Redacción
Viernes, 26 de Julio de 2013
Nuevo número de la revista Argutorio en la calle
Un año después de la aparición del anterior número sale a la venta la revista Argutorio. La causa de esta prolongada ausencia es la muerte el pasado mes de febrero de Joaquín José de Paz Martínez, su codirector y maquetista, que había dejado preparados algunos artículos, pero que no pudo concluir la maquetación completa antes de Navidades, fechas habituales del segundo número anual. Ahora se incluye lo que tendría que haberse publicado a finales de 2012 más lo recibido desde enero, por lo que el número de páginas casi se duplica. De su maquetación se ha encargado Olegario Pérez Alija, colaborador de la publicación en varias ocasiones.
Su contenido es, como siempre, muy variado. El editorial se le dedica a Joaquín de Paz, así como el primer artículo, firmado por María Luisa Piñeiro. Seguidamente, la sección sobre naturaleza comienza con un trabajo sobre el águila real de Abilio Reig-Ferrer; sigue con dos sobre el lince, de José Piñeiro y Alfonso Fernández Pacios; y con un estudio sobre las “últimas noticias de los osos galaico-portugueses”, también de José Piñeiro. Fidel José Fernández dedica la siguiente colaboración a Félix Rodríguez de la Fuente, y finaliza la parte vinculada a la naturaleza con un artículo sobre la meteorología en el refranero berciano. A continuación, Andrés Martínez Oria escribe sobre la novela, interesándose por lo que es hoy este género y por su destino inmediato; José Luis Vilanova da por concluida su serie de artículos dedicados al Camino de Santiago en León, con el tramo entre Villafranca y El Cebrero; David Gustavo López y Óscar Guerra estudian una estela de finales de la Edad del Bronce o principios de la del Hierro localizada en una ermita de Manzanal del Puerto; José Luis Vicente analiza las condiciones de trabajo en las minas de oro romanas del noroeste, encontrado similitudes con las de los campos de trabajo siberianos; la iglesia de San Nicolás, en Villafranca del Bierzo, es el objeto de estudio de Fermín López Costero; Francisco Javier Rodríguez, especializado en la conquista de América y natural de un pueblo de la ribera del Tuerto, escribe sobre Cristóbal Colón; Ana Isabel Arias se interesa por los incendios históricos que ha sufrido la Plaza Mayor de León; y Carmelo Lucas dedica su artículo a Bernardo Iglesias, astorgano, tío de Pío Gullón e importante personaje de la España del siglo XIX.
Dado que se cumplen 150 años de la inauguración del tramo ferroviario entre León y Palencia y de la llegada del 'ferrocarril de Galicia' a Astorga, Olegario Pérez nos habla en su artículo de lo que ha supuesto el ferrocarril en la historia de Astorga. Después, José Cabañas escribe sobre las visitas a Astorga de un 'príncipe abisinio' en los años 20; Miguel Ángel Cordero recuerda el verano que pasaron los alumnos de la Escuela Madrileña de Cerámica en Val de San Lorenzo, en el año 1926; y Martín Simón realiza, utilizando testimonios orales, un minucioso estudio sobre los padecimientos provocados por la banda de Manuel Girón a los habitantes de los pueblos maragatos.
Los últimos artículos de la revista están dedicados a la toponimia de origen antroponímico germánico en la provincia de León –Pascual Riesco Chueca, Universidad de Sevilla-; a un extraño círculo de 32 metros de diámetro situado a casi 1800 de altitud en la sierra del Teleno – Antonio García Montes-; y a dos automóviles antiguos conservados en Astorga –Pablo Pérez-. José Piñeiro analiza finalmente la presunta –pero falsa, según demuestra- persecución de las hablas vernáculas durante el régimen franquista.
Un año después de la aparición del anterior número sale a la venta la revista Argutorio. La causa de esta prolongada ausencia es la muerte el pasado mes de febrero de Joaquín José de Paz Martínez, su codirector y maquetista, que había dejado preparados algunos artículos, pero que no pudo concluir la maquetación completa antes de Navidades, fechas habituales del segundo número anual. Ahora se incluye lo que tendría que haberse publicado a finales de 2012 más lo recibido desde enero, por lo que el número de páginas casi se duplica. De su maquetación se ha encargado Olegario Pérez Alija, colaborador de la publicación en varias ocasiones.
![[Img #4500]](upload/img/periodico/img_4500.jpg)
Su contenido es, como siempre, muy variado. El editorial se le dedica a Joaquín de Paz, así como el primer artículo, firmado por María Luisa Piñeiro. Seguidamente, la sección sobre naturaleza comienza con un trabajo sobre el águila real de Abilio Reig-Ferrer; sigue con dos sobre el lince, de José Piñeiro y Alfonso Fernández Pacios; y con un estudio sobre las “últimas noticias de los osos galaico-portugueses”, también de José Piñeiro. Fidel José Fernández dedica la siguiente colaboración a Félix Rodríguez de la Fuente, y finaliza la parte vinculada a la naturaleza con un artículo sobre la meteorología en el refranero berciano. A continuación, Andrés Martínez Oria escribe sobre la novela, interesándose por lo que es hoy este género y por su destino inmediato; José Luis Vilanova da por concluida su serie de artículos dedicados al Camino de Santiago en León, con el tramo entre Villafranca y El Cebrero; David Gustavo López y Óscar Guerra estudian una estela de finales de la Edad del Bronce o principios de la del Hierro localizada en una ermita de Manzanal del Puerto; José Luis Vicente analiza las condiciones de trabajo en las minas de oro romanas del noroeste, encontrado similitudes con las de los campos de trabajo siberianos; la iglesia de San Nicolás, en Villafranca del Bierzo, es el objeto de estudio de Fermín López Costero; Francisco Javier Rodríguez, especializado en la conquista de América y natural de un pueblo de la ribera del Tuerto, escribe sobre Cristóbal Colón; Ana Isabel Arias se interesa por los incendios históricos que ha sufrido la Plaza Mayor de León; y Carmelo Lucas dedica su artículo a Bernardo Iglesias, astorgano, tío de Pío Gullón e importante personaje de la España del siglo XIX.
Dado que se cumplen 150 años de la inauguración del tramo ferroviario entre León y Palencia y de la llegada del 'ferrocarril de Galicia' a Astorga, Olegario Pérez nos habla en su artículo de lo que ha supuesto el ferrocarril en la historia de Astorga. Después, José Cabañas escribe sobre las visitas a Astorga de un 'príncipe abisinio' en los años 20; Miguel Ángel Cordero recuerda el verano que pasaron los alumnos de la Escuela Madrileña de Cerámica en Val de San Lorenzo, en el año 1926; y Martín Simón realiza, utilizando testimonios orales, un minucioso estudio sobre los padecimientos provocados por la banda de Manuel Girón a los habitantes de los pueblos maragatos.
Los últimos artículos de la revista están dedicados a la toponimia de origen antroponímico germánico en la provincia de León –Pascual Riesco Chueca, Universidad de Sevilla-; a un extraño círculo de 32 metros de diámetro situado a casi 1800 de altitud en la sierra del Teleno – Antonio García Montes-; y a dos automóviles antiguos conservados en Astorga –Pablo Pérez-. José Piñeiro analiza finalmente la presunta –pero falsa, según demuestra- persecución de las hablas vernáculas durante el régimen franquista.