No desahucien al poeta
ABEL APARICIO /
El pasado jueves 29 de agosto, en un pleno municipal celebrado en Astorga corroboré porque cada vez los ciudadanos y ciudadanas desprecian más tanto a la política como a muchos de los políticos que la ejercen. Los portavoces de los partidos de la oposición -hago un inciso para recordar quienes fundaron estos dos partidos, tanto el PAL-UL como el PP- pedían explicaciones sobre la organización de un recital poético-musical que tuvo lugar el 20 de agosto en el Jardín de la Sinagoga de esta ciudad en plena semana de ferias. Se preguntaban por qué se hizo en la semana de ferias y cuál fue su coste económico, pero lo que más les molestó fue la alusión a algunos políticos, diciendo que incluso se había llegado a insultar.
Bien, se hace saber: Para concienciar a los ciudadanos y ciudadanas de Astorga del problema de los desahucios -las cifras son muy claras, 168 familias en proceso de desahucio en la comarca de la Maragatería, de las cuales, 14 de ellas ya fueron desahuciadas- decidí organizar junto a Stop Desahucios Noroeste (Laciana-Bierzo- Cabrera y Maragatería) un recital solidario con estas familias en la semana de ferias, fecha en la que más gente transita por la ciudad. Sobra decir que ninguno de los participantes solicitó cobrar. El resultado fue un éxito total, no lo digo yo, lo dice la gran cantidad de público asistente que ocupó todas las sillas disponibles y muchas de la terraza del bar del jardín (pasé tes días después a la misma hora y la terraza estaba casi vacía). Lo que allí se iba a recitar y a cantar creo que estaba claro, no versaríamos sobre la belleza de la puesta de sol en las faldas del Teleno. El objetivo era despertar conciencias, ver la realidad de frente, llamando a las cosas por su nombre, tirándonos a la yugular de dirigentes políticos como María Dolores Cospedal -el 'de' se lo puso ella, que conste- la cual ordenó a los políticos de su partido suprimir la palabra desahucio de su vocabulario, como Carme Chacón agilizando los procesos de desahucio o las lágrimas de cocodrilo de Soraya Saenz de Santamaría mientras ignoraba una ILP (iniciativa legislativa popular) con un millón y medio de firmas.
Quiero preguntar a los portavoces de estos dos grupos políticos –ninguno estuvo en el acto, quiero recordar- qué es lo denunciable de ese acto, aquí tienen el vídeo.También quiero preguntarle a cuántos actos culturales han asistido, al margen de las maravillas que organizan ciertos ayuntamientos con Bertín Osborne, Arévalo, Arturo Fernández o la mega moderna Russian Red, para permitirse el lujo de decir que fue un acto cultural en el que se faltó al respeto, echándole en cara a la alcaldesa haberlo permitido, soltando un tufillo a censura y a revisión previa de épocas que yo creía pasadas. Como dice un conocido, 'Españoles, Franco ha vuerto'.
Inocente de mi llegué a pensar que aprovecharían esto para, de forma populista, anotarse un tanto al más puro estilo Rosa Díez, pero ni eso. El movimiento Stop Desahucios es algo tan grande que se les escapa de las manos y no pueden controlar, les desborda, por eso actúan de esta manera. Ni una propuesta para frenar los desahucios en el municipio, ni una acción, ni un mensaje, nada. Lo único, criticar un acto cultural sobre los desahucios. ¿Esto es lo que queremos de las personas que toman las decisiones en nuestras ciudades o pueblos? Joder, que tropa. Fin de la cita.
Pd.: Al Equipo de Gobierno le toca mover ficha sobre los desahucios, por cierto.
ABEL APARICIO /
![[Img #5381]](upload/img/periodico/img_5381.jpg)
El pasado jueves 29 de agosto, en un pleno municipal celebrado en Astorga corroboré porque cada vez los ciudadanos y ciudadanas desprecian más tanto a la política como a muchos de los políticos que la ejercen. Los portavoces de los partidos de la oposición -hago un inciso para recordar quienes fundaron estos dos partidos, tanto el PAL-UL como el PP- pedían explicaciones sobre la organización de un recital poético-musical que tuvo lugar el 20 de agosto en el Jardín de la Sinagoga de esta ciudad en plena semana de ferias. Se preguntaban por qué se hizo en la semana de ferias y cuál fue su coste económico, pero lo que más les molestó fue la alusión a algunos políticos, diciendo que incluso se había llegado a insultar.
Bien, se hace saber: Para concienciar a los ciudadanos y ciudadanas de Astorga del problema de los desahucios -las cifras son muy claras, 168 familias en proceso de desahucio en la comarca de la Maragatería, de las cuales, 14 de ellas ya fueron desahuciadas- decidí organizar junto a Stop Desahucios Noroeste (Laciana-Bierzo- Cabrera y Maragatería) un recital solidario con estas familias en la semana de ferias, fecha en la que más gente transita por la ciudad. Sobra decir que ninguno de los participantes solicitó cobrar. El resultado fue un éxito total, no lo digo yo, lo dice la gran cantidad de público asistente que ocupó todas las sillas disponibles y muchas de la terraza del bar del jardín (pasé tes días después a la misma hora y la terraza estaba casi vacía). Lo que allí se iba a recitar y a cantar creo que estaba claro, no versaríamos sobre la belleza de la puesta de sol en las faldas del Teleno. El objetivo era despertar conciencias, ver la realidad de frente, llamando a las cosas por su nombre, tirándonos a la yugular de dirigentes políticos como María Dolores Cospedal -el 'de' se lo puso ella, que conste- la cual ordenó a los políticos de su partido suprimir la palabra desahucio de su vocabulario, como Carme Chacón agilizando los procesos de desahucio o las lágrimas de cocodrilo de Soraya Saenz de Santamaría mientras ignoraba una ILP (iniciativa legislativa popular) con un millón y medio de firmas.
Quiero preguntar a los portavoces de estos dos grupos políticos –ninguno estuvo en el acto, quiero recordar- qué es lo denunciable de ese acto, aquí tienen el vídeo.También quiero preguntarle a cuántos actos culturales han asistido, al margen de las maravillas que organizan ciertos ayuntamientos con Bertín Osborne, Arévalo, Arturo Fernández o la mega moderna Russian Red, para permitirse el lujo de decir que fue un acto cultural en el que se faltó al respeto, echándole en cara a la alcaldesa haberlo permitido, soltando un tufillo a censura y a revisión previa de épocas que yo creía pasadas. Como dice un conocido, 'Españoles, Franco ha vuerto'.
Inocente de mi llegué a pensar que aprovecharían esto para, de forma populista, anotarse un tanto al más puro estilo Rosa Díez, pero ni eso. El movimiento Stop Desahucios es algo tan grande que se les escapa de las manos y no pueden controlar, les desborda, por eso actúan de esta manera. Ni una propuesta para frenar los desahucios en el municipio, ni una acción, ni un mensaje, nada. Lo único, criticar un acto cultural sobre los desahucios. ¿Esto es lo que queremos de las personas que toman las decisiones en nuestras ciudades o pueblos? Joder, que tropa. Fin de la cita.
Pd.: Al Equipo de Gobierno le toca mover ficha sobre los desahucios, por cierto.