Las mártires de Somiedo, Beatas
Aires de Guerra XVII
![[Img #54132]](http://astorgaredaccion.com/upload/images/05_2021/2340_tres-enfermeras-1200-grises3.jpg)
Somiedo lunes 26 de Octubre 1936
Querida hermana Maca: como verás por Octavia estamos aquí muy bien, y contentísimas, pues todos son muy simpáticos y no saben qué hacer con nosotros, el Comandante es de lo más simpático; ya nos ha llevado a Villablino, San Félix, Vega, y a Rioscuro por haber dicho yo que allí conocíamos a una familia. Me levanto, asómbrate, a las siete de la mañana, y dormimos Olga y yo juntas y dormimos las dos muy bien, además en eso de las mantas somos iguales pues tenemos cinco mantas, tenemos una habitación muy buena y al lado otra que llamamos el gabinete en donde…`[no se entiende]…………. un taburete y una cómoda ......................................... que llevaron de la escuela.
Recibí vuestra carta lo mismo que la de Pedro y Pilar Calderón a los que voy a escribir desde aquí va a ser …..de modo que mándarme las señas. Cada día nos toca a una estar de guardia, a mí me tocó el domingo y lo estaré el miércoles [ese miércoles es cuando las cogieron prisioneras], por la mañana después de desayunar pasamos consulta, luego a las doce tenemos que dar el rancho o si no hacer un ponche o lo que vayan a tomar. Y ahora te hablaré de los encargos, todos me han encantado, y no te digo nada de la capa, estoy loca, el domingo mismo la estrené.
Ahora lo que te voy a pedir es que me mandes otra bata blanca pero que esté abierta por detrás en vez de por delante pues si no en la capa se ven los botones y hace feo; además te advierto que aquí tarda tres días la ropa en secarse y realmente como desde que nos levantamos estamos con las batas casi todos los días las tenemos que cambiar, y luego el Comandante cuando salimos de aquí para algún sitio quiere que vayamos con batas blancas, capa y brazalete y era una risa pues antes con la de Octavia la que salía se la ponía, pero como algunos días salimos dos yo tenía que llevar la chaqueta de piel que me está dando un resultado magnífico.
Ahora te voy a decir para que le des a Octavia lo que te voy a pedir: le pides a D. Magín la llave de mi armario, abres y verás en la parte izquierda de la primera andana un librito con las tapas encarnadas y que tiene escrito que lo compré en Barcelona, detrás de esto verás unas pinzas, me las traes pues el otro día necesitábamos unas para quitar unas pestañas y no las había; si sobró tela del delantal pues mandármela pues no me pusisteis bolsillos y nos son muy necesarios, mándame también la barrita de los labios que sabes ………. , pues nos viene muy bien porque con este aire se abren, en mi armario del cuarto de siempre, no en el de María Rebollar, tiene que haber una blusa blanca con mangas que la traiga Octavia pues para la falda pantalón me está muy bien. Y ahora te voy a decir que me hagas el favor de hacerme las dos mangas del jersey que traje, ya sabes que era el dibujo que tú hiciste, pues sin mangas no nos conviene. Octavia ya se hizo una para su jersey y se ha empezado la otra manga.
En mi armario hay en una especie de manta con unos pañitos dentro, mándame ocho o nueve pues no he traído ninguno. Por Dios no te olvides, en mi armario que tiene la llave D. Magín, en la 2ª andana al final a la izquierda hay dos cintas blancas, mándame una, la que esté más buena. El jersey que traje lo estoy haciendo para el Ordenanza del Comandante que es un chico de Valladolid muy simpático. Si tenéis por ahí algún juego como el que me tocó en la rifa mandármelo para jugar en la enfermería.
¿Y Mito y Chema? El primero seguirá en teléfonos ¿y el segundo? A tío Leo y a tía María lo mismo que a todos, lo mismo que a D. Magín y Delfi, un fortísimo abrazo.
¿Qué vida hacéis ahora? ¿Vais al Centro? Dime el efecto que os ha hecho a todas lo que os dijo Aragón de parte del Comandante, que dijo que no quería relevo; nosotros por nuestra parte encantadas con esa decisión. María Inés la de las trenzas ¿qué dice de esto? Y la de Arauzo ¿cómo va con ser Presidenta de la Cruz Roja? No me chocó las noticias de las detenciones de los de Panero, Buenadicha ¿? y Giménez, a pesar de que como es natural estarán en casa de Moisés disgustados.
En el armario mío donde la llave verás en la primera andana cerca del cuadernito un cepillito muy pequeño con el mango en encarnado, mándamelo.
Si me ves no me conoces pues se me ha abierto el apetito de tal forma que esta noche misma he tomado tres pedazos de pan, sopa, dos huevos fritos con patatas y carne en salsa y un postre, además de que nos hemos hecho las tres un poco bebedoras por tomar en todas las comidas vino tinto.
Maca, por Dios, que no se te olvide nada de lo que te pido y a ver si aciertas con todo.
Te mando la muda para que me la laven enseguida, que Octavia me la traiga pues aquí tarda mucho en secarse y la lavan muy mal. Mándame un camisón pues no traje más que uno. La camisa de punto es algo serio y ni por las noches me la quito, pues da un calor muy agradable.
A mamá un fuertísimo abrazo, lo mismo que a Mito a Chema a D Magín y a Delfi y recuerdos a todas las muchachas.
Dile a Chon si recibió una carta de un soldado de aquí que me pidió madrina de guerra y le di el nombre de ella. Hay muchos que nos piden nombres de modo que a ver se encuentras y le dices a las chicas y me mandas bastantes nombres. Hoy dimos el nombre de una chica de ahí para madrina.
A todos abrazos y para ti uno fuertísimo y muchos besos de tu hermana Pilín
Cuéntame de todo lo que pasa por ahí. Cada una de nosotras estamos destinadas a una compañía. Octavia a la 1ª Compañía de 3er Batallón y su Capitán se llama Farcinio. Olga a la Plana Mayor, y yo a la 1ª Compañía del 4º Batallón que su Capitán es Nonide. Aquí están Blanco y el hermano de Consuelo la boticaria. Esto te lo estoy escribiendo a la luz de una vela. La luz es lo que más extraño y nos traemos cada jaleo con las velas las linternas y las latas de aceite que es una juerga.
¡Adiós y que Viva España y el Ejército!
![[Img #54129]](http://astorgaredaccion.com/upload/images/05_2021/9792_final-de-carta-a-su-hermana.jpg)
Por lo que dice Pilín Gullón en la carta parece que Octavia tenía intención de ir a Astorga pero con idea de volver. Cómo podría ella imaginarse que esa noche sería la última de su vida en libertad. Esa misma noche, ya en la madrugada, el destacamento del Puerto de Somiedo es despertado con tiros.
![[Img #54131]](http://astorgaredaccion.com/upload/images/05_2021/6635_pilin-enfermera-somiedo-grises.jpg)
![[Img #54133]](http://astorgaredaccion.com/upload/images/05_2021/6315_trozo-final-de-nota-de-pilin.jpg)
Pepe Aragón lleva el mismo día 26 la carta de Pilín a su madre doña Pilar, y ésta rápidamente se pone a escribir una carta de contestación que empieza el mismo día 26 y acaba de escribir el día 27 al mediodía. A esa hora las enfermeras, y el resto de los militares del destacamento, están muertos o prisioneros.
Pilar Yturriaga lunes 26 de octubre de 1936
Querida Pilín. Hoy vino Aragón a hacerme una visita de parte del Comandante para decirme que estabais muy bien y que os portáis bien, mucho me alegro que trabajéis y hagáis todo lo posible con esos pobres soldados que tanto ellos como todos los jefes tanto están pasando y luchando para salvarnos a todos de estas fieras y salvar a España.
Me dijo que ayer lo habían pasado muy bien y que había comido ahí mucha gente, habíais tenido misa como el domingo pasado pero que el día no estaba tan bueno, me había dado por Guillermo el papel que me enviaste viendo que la capa te gustó ¿cómo te quedó de larga? Las batas una era para Octavia y el delantal lo mismo, uno para cada una, diréis si necesitáis más, te mandaré papel pues se marcha mañana Nonide según me dijo Aragón, así que te estoy escribiendo a las 11 de la noche, porque yo no sé qué pasa por el día que se va sin poder hacer nada.
Veo que no necesitas más sábanas y ¿qué tal la ropa que te mandé? Y el bautizo ¿cuándo es?
Nosotros fuimos ayer a San Justo por la mañana a pie, comimos en casa de un rentero luego fuimos a ver la finca y a las 4 nos fue a buscar el coche para llegar a la novena que resultó magnífica y la procesión de llevar la Virgen, hermosa, mucha gente, y en la plaza le cantaron una salve y al entrar en la Iglesia muchos vivas, en fin, muy bien. Me acordé mucho de Octavia y de ti.
Te dejo, voy a dormir mañana, terminaré esta.
(martes 27 de octubre de 1936, día de mercado y día en que las cogen prisioneras)
Continúo hoy después de hacer el mercado, preguntando todo el mundo por vosotras; hoy está aquí un día de verano, de modo que si ahí lo tenéis igual estará hermoso, tenéis suerte y además creo os atienden mucho y os consideran, así que dale las gracias de mi parte al Comandante y que estoy muy tranquila y contenta de que le sirváis para algo.
Escribe largo y mucho, te mando papel por si lo necesitas y esas mantecadas que ha traído Julia para vosotras.
Esta la mandamos por Nonide que se marcha ahora a las 3 así que esta noche la recibes. A todas un abrazo, recuerdos a todos los jefes y para ti un abrazo de tu madre que mucho te recuerda. Pilar
![[Img #54128]](http://astorgaredaccion.com/upload/images/05_2021/8742_carta-abuela-a-pilin.jpg)
En la misma carta, en la parte del encabezamiento le escribe unas letras don Magín Rodriguez García, deán de la Catedral, muy amigo de la familia. Es el don Magín de quien Pilín se acuerda constantemente en las cartas y da cariñosos recuerdos a la vez que a ‘Delfi’, Delfina, la sobrina del deán e íntima amiga de Pilín. Quien también quiso apuntarse a ir con las enfermeras a Somiedo pero su tío no la dejó por el peligro que él pensaba que eso suponía. Tío y sobrina vivían en el ‘chalé’, la casa modernista que Manuel Gullón mandó construir al fondo del jardín de su casa para que su suegra, doña María Rodríguez de Cela, la abuela de Pilín, en invierno no viviera en la gran casona. El “chalé de la abuela” tenía entrada, además de por el jardín familiar, por la calle de Santa Marta, hoy Los Sitios. Delfina felizmente para ella no subió al Puerto de Somiedo, se casó y tuvo dos hijos Loli y Juan Manuel Sutil.
Querida Pilín: Mucho me alegro que lo paséis bien y seáis tan bien atendidas de los militares, lo que era de esperar pues por ser militares son caballeros, hoy elevados al más alto grado. Las compañeras que están dispuestas a sustituiros os envidian y se disgustan porque no estáis ya aquí; a mí me parece bien que continuéis, ya porque estáis entrenadas, ya porque esos buenos militares están ya acostumbrados a vuestro modo de ser. Cariñosos recuerdos a Octavilla, Olga, saludos a esos buenos jefes y militares y sabes te quiere mucho tu buen amigo Magín.
Aprovechando las circunstancias de la salida del correo para Somiedo la prima de Pilín, Mena Rodriguez de Cela, le pone unas letras en un trozo de papel porque no le da tiempo a escribir una carta ya que se supone que el capitán Nonide está a punto de llegar para recoger el correo.
Queridísimas enfermeras; sólo dos letras porque me es imposible más por falta de tiempo para anunciaros “oficialmente” nuestra llegada (la familia Rodríguez de Cela acaba de llegar de Portugal como dice la madre de Octavia); no os figurarais lo muchísimo que os echamos de menos y las ganas que tenemos de veros pero por lo visto no será pronto pues están encantados –no es extraño- con vosotras y no os dejarán venir tan pronto. Aquí os tenemos envidia aunque yo estoy segura que no podría hacer una labor que ni a medias se pudiera comparar con la vuestra.
Otro día procuraré buscar mejor ocasión y os escribiré más largo y en papel más decente. Para todas muchos abrazos y la enhorabuena por lo bien que lo hacéis.
Vuestra prima y amiga Mena
El hermano de Pilín, Chema, también les dedica, con prisas, unas letras.
¡Decidme cómo se llaman esos médicos conocidos míos¡ !Es lo menos que me podrías haber dicho! ¿no será Serrano uno?, me están quitando la carta de las manos y por lo tanto muchos recuerdos para todas Jose Mª
La madre de Octavia, la tía Julia, ha hecho llegar a casa de su prima Pilar Yturriaga una carta para su hija.
![[Img #54127]](http://astorgaredaccion.com/upload/images/05_2021/5262_carta-a-octavia.jpg)
Carta de la madre de Octavia del 27 de octubre de 1936 (día que las cogen prisioneras)
Mi queridísima hija. Con que tan enfadada estás por no haberte escrito, pues me fue imposible y en confirmación de ello te diré vine antes de las 10 para hacerlo aquí en casa con calma y son las 12 al empezar ante todo te diré, vinieron las portuguesas (los Rodríguez de Cela), bien todas, pero Elvira aun sujeta en cama y muy cansada del viaje con cinco transbordos. Estuvieron en Salamanca en el Servicio Doméstico por no haber Hotel ni pensión vacante, les resultó muy bien. Rodrigo sigue en cama, muy molestado de vómitos y nervios.
Ahora hablaré de vosotras. Ya he recibido las buenas noticias vuestras, mi más profundo reconocimiento a ese señor Comandante por sus atenciones lo que le harás presente, así como a todas las personas que os distinguen, no dudando sabréis daros a respetar.
Con que te metiste a mandongona Dios quiera no hagas algún zafarrancho, no te metas a más de lo que puedas. También me dices habéis disparado, mucho cuidado con jugar con fuego. ¿Qué resultó del bautizo?, habiendo un Capellán ¿cómo estaba sin bautizar? o ¿habéis hecho alguna conquista? [se refiere a conquista religiosa] Mucho me alegraría. Las batas dí a Pilín que eran una para ti y otra para ella y no puedo alargarme más que van a llevar ésta a la una y como te digo empecé a las 12 pues vinieron Isabel la de Barrientos y Socorro que se encontró con ella la madre de Lucía. Todas dan recuerdos para ti.
Lo que no me gusta es la prolongación. Maca dice, y yo también, que te remplaza ella y así el cambio no será perjudicial a la Obra.
En sustitución del candil va ese candelero, no puedo más. Querían escribir las chicas pero no sé si podrán. Para todas mis recuerdos y para ti mil besos de tu amante madre. Escribe a Carmen a Salamanca. Para el 29 José Luis fue llamado al frente. Emilio fue a Lisboa.
Para no variar no encuentro el candelero.
![[Img #54130]](http://astorgaredaccion.com/upload/images/05_2021/6965_hospitalillo.jpg)
A las siete y veinte de la mañana de este día 27 de octubre llega al Gobierno Militar de León una llamada del comandante franquista de Villablino:
“Comunica
Somiedo que están atacando la posición y pide refuerzos, por lo que le envío una compañía”.
Algo inesperado está pasando en El Puerto de Somiedo. Estas cartas nunca salieron de Astorga. Seguramente el capitán Nonide recibió a primera hora de la mañana la noticia del ataque al destacamento, y por lo tanto a su Compañía, y salió rápidamente hacia las montañas con los refuerzos; o quizás le sorprendió el ataque al alba y no pudo bajar a Astorga como había pensado. El hecho es que las cartas y encargos nunca salieron hacia su destino porque el destino había desaparecido.
(*) Si quieres consultar los capítulos publicados:
ENFERMERAS MÁRTIRES DE SOMIEDO
Somiedo lunes 26 de Octubre 1936
Querida hermana Maca: como verás por Octavia estamos aquí muy bien, y contentísimas, pues todos son muy simpáticos y no saben qué hacer con nosotros, el Comandante es de lo más simpático; ya nos ha llevado a Villablino, San Félix, Vega, y a Rioscuro por haber dicho yo que allí conocíamos a una familia. Me levanto, asómbrate, a las siete de la mañana, y dormimos Olga y yo juntas y dormimos las dos muy bien, además en eso de las mantas somos iguales pues tenemos cinco mantas, tenemos una habitación muy buena y al lado otra que llamamos el gabinete en donde…`[no se entiende]…………. un taburete y una cómoda ......................................... que llevaron de la escuela.
Recibí vuestra carta lo mismo que la de Pedro y Pilar Calderón a los que voy a escribir desde aquí va a ser …..de modo que mándarme las señas. Cada día nos toca a una estar de guardia, a mí me tocó el domingo y lo estaré el miércoles [ese miércoles es cuando las cogieron prisioneras], por la mañana después de desayunar pasamos consulta, luego a las doce tenemos que dar el rancho o si no hacer un ponche o lo que vayan a tomar. Y ahora te hablaré de los encargos, todos me han encantado, y no te digo nada de la capa, estoy loca, el domingo mismo la estrené.
Ahora lo que te voy a pedir es que me mandes otra bata blanca pero que esté abierta por detrás en vez de por delante pues si no en la capa se ven los botones y hace feo; además te advierto que aquí tarda tres días la ropa en secarse y realmente como desde que nos levantamos estamos con las batas casi todos los días las tenemos que cambiar, y luego el Comandante cuando salimos de aquí para algún sitio quiere que vayamos con batas blancas, capa y brazalete y era una risa pues antes con la de Octavia la que salía se la ponía, pero como algunos días salimos dos yo tenía que llevar la chaqueta de piel que me está dando un resultado magnífico.
Ahora te voy a decir para que le des a Octavia lo que te voy a pedir: le pides a D. Magín la llave de mi armario, abres y verás en la parte izquierda de la primera andana un librito con las tapas encarnadas y que tiene escrito que lo compré en Barcelona, detrás de esto verás unas pinzas, me las traes pues el otro día necesitábamos unas para quitar unas pestañas y no las había; si sobró tela del delantal pues mandármela pues no me pusisteis bolsillos y nos son muy necesarios, mándame también la barrita de los labios que sabes ………. , pues nos viene muy bien porque con este aire se abren, en mi armario del cuarto de siempre, no en el de María Rebollar, tiene que haber una blusa blanca con mangas que la traiga Octavia pues para la falda pantalón me está muy bien. Y ahora te voy a decir que me hagas el favor de hacerme las dos mangas del jersey que traje, ya sabes que era el dibujo que tú hiciste, pues sin mangas no nos conviene. Octavia ya se hizo una para su jersey y se ha empezado la otra manga.
En mi armario hay en una especie de manta con unos pañitos dentro, mándame ocho o nueve pues no he traído ninguno. Por Dios no te olvides, en mi armario que tiene la llave D. Magín, en la 2ª andana al final a la izquierda hay dos cintas blancas, mándame una, la que esté más buena. El jersey que traje lo estoy haciendo para el Ordenanza del Comandante que es un chico de Valladolid muy simpático. Si tenéis por ahí algún juego como el que me tocó en la rifa mandármelo para jugar en la enfermería.
¿Y Mito y Chema? El primero seguirá en teléfonos ¿y el segundo? A tío Leo y a tía María lo mismo que a todos, lo mismo que a D. Magín y Delfi, un fortísimo abrazo.
¿Qué vida hacéis ahora? ¿Vais al Centro? Dime el efecto que os ha hecho a todas lo que os dijo Aragón de parte del Comandante, que dijo que no quería relevo; nosotros por nuestra parte encantadas con esa decisión. María Inés la de las trenzas ¿qué dice de esto? Y la de Arauzo ¿cómo va con ser Presidenta de la Cruz Roja? No me chocó las noticias de las detenciones de los de Panero, Buenadicha ¿? y Giménez, a pesar de que como es natural estarán en casa de Moisés disgustados.
En el armario mío donde la llave verás en la primera andana cerca del cuadernito un cepillito muy pequeño con el mango en encarnado, mándamelo.
Si me ves no me conoces pues se me ha abierto el apetito de tal forma que esta noche misma he tomado tres pedazos de pan, sopa, dos huevos fritos con patatas y carne en salsa y un postre, además de que nos hemos hecho las tres un poco bebedoras por tomar en todas las comidas vino tinto.
Maca, por Dios, que no se te olvide nada de lo que te pido y a ver si aciertas con todo.
Te mando la muda para que me la laven enseguida, que Octavia me la traiga pues aquí tarda mucho en secarse y la lavan muy mal. Mándame un camisón pues no traje más que uno. La camisa de punto es algo serio y ni por las noches me la quito, pues da un calor muy agradable.
A mamá un fuertísimo abrazo, lo mismo que a Mito a Chema a D Magín y a Delfi y recuerdos a todas las muchachas.
Dile a Chon si recibió una carta de un soldado de aquí que me pidió madrina de guerra y le di el nombre de ella. Hay muchos que nos piden nombres de modo que a ver se encuentras y le dices a las chicas y me mandas bastantes nombres. Hoy dimos el nombre de una chica de ahí para madrina.
A todos abrazos y para ti uno fuertísimo y muchos besos de tu hermana Pilín
Cuéntame de todo lo que pasa por ahí. Cada una de nosotras estamos destinadas a una compañía. Octavia a la 1ª Compañía de 3er Batallón y su Capitán se llama Farcinio. Olga a la Plana Mayor, y yo a la 1ª Compañía del 4º Batallón que su Capitán es Nonide. Aquí están Blanco y el hermano de Consuelo la boticaria. Esto te lo estoy escribiendo a la luz de una vela. La luz es lo que más extraño y nos traemos cada jaleo con las velas las linternas y las latas de aceite que es una juerga.
¡Adiós y que Viva España y el Ejército!
Por lo que dice Pilín Gullón en la carta parece que Octavia tenía intención de ir a Astorga pero con idea de volver. Cómo podría ella imaginarse que esa noche sería la última de su vida en libertad. Esa misma noche, ya en la madrugada, el destacamento del Puerto de Somiedo es despertado con tiros.
Pepe Aragón lleva el mismo día 26 la carta de Pilín a su madre doña Pilar, y ésta rápidamente se pone a escribir una carta de contestación que empieza el mismo día 26 y acaba de escribir el día 27 al mediodía. A esa hora las enfermeras, y el resto de los militares del destacamento, están muertos o prisioneros.
Pilar Yturriaga lunes 26 de octubre de 1936
Querida Pilín. Hoy vino Aragón a hacerme una visita de parte del Comandante para decirme que estabais muy bien y que os portáis bien, mucho me alegro que trabajéis y hagáis todo lo posible con esos pobres soldados que tanto ellos como todos los jefes tanto están pasando y luchando para salvarnos a todos de estas fieras y salvar a España.
Me dijo que ayer lo habían pasado muy bien y que había comido ahí mucha gente, habíais tenido misa como el domingo pasado pero que el día no estaba tan bueno, me había dado por Guillermo el papel que me enviaste viendo que la capa te gustó ¿cómo te quedó de larga? Las batas una era para Octavia y el delantal lo mismo, uno para cada una, diréis si necesitáis más, te mandaré papel pues se marcha mañana Nonide según me dijo Aragón, así que te estoy escribiendo a las 11 de la noche, porque yo no sé qué pasa por el día que se va sin poder hacer nada.
Veo que no necesitas más sábanas y ¿qué tal la ropa que te mandé? Y el bautizo ¿cuándo es?
Nosotros fuimos ayer a San Justo por la mañana a pie, comimos en casa de un rentero luego fuimos a ver la finca y a las 4 nos fue a buscar el coche para llegar a la novena que resultó magnífica y la procesión de llevar la Virgen, hermosa, mucha gente, y en la plaza le cantaron una salve y al entrar en la Iglesia muchos vivas, en fin, muy bien. Me acordé mucho de Octavia y de ti.
Te dejo, voy a dormir mañana, terminaré esta.
(martes 27 de octubre de 1936, día de mercado y día en que las cogen prisioneras)
Continúo hoy después de hacer el mercado, preguntando todo el mundo por vosotras; hoy está aquí un día de verano, de modo que si ahí lo tenéis igual estará hermoso, tenéis suerte y además creo os atienden mucho y os consideran, así que dale las gracias de mi parte al Comandante y que estoy muy tranquila y contenta de que le sirváis para algo.
Escribe largo y mucho, te mando papel por si lo necesitas y esas mantecadas que ha traído Julia para vosotras.
Esta la mandamos por Nonide que se marcha ahora a las 3 así que esta noche la recibes. A todas un abrazo, recuerdos a todos los jefes y para ti un abrazo de tu madre que mucho te recuerda. Pilar
En la misma carta, en la parte del encabezamiento le escribe unas letras don Magín Rodriguez García, deán de la Catedral, muy amigo de la familia. Es el don Magín de quien Pilín se acuerda constantemente en las cartas y da cariñosos recuerdos a la vez que a ‘Delfi’, Delfina, la sobrina del deán e íntima amiga de Pilín. Quien también quiso apuntarse a ir con las enfermeras a Somiedo pero su tío no la dejó por el peligro que él pensaba que eso suponía. Tío y sobrina vivían en el ‘chalé’, la casa modernista que Manuel Gullón mandó construir al fondo del jardín de su casa para que su suegra, doña María Rodríguez de Cela, la abuela de Pilín, en invierno no viviera en la gran casona. El “chalé de la abuela” tenía entrada, además de por el jardín familiar, por la calle de Santa Marta, hoy Los Sitios. Delfina felizmente para ella no subió al Puerto de Somiedo, se casó y tuvo dos hijos Loli y Juan Manuel Sutil.
Querida Pilín: Mucho me alegro que lo paséis bien y seáis tan bien atendidas de los militares, lo que era de esperar pues por ser militares son caballeros, hoy elevados al más alto grado. Las compañeras que están dispuestas a sustituiros os envidian y se disgustan porque no estáis ya aquí; a mí me parece bien que continuéis, ya porque estáis entrenadas, ya porque esos buenos militares están ya acostumbrados a vuestro modo de ser. Cariñosos recuerdos a Octavilla, Olga, saludos a esos buenos jefes y militares y sabes te quiere mucho tu buen amigo Magín.
Aprovechando las circunstancias de la salida del correo para Somiedo la prima de Pilín, Mena Rodriguez de Cela, le pone unas letras en un trozo de papel porque no le da tiempo a escribir una carta ya que se supone que el capitán Nonide está a punto de llegar para recoger el correo.
Queridísimas enfermeras; sólo dos letras porque me es imposible más por falta de tiempo para anunciaros “oficialmente” nuestra llegada (la familia Rodríguez de Cela acaba de llegar de Portugal como dice la madre de Octavia); no os figurarais lo muchísimo que os echamos de menos y las ganas que tenemos de veros pero por lo visto no será pronto pues están encantados –no es extraño- con vosotras y no os dejarán venir tan pronto. Aquí os tenemos envidia aunque yo estoy segura que no podría hacer una labor que ni a medias se pudiera comparar con la vuestra.
Otro día procuraré buscar mejor ocasión y os escribiré más largo y en papel más decente. Para todas muchos abrazos y la enhorabuena por lo bien que lo hacéis.
Vuestra prima y amiga Mena
El hermano de Pilín, Chema, también les dedica, con prisas, unas letras.
¡Decidme cómo se llaman esos médicos conocidos míos¡ !Es lo menos que me podrías haber dicho! ¿no será Serrano uno?, me están quitando la carta de las manos y por lo tanto muchos recuerdos para todas Jose Mª
La madre de Octavia, la tía Julia, ha hecho llegar a casa de su prima Pilar Yturriaga una carta para su hija.
Carta de la madre de Octavia del 27 de octubre de 1936 (día que las cogen prisioneras)
Mi queridísima hija. Con que tan enfadada estás por no haberte escrito, pues me fue imposible y en confirmación de ello te diré vine antes de las 10 para hacerlo aquí en casa con calma y son las 12 al empezar ante todo te diré, vinieron las portuguesas (los Rodríguez de Cela), bien todas, pero Elvira aun sujeta en cama y muy cansada del viaje con cinco transbordos. Estuvieron en Salamanca en el Servicio Doméstico por no haber Hotel ni pensión vacante, les resultó muy bien. Rodrigo sigue en cama, muy molestado de vómitos y nervios.
Ahora hablaré de vosotras. Ya he recibido las buenas noticias vuestras, mi más profundo reconocimiento a ese señor Comandante por sus atenciones lo que le harás presente, así como a todas las personas que os distinguen, no dudando sabréis daros a respetar.
Con que te metiste a mandongona Dios quiera no hagas algún zafarrancho, no te metas a más de lo que puedas. También me dices habéis disparado, mucho cuidado con jugar con fuego. ¿Qué resultó del bautizo?, habiendo un Capellán ¿cómo estaba sin bautizar? o ¿habéis hecho alguna conquista? [se refiere a conquista religiosa] Mucho me alegraría. Las batas dí a Pilín que eran una para ti y otra para ella y no puedo alargarme más que van a llevar ésta a la una y como te digo empecé a las 12 pues vinieron Isabel la de Barrientos y Socorro que se encontró con ella la madre de Lucía. Todas dan recuerdos para ti.
Lo que no me gusta es la prolongación. Maca dice, y yo también, que te remplaza ella y así el cambio no será perjudicial a la Obra.
En sustitución del candil va ese candelero, no puedo más. Querían escribir las chicas pero no sé si podrán. Para todas mis recuerdos y para ti mil besos de tu amante madre. Escribe a Carmen a Salamanca. Para el 29 José Luis fue llamado al frente. Emilio fue a Lisboa.
Para no variar no encuentro el candelero.
A las siete y veinte de la mañana de este día 27 de octubre llega al Gobierno Militar de León una llamada del comandante franquista de Villablino:
“Comunica
Somiedo que están atacando la posición y pide refuerzos, por lo que le envío una compañía”.
Algo inesperado está pasando en El Puerto de Somiedo. Estas cartas nunca salieron de Astorga. Seguramente el capitán Nonide recibió a primera hora de la mañana la noticia del ataque al destacamento, y por lo tanto a su Compañía, y salió rápidamente hacia las montañas con los refuerzos; o quizás le sorprendió el ataque al alba y no pudo bajar a Astorga como había pensado. El hecho es que las cartas y encargos nunca salieron hacia su destino porque el destino había desaparecido.
(*) Si quieres consultar los capítulos publicados:
ENFERMERAS MÁRTIRES DE SOMIEDO