisión de un arma y Unamuno sacó su lápiz del bolsillo y le dijo: esto, esto sí que hace daño y no eso.