IU provincial alerta sobre el cierre de bancos en las áreas rurales y sus consecuencias en la población envejecida
"Estos cierres no solo se traducen en perdida de empleos, sino que también en perdida de servicios en un ya muy maltrecho medio rural, manifesta el líder de la formación política, Javier Arias.
![[Img #54185]](http://astorgaredaccion.com/upload/images/05_2021/1124_7061_oficina-banco-santander.jpg)
El coordinador provincial de IU, Javier Arias, alerta que los cierres de las sucursales bancarias en las áreas ruralres es “otro golpe más, otra puntilla a las zonas rurales de la provincia, y en especial a la población mayor”. A su vez, la progresiva digitalización y falta de atención personal perjudica a los usuarios de más edad. "Por tal motivo, y ante la que se nos viene encima, desde Izquierda Unida no entendemos el silencio y cinismo de las administraciones superiores como la Diputación o la propia Junta de Castilla y León en su lucha contra la despoblación”, asegura Arias.
En el último año, los pueblos de la provincia asisten al cierre de oficinas de las entidades bancarias en le medio rural. Si el año pasado el Banco Santander planteaba cerrar 15 oficinas y despedir a 50 trabajadores en la provincia, este año es el BBVA con la propuesta de cerrar de 14 sucursales. También otras entidades, como Unicaja, ha anunciado más clausuras.
"Estos cierres no solo se traducen en perdida de empleos, sino que también en perdida de servicios en un ya muy maltrecho medio rural, manifesta el líder de la formación política. Desde Izquierda Unida provincial de León "advertimos de los efectos negativos" para la población envejecida de León, "es por ello que reclamamos a las entidades financieras que tengan pensado presentar expedientes de regulación de empleo, en referencia principalmente a CaixaBank y Bankia ante la fusión que han acometido recientemente o a los problemas que están surgiendo en el BBVA, que se lo piensen por el mazazo que supondrá para estos pueblos".
Recuerda IU que la consecuencia inmediata del proceso de fusión bancaria ha sido la destrucción de empleo y el cierre de sucursales y asegura que a la fusión de CaixaBank y Bankia, se suma el anuncio de un ERE en el BBVA que contempla 3.800 despidos y el cierre de una de cada cuatro oficinas.
El coordinador provincial de IU, Javier Arias, alerta que los cierres de las sucursales bancarias en las áreas ruralres es “otro golpe más, otra puntilla a las zonas rurales de la provincia, y en especial a la población mayor”. A su vez, la progresiva digitalización y falta de atención personal perjudica a los usuarios de más edad. "Por tal motivo, y ante la que se nos viene encima, desde Izquierda Unida no entendemos el silencio y cinismo de las administraciones superiores como la Diputación o la propia Junta de Castilla y León en su lucha contra la despoblación”, asegura Arias.
En el último año, los pueblos de la provincia asisten al cierre de oficinas de las entidades bancarias en le medio rural. Si el año pasado el Banco Santander planteaba cerrar 15 oficinas y despedir a 50 trabajadores en la provincia, este año es el BBVA con la propuesta de cerrar de 14 sucursales. También otras entidades, como Unicaja, ha anunciado más clausuras.
"Estos cierres no solo se traducen en perdida de empleos, sino que también en perdida de servicios en un ya muy maltrecho medio rural, manifesta el líder de la formación política. Desde Izquierda Unida provincial de León "advertimos de los efectos negativos" para la población envejecida de León, "es por ello que reclamamos a las entidades financieras que tengan pensado presentar expedientes de regulación de empleo, en referencia principalmente a CaixaBank y Bankia ante la fusión que han acometido recientemente o a los problemas que están surgiendo en el BBVA, que se lo piensen por el mazazo que supondrá para estos pueblos".
Recuerda IU que la consecuencia inmediata del proceso de fusión bancaria ha sido la destrucción de empleo y el cierre de sucursales y asegura que a la fusión de CaixaBank y Bankia, se suma el anuncio de un ERE en el BBVA que contempla 3.800 despidos y el cierre de una de cada cuatro oficinas.
