La Virgen del Castro sale del santuario de la Valduerna entre cantos y emociones

Con el cielo azul y la primavera brotando en los campos, la Virgen del Castro ha salido este sábado al mediodía del santuario de Castrotierra de la Valduerna entre cantos y emociones, después de la celebración de la misa. La Virgen del Rosario le ha acompañado hasta la entrada de la carretera que va hacia Astorga, donde los procuradores de la tierra reciben la encomienda de organizar el pregrinaje de los cerca de 20 kilómetros.

Abriendo el recorrido hasta la Catedral de Astorga, a donde llegará pasadas las 20 horas, se encuentran pendones de la Valduerna, Maragatería, La Sequeda, la Vega del Tuerto, el Órbigo o La Cepeda, en una tradición ancestral que se repite desde hace siglos siempre que la sequía se cierne sobre los campos de cultivo, y que en esta ocasión se suma el agradecimiento a la Virgen por que ha quedado atrás los difíciles momentos de la pandemia de covid.

Cruces y pendones, cantos y rezos son las señas del cortejo que entre el monte de encinas se asoma a la carretera Madrid-Coruña a la altura de Riego de la Vega en el peregrinaje hasta la Catedral.