Sánchez traiciona al Sáhara
![[Img #57842]](https://astorgaredaccion.com/upload/images/04_2022/7253_escanear0001.jpg)
Felipe González, en noviembre de 1976, siendo secretario general del PSOE, visitó el campo de refugiados saharauis en Tindurf, al suroeste de Argelia. En su discurso dejó claro su posicionamiento y el de su partido: “El pueblo saharaui va a vencer en su lucha. Va a vencer, no solo porque tiene la razón sino porque tiene la voluntad de luchar por su libertad. Sentimos vergüenza porque el Gobierno no solo haya hecho una mala colonización sino una peor descolonización, entregándoos en manos de gobiernos reaccionarios como los de Marruecos y Mauritania. “Nuestro partido estará con vosotros hasta la victoria final”. En 1992, ya como presidente del Gobierno, Felipe González recibió al secretario general del Frente Polisario en Madrid, dónde le reiteró el apoyo de España a la celebración de un referéndum sobre la autodeterminación.
En el año 2003 Trinidad Jiménez, candidata socialista a la alcaldía de Madrid encabezaba, como activista por el Sáhara libre y acompañada por el secretario general de UGT, las manifestaciones en apoyo de la independencia del pueblo saharaui. Leire Pajín, ministra socialista de Sanidad, era miembro de la Asociación Amigos del Pueblo Saharaui en Alicante, algo que rezaba en su biografía. Otro miembro del partido socialista habitual de las manifestaciones pro saharauis era Pedro Zerolo, por entonces secretario de Movimientos Sociales y Relaciones con las ONG del PSOE. Odón Elorza o el que fuera ex secretario de CCOO y posteriormente diputado socialista, Antonio Gutiérrez, asistían activamente a las manifestaciones en pro del pueblo saharaui, y algunos diputados y diputadas socialistas de aquellos años, intentaron promover una declaración de los grupos del Congreso en apoyo a su autodeterminación.
En 1991 el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprobó una resolución que contemplaba como salida del conflicto la celebración de un referéndum de autodeterminación del Sahara Occidental.
A lo largo de su carrera política Pedro Sánchez también se ha pronunciado sobre éste referéndum, y lo hizo como diputado raso en el Congreso, como secretario general del PSOE o como presidente del Gobierno a través de alguno de sus ministros. En su programa de abril de 2019, decía: "Promoveremos la solución del conflicto del Sáhara Occidental a través del cumplimiento de las resoluciones de Naciones Unidas, que garantizan el derecho de autodeterminación del pueblo saharaui; para ello, trabajaremos para alcanzar una solución del conflicto que sea justa, definitiva, mutuamente aceptable y respetuosa con el principio de autodeterminación del pueblo saharaui".
Ahora, el gobierno ‘progre’ de Pedro Sánchez vuelve a enseñarnos que lo que llevaba en su programa solamente eran promesas para recabar votos, y en esta ocasión se levantó una mañana considerando que la propuesta de autonomía realizada por Marruecos para esta región era la “más seria, realista y creíble” para solventar el conflicto. Lo que viene a ser lo mismo que decir que, el supuesto gobierno de progreso que tenemos, pretende reconocer la ocupación ilegal de Marruecos y abandonar definitivamente al pueblo saharaui, dejándolo en manos de un país que respecto a esta situación se ha pasado por el forro el derecho internacional y todas las resoluciones que ha habido al respecto.
El PSOE ha vuelto a claudicar. Marruecos ha demostrado la mediocridad como presidente de Pedro Sánchez, imponiéndole un plan de autonomía y obligándole a descartar el referéndum de autodeterminación, algo que éste acepto a espaldas del Parlamento y de los españoles.
Ahora, para informar y dejar contentos a sus palmeros, aquellos que hace unos años se sentían guerreros llevando una chapa reivindicativa del Sahara, el PSOE de Sánchez ha puesto en circulación un argumentario de cuatro páginas en el que trata de convencerlos que no ha habido un cambio de posición en relación al Sahara y que la propuesta de autonomía que impone Marruecos es la que él siempre había defendido para solucionar el conflicto”. Pero no pasará nada, Sánchez, volverá a abducirlos con sus mentiras (una vez más) y los de la pancarta reivindicativa y la chapa, los progres de hace años, ahora ni siquiera se sentirán engañados, es más, probablemente cambiarán su chapa y vocearán la nueva consigna del jefe. Mientras el pueblo saharaui volverá a sentirse traicionado, teniendo de su lado la ley, la razón y enormes cantidades de dignidad en medio de la nada.
Felipe González, en noviembre de 1976, siendo secretario general del PSOE, visitó el campo de refugiados saharauis en Tindurf, al suroeste de Argelia. En su discurso dejó claro su posicionamiento y el de su partido: “El pueblo saharaui va a vencer en su lucha. Va a vencer, no solo porque tiene la razón sino porque tiene la voluntad de luchar por su libertad. Sentimos vergüenza porque el Gobierno no solo haya hecho una mala colonización sino una peor descolonización, entregándoos en manos de gobiernos reaccionarios como los de Marruecos y Mauritania. “Nuestro partido estará con vosotros hasta la victoria final”. En 1992, ya como presidente del Gobierno, Felipe González recibió al secretario general del Frente Polisario en Madrid, dónde le reiteró el apoyo de España a la celebración de un referéndum sobre la autodeterminación.
En el año 2003 Trinidad Jiménez, candidata socialista a la alcaldía de Madrid encabezaba, como activista por el Sáhara libre y acompañada por el secretario general de UGT, las manifestaciones en apoyo de la independencia del pueblo saharaui. Leire Pajín, ministra socialista de Sanidad, era miembro de la Asociación Amigos del Pueblo Saharaui en Alicante, algo que rezaba en su biografía. Otro miembro del partido socialista habitual de las manifestaciones pro saharauis era Pedro Zerolo, por entonces secretario de Movimientos Sociales y Relaciones con las ONG del PSOE. Odón Elorza o el que fuera ex secretario de CCOO y posteriormente diputado socialista, Antonio Gutiérrez, asistían activamente a las manifestaciones en pro del pueblo saharaui, y algunos diputados y diputadas socialistas de aquellos años, intentaron promover una declaración de los grupos del Congreso en apoyo a su autodeterminación.
En 1991 el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprobó una resolución que contemplaba como salida del conflicto la celebración de un referéndum de autodeterminación del Sahara Occidental.
A lo largo de su carrera política Pedro Sánchez también se ha pronunciado sobre éste referéndum, y lo hizo como diputado raso en el Congreso, como secretario general del PSOE o como presidente del Gobierno a través de alguno de sus ministros. En su programa de abril de 2019, decía: "Promoveremos la solución del conflicto del Sáhara Occidental a través del cumplimiento de las resoluciones de Naciones Unidas, que garantizan el derecho de autodeterminación del pueblo saharaui; para ello, trabajaremos para alcanzar una solución del conflicto que sea justa, definitiva, mutuamente aceptable y respetuosa con el principio de autodeterminación del pueblo saharaui".
Ahora, el gobierno ‘progre’ de Pedro Sánchez vuelve a enseñarnos que lo que llevaba en su programa solamente eran promesas para recabar votos, y en esta ocasión se levantó una mañana considerando que la propuesta de autonomía realizada por Marruecos para esta región era la “más seria, realista y creíble” para solventar el conflicto. Lo que viene a ser lo mismo que decir que, el supuesto gobierno de progreso que tenemos, pretende reconocer la ocupación ilegal de Marruecos y abandonar definitivamente al pueblo saharaui, dejándolo en manos de un país que respecto a esta situación se ha pasado por el forro el derecho internacional y todas las resoluciones que ha habido al respecto.
El PSOE ha vuelto a claudicar. Marruecos ha demostrado la mediocridad como presidente de Pedro Sánchez, imponiéndole un plan de autonomía y obligándole a descartar el referéndum de autodeterminación, algo que éste acepto a espaldas del Parlamento y de los españoles.
Ahora, para informar y dejar contentos a sus palmeros, aquellos que hace unos años se sentían guerreros llevando una chapa reivindicativa del Sahara, el PSOE de Sánchez ha puesto en circulación un argumentario de cuatro páginas en el que trata de convencerlos que no ha habido un cambio de posición en relación al Sahara y que la propuesta de autonomía que impone Marruecos es la que él siempre había defendido para solucionar el conflicto”. Pero no pasará nada, Sánchez, volverá a abducirlos con sus mentiras (una vez más) y los de la pancarta reivindicativa y la chapa, los progres de hace años, ahora ni siquiera se sentirán engañados, es más, probablemente cambiarán su chapa y vocearán la nueva consigna del jefe. Mientras el pueblo saharaui volverá a sentirse traicionado, teniendo de su lado la ley, la razón y enormes cantidades de dignidad en medio de la nada.