My sweet old etcétera
En el año 1923 cummings publicó 'my sweet old etcétera'. Continuando con nuestra intención de ofrecer versiones frescas de estos ya antiguos poemas, Aidan Mcnamara nos sugiere esta interpretación
![[Img #30206]](upload/img/periodico/img_30206.jpg)
El arte es una forma del saber o por lo menos un camino hacía la sabiduría. En momentos de crisis extrema (pero también cuando estás forrado y te pones lúdico, Sr. Hirst) el ser humano mediante su arte busca formas nuevas para expresar y/o reflejar su consternación, rechazando, ya receloso, las formas tradicionales como si ya no valieran. La vanguardia no nace aislada. Empuja y estira la tradición para que ceda el paso hacia nuevas formas de crear, para poder tratar de las experiencias insólitas e innovadoras que pare la humanidad. El arte sigue la vida y luego la cuestiona. La vanguardia modernista casi la repudia pero a la vez se pone terca: vida loca, te voy a domar. Te voy a conferir un sentido incluso si no entiendo nada. Porque te siento. Y te quiero.
El arte quiere la vida como el amor. Y es capaz de significar sin razonar. Consolar sin justificar.
Es fácil hoy día burlarse de las vanguardias (efectistas, pretenciosas, rabietonas) que nos ha dado el principio del siglo veinte. Pero el dadaísmo y el surrealismo también fueron respuestas a la incomprensión y al ritmo loco y cambiante de las nuevas tecnologías y su manera de descentrarnos y asustarnos.
Como hoy.
Hace cien años en las trincheras de Francia, donde hasta 50000 hombres pudieron morir en un solo día por llevar rifles contra unas cuantas ametralladoras bien posicionadas del otro bando, e.e. cummings (tipografía suya) experimentó la locura de la primera guerra mundial.
En el año 1923 cummings publicó my sweet old etcétera. Usa mayúsculas cuando le apetece, la puntuación igual. Lo que es una frase convencional… ¿qué es una frase convencional cuando el mundo está patas arriba?
Cuando se expresó en este pequeño poema gráfico (tanto tipográfica como eróticamente) no existían términos o cuadros clínicos tales como el síndrome de estrés postraumático ni había diálogo ninguno entre el deber patriótico y la dignidad individual. (De hecho, tras su experiencia en Europa todavía le tocaba hacer la mili en Estados Unidos.) No había CNN y las familias de los soldados no se enteraban de nada. El poeta (también era pintor) plasma y explora casi como un niño (un soldado-adolescente apenas recién salido de la pubertad) el contraste entre la vida doméstica, inocente, honrada, burguesciega, charlatana, y la suya propia, callada en el frente sin nada más que un sueño consolador. Y aún así su amor será menos explícito y más tabú que la guerra, cosa que hoy nos recuerda a los pobres ingenuos horroristas que creen que van a hacer su agosto amoroso en el paraíso.
Es un poema fácil. (El modernismo y sus ramas no eran exclusivamente el plató de los Joyce y los Pound). Y de ahí su dureza y su frescor.
![[Img #30205]](upload/img/periodico/img_30205.jpg)
MY SWEET OLD ETCETERA
my sweet old etcetera
aunt lucy during the recent
war could and what
is more did tell you just
what everybody was fighting
for,
my sister
isabel created hundreds
(and
hundreds) of socks not to
mention shirts fleaproof earwarmers
etcetera wristers etcetera, my
mother hoped that
i would die etcetera
bravely of course my father used
to become hoarse talking about how it was
a privilege and if only he
could meanwhile my
self etcetera lay quietly
in the deep mud et
cetera
(dreaming,
et
cetera, of
Your smile
eyes knees and of your Etcetera)
![[Img #30204]](upload/img/periodico/img_30204.jpg)
Mi Muy Querida Etcétera
mi muy querida etcétera
tía Lucy durante
la guerra reciente
solía e insistía en contarte
por qué luchábamos
todos
mi hermana
Isabel hizo cientos
(y
cientos) de calcetines ni
hablar de las camisas las orejeras
antipulgas etcétera las muñequeras
etcétera mi madre
confiaba en que yo moriría
con valentía por supuesto mi padre
se volvía afónico hablando de lo privilegiado que era
y ojalá pudiera
él mientras tanto yo
mismo etcétera estaba tumbado
callado en el lodazal et
cétera
(soñando,
et
cétera, con
Tu sonrisa
tus ojos tus rodillas y con tu Etcétera)
El arte es una forma del saber o por lo menos un camino hacía la sabiduría. En momentos de crisis extrema (pero también cuando estás forrado y te pones lúdico, Sr. Hirst) el ser humano mediante su arte busca formas nuevas para expresar y/o reflejar su consternación, rechazando, ya receloso, las formas tradicionales como si ya no valieran. La vanguardia no nace aislada. Empuja y estira la tradición para que ceda el paso hacia nuevas formas de crear, para poder tratar de las experiencias insólitas e innovadoras que pare la humanidad. El arte sigue la vida y luego la cuestiona. La vanguardia modernista casi la repudia pero a la vez se pone terca: vida loca, te voy a domar. Te voy a conferir un sentido incluso si no entiendo nada. Porque te siento. Y te quiero.
El arte quiere la vida como el amor. Y es capaz de significar sin razonar. Consolar sin justificar.
Es fácil hoy día burlarse de las vanguardias (efectistas, pretenciosas, rabietonas) que nos ha dado el principio del siglo veinte. Pero el dadaísmo y el surrealismo también fueron respuestas a la incomprensión y al ritmo loco y cambiante de las nuevas tecnologías y su manera de descentrarnos y asustarnos.
Como hoy.
Hace cien años en las trincheras de Francia, donde hasta 50000 hombres pudieron morir en un solo día por llevar rifles contra unas cuantas ametralladoras bien posicionadas del otro bando, e.e. cummings (tipografía suya) experimentó la locura de la primera guerra mundial.
En el año 1923 cummings publicó my sweet old etcétera. Usa mayúsculas cuando le apetece, la puntuación igual. Lo que es una frase convencional… ¿qué es una frase convencional cuando el mundo está patas arriba?
Cuando se expresó en este pequeño poema gráfico (tanto tipográfica como eróticamente) no existían términos o cuadros clínicos tales como el síndrome de estrés postraumático ni había diálogo ninguno entre el deber patriótico y la dignidad individual. (De hecho, tras su experiencia en Europa todavía le tocaba hacer la mili en Estados Unidos.) No había CNN y las familias de los soldados no se enteraban de nada. El poeta (también era pintor) plasma y explora casi como un niño (un soldado-adolescente apenas recién salido de la pubertad) el contraste entre la vida doméstica, inocente, honrada, burguesciega, charlatana, y la suya propia, callada en el frente sin nada más que un sueño consolador. Y aún así su amor será menos explícito y más tabú que la guerra, cosa que hoy nos recuerda a los pobres ingenuos horroristas que creen que van a hacer su agosto amoroso en el paraíso.
Es un poema fácil. (El modernismo y sus ramas no eran exclusivamente el plató de los Joyce y los Pound). Y de ahí su dureza y su frescor.
MY SWEET OLD ETCETERA
my sweet old etcetera
aunt lucy during the recent
war could and what
is more did tell you just
what everybody was fighting
for,
my sister
isabel created hundreds
(and
hundreds) of socks not to
mention shirts fleaproof earwarmers
etcetera wristers etcetera, my
mother hoped that
i would die etcetera
bravely of course my father used
to become hoarse talking about how it was
a privilege and if only he
could meanwhile my
self etcetera lay quietly
in the deep mud et
cetera
(dreaming,
et
cetera, of
Your smile
eyes knees and of your Etcetera)
Mi Muy Querida Etcétera
mi muy querida etcétera
tía Lucy durante
la guerra reciente
solía e insistía en contarte
por qué luchábamos
todos
mi hermana
Isabel hizo cientos
(y
cientos) de calcetines ni
hablar de las camisas las orejeras
antipulgas etcétera las muñequeras
etcétera mi madre
confiaba en que yo moriría
con valentía por supuesto mi padre
se volvía afónico hablando de lo privilegiado que era
y ojalá pudiera
él mientras tanto yo
mismo etcétera estaba tumbado
callado en el lodazal et
cétera
(soñando,
et
cétera, con
Tu sonrisa
tus ojos tus rodillas y con tu Etcétera)