Tito, ¿vas a cerrar el bar? No jodas...
![[Img #43232]](http://astorgaredaccion.com/upload/images/04_2019/1180_k3.jpg)
Incluso antes de que yo naciese Tito ya ponía Jamaicanas en su bar. Y es que el 'K' ha sido uno de esos lugares en los que todos hemos crecido juntos. El 'K' se ha convertido ya en una institución, en un lugar que queremos, respetamos y vamos a echar demasiado de menos. Sus paredes nos han visto en todas las etapas de nuestras vidas; desde pequeños tomando cafés por las tardes, después copas por las noches y cervezas de tranquis cualquier viernes. Además, el 'K' siempre fue un buen plan para juntarnos en cuadrilla y tomar unos chupitos, por los buenos tiempos, que fueron siempre aquellos en los que tuvimos buenos bares que nos regalaron tantos bonitos recuerdos.
Ahora será difícil que la noche maragata vuelva a ser lo que era. Hace unos meses le dije a Tito un día al cerrar, (cuando el pobre ya me tenía que echar con el palo de la escoba porque no había manera...) que no sabía que iba a hacer yo cuando su bar no estuviera y ahora tengo que preguntármelo todavía con más fuerza. Sin encontrar una buena respuesta para ello. Muchos me entenderéis cuando hablo de las escapadas al 'K' cuando en otros sitios no puedo estar porque me sangran los oídos. Esas escapadas me daban la vida. No todos pueden decir orgullosos como Tito que en su bar sólo se ponía buena música. El K no cedía a presiones de modas, el 'K' siempre ponía su música, aunque cada sábado le pidiésemos las mismas canciones de siempre. Ni rastro de reggaeton ni esas modernidades de hoy en día, siempre música de la buena, de la que presta escuchar mientras arreglas el mundo con tu gente. Porque en el 'K' siempre había alguien con quien mantener una conversación interesante.
Éramos una familia de la que anoche costó mucho despedirse. Demasiados años compartiendo momentos con Tito, que siempre estaba dispuesto a ponerte lo que le pidieras aunque no fuera un buen momento para poner ese tema. Él siempre hacía el esfuerzo. Y lleva tantos años esforzándose por nosotros que también entendemos que haya llegado su hora de descansar, de dejar de tirar del carro, porque ni una noche había en la que le ponías falta.
Tito, perdónanos si la morriña no nos deja despedirnos sin que se nos caiga alguna lagrimilla, no queremos ponértelo más difícil, pero es fruto del cariño que has cosechado en todo este tiempo y que has conseguido que se lo tengamos a un lugar que nos has regalado. Y es que quien te regala un lugar te está regalando mucho más que el conocimiento de su existencia o la cultura que en él se esconde. Quien te regala un lugar te está regalando un recuerdo, un vínculo que nos unirá a todos indiscutible, inevitable e indirectamente. Y cada vez que pienses en los lugares y los sitios que has estado lo recordarás y muchas personas se acordarán de ti también cuando lo vean. Y estoy segura que no hay mejor regalo que ese.
Gracias a Tito y a cada una de las personas que pasaron todos estos años detrás de esa barra, sirviéndonos las mejores copas que tomar en la mejor compañía y en el mejor lugar.
¡Hasta siempre Pub Señor K!"
Incluso antes de que yo naciese Tito ya ponía Jamaicanas en su bar. Y es que el 'K' ha sido uno de esos lugares en los que todos hemos crecido juntos. El 'K' se ha convertido ya en una institución, en un lugar que queremos, respetamos y vamos a echar demasiado de menos. Sus paredes nos han visto en todas las etapas de nuestras vidas; desde pequeños tomando cafés por las tardes, después copas por las noches y cervezas de tranquis cualquier viernes. Además, el 'K' siempre fue un buen plan para juntarnos en cuadrilla y tomar unos chupitos, por los buenos tiempos, que fueron siempre aquellos en los que tuvimos buenos bares que nos regalaron tantos bonitos recuerdos.
Ahora será difícil que la noche maragata vuelva a ser lo que era. Hace unos meses le dije a Tito un día al cerrar, (cuando el pobre ya me tenía que echar con el palo de la escoba porque no había manera...) que no sabía que iba a hacer yo cuando su bar no estuviera y ahora tengo que preguntármelo todavía con más fuerza. Sin encontrar una buena respuesta para ello. Muchos me entenderéis cuando hablo de las escapadas al 'K' cuando en otros sitios no puedo estar porque me sangran los oídos. Esas escapadas me daban la vida. No todos pueden decir orgullosos como Tito que en su bar sólo se ponía buena música. El K no cedía a presiones de modas, el 'K' siempre ponía su música, aunque cada sábado le pidiésemos las mismas canciones de siempre. Ni rastro de reggaeton ni esas modernidades de hoy en día, siempre música de la buena, de la que presta escuchar mientras arreglas el mundo con tu gente. Porque en el 'K' siempre había alguien con quien mantener una conversación interesante.
Éramos una familia de la que anoche costó mucho despedirse. Demasiados años compartiendo momentos con Tito, que siempre estaba dispuesto a ponerte lo que le pidieras aunque no fuera un buen momento para poner ese tema. Él siempre hacía el esfuerzo. Y lleva tantos años esforzándose por nosotros que también entendemos que haya llegado su hora de descansar, de dejar de tirar del carro, porque ni una noche había en la que le ponías falta.
Tito, perdónanos si la morriña no nos deja despedirnos sin que se nos caiga alguna lagrimilla, no queremos ponértelo más difícil, pero es fruto del cariño que has cosechado en todo este tiempo y que has conseguido que se lo tengamos a un lugar que nos has regalado. Y es que quien te regala un lugar te está regalando mucho más que el conocimiento de su existencia o la cultura que en él se esconde. Quien te regala un lugar te está regalando un recuerdo, un vínculo que nos unirá a todos indiscutible, inevitable e indirectamente. Y cada vez que pienses en los lugares y los sitios que has estado lo recordarás y muchas personas se acordarán de ti también cuando lo vean. Y estoy segura que no hay mejor regalo que ese.
Gracias a Tito y a cada una de las personas que pasaron todos estos años detrás de esa barra, sirviéndonos las mejores copas que tomar en la mejor compañía y en el mejor lugar.
¡Hasta siempre Pub Señor K!"