Heterodoxos y heterodoxias astorganas

El último ‘Miércoles al sol’ de ‘El filandón del lobo’ se celebró en el salón de actos de la Biblioteca de Astorga a cargo de Rogelio Blanco con el tema de heterodoxos y heterodoxias astorganas.

Comenzaba Rogelio Blanco diciendo que el ser humano va dando muestras de cambio constante. La cultura es la creación específicamente humana. Pero esta creación se hace desde el barro cultural heredado. Decía que los heterodoxos van marcando el andar y son casi siempre ortodoxias anticipadas, prematuras. Digamos que la ortodoxia de ahora fue la heterodoxia de antaño, pero solo las triunfantes.

Claro que las que no llegan a triunfar están ausentes de las memorias y de los callejeros. Aunque esto último tal vez sea otra heterodoxia astorgana, pues más de la mitad de los que mencionó sí aparecen en el callejero astorgano.

Dada la brevedad del tiempo apenas podía entrar en detalle, de lo que el conferenciante se lamentaba. Citó en primer lugar a algunos heterodoxos o heterodoxias leonesas, entre las cuales estaban ‘Las asambleas de los astures’ que a  Estrabón le parecían extrañas porque dejaban participar y opinar a las mujeres. Otra anomalía o heterodoxia leonesa que resaltó fueron las Cortes de Alfonso VIII o IX de León, según se mire, un rey que sufrió tres excomuniones y dos interceptos hacia el reino. Pedro Andrés, obispo de Astorga apostó por el rey heterodoxo.

Otra heterodoxia leonesa fue el ‘Rito mozárabe’, con liturgias participativas, festivas con ordalía incluida. Esta heterodoxia continuó con los Guzmanes (los comuneros leoneses).

También del Reino de León sale la escuela de Salamanca con la defensa del iusnaturalismo (una heterodoxia frente al positivismo jurídico).

En Astorga, señalaba Rogelio Blanco, una de las primeras herejías fue la de Prisciliano (vivir al modo del Evangelio, con participación de las mujeres en la liturgia), San Dictino, continuador del priscilianismo escribió 'Libra', pero más tarde se convirtió. Basílides también se echó un cuarto a espaldas pues firma el libelo en favor del emperador (cartas a San Cipriano)

Mencionó también a Rogato que se enfrentó a Santo Toribio. En el siglo XIII Hernán el alemán, obispo de Astorga, que estudió en París y tradujo a Aristóteles, Alfarabí y Averroes, y tuvo contacto con los albigenses y los cátaros en su defensa de los pobres y de la pobreza.

Otro heterodoxo que se paseó por la conferencia fue Alfonso de Proaza (seguidor de Raimundo Lulio, primer pansofista de la historia). También hizo mención del heterodoxo ‘pueblo maragato’. Añadía que en 1780 se creó en Astorga la primera sociedad de Amigos del País de la provincia de León.

Tiburcio, Pedro Costilla y el obispo Manuel Vicente Martínez destacaron como defensores de Astorga frente al francés.

Rodríguez Padrón, cercano al cuaquerismo, cura de Quintanilla de Somoza, diputado en las Cortes de Cádiz que junto con Muñoz Torreros defendieron ante el obispo ultramontano Manuel Vicente Martínez, negar el voto a Santiago, la supresión de la Inquisición, la introducción de la democracia y la supresión de los diezmos. Por supuesto unos planteamientos más modernizadores que los del obispo de Astorga por lo que terminó castigado y excomulgado. Fueron rehabilitados durante el bienio liberal. 

Entre los personajes astorganos y maragatos hizo mención de el relojero Losada de Iruela (liberal, pastor cabreirés que terminó en los sectores liberales ingleses y regentó una magnífica empresa de relojes.) El maragato Cordero, exiliado en Londres y Lisboa.

También tuvieron cabida Gumersindo Azcárate, Fernando de Castro y Lázaro Bardón que daba clases de griego en Astorga y que creó una escuela para formar maestras. Propugnaba la emancipación de la mujer y la lucha contra la esclavitud. 

En el siglo XVIII también fueron heterodoxos el grupo de carlistas en su reacción contra el modelo isabelino.

Entre los carlistas astorganos destacó a Antonio Martínez Riesco, cura de San Justo y a otros clérigos trabucaires, como Rodríguez Cofralla, profesor del seminario que asesinó por progresista al alcalde del Val de San Lorenzo, etc.

Otro personaje vinculado a Astorga de origen palentino es Modesto Lafuente un hombre progresista diputado por Astorga pero que luego se pasó al partido de O'Donnell. Un hombre protegido por el obispo Torres Amat.

Entre 1854 y 1858 se cuentan en Astorga 425 motines y 102 hornos. ‘El motín del Pan’ de Astorga que luego se extendió por todo el resto del país, fue una huelga contra el hambre activada por los ciudadanos de Astorga contra el poder isabelino.

Otro detalle del siglo XIX que sucede en Astorga es la creación del Partido Socialista Obrero Español que en aquel momento se llamaba Partido Democrático Socialista. La primera agrupación socialista en 1897 es de Astorga antecediendo en dos años a la de León. Esta asociación muy reivindicativa se reunía los festivos en la casa de Bartolomé Celada, un tabernero de Puerta Rey.

Al tiempo se crea en Astorga el periódico La Luz, un periódico ultramontano con críticas furibundas al periódico heterodoxo de los socialistas. Hizo mención de Antolín López Peláez de Manzanal del Puerto, progresista amigo de Galdós que se retiró a Albares de la Ribera donde creó una vinoteca.

También hizo alusión a la masonería astorgana a finales del siglo XIX. Luego en 1933 el ‘Triángulo Astúrica’ tuvo su importancia dentro del mundo masónico.

En 1915, hubo en Astorga una fuerte asonada de obreros de la construcción que se anticipó a otras huelgas fortísimas como las de la minería. Eran huelgas con un gran contenido anarquista. Jesús Alucha fue el principal personaje anarquista astorgano. Participó en el Congreso Nacional en el que salió elegido Ángel Pestaña y se presentó con el poder de 372 socios procedentes de Astorga.

También hizo mención de los caciques que pululaban por la zona en este periodo: García-Prieto, Gullón. En las Cortes de Madrid les llamaban 'la murga astorgana'. Eran un grupo de gente influyente y poderosa que consiguieron traer cosas para Astorga.

También destacó como director de El Obrero Leonés a Miguel Carro que con otro Miguel, Miguel Castaño director de 'La Democracia', pilotaron dos periódicos singulares que tuvieron fuerza en las ideologías de izquierdas de la provincia.

Recordó ya muy de pasada, pues el tiempo apremiaba, a Balbina, ‘La chata de San Andrés’, la primera mujer que se fusila en las tapias del cementerio de Astorga. También a Toribio Martínez Cabrera, maragato de Andiñuela, que tuvo la desgracia de entregar Madrid en el golpe, y que estuvo al mando de la base naval de Cartagena. Recordó a Bernardo Blanco uno de los paseados en Astorga.

En los años 20 las dos revistas Saeta y Humo (esta última de tono humorístico) eran revistas heterodoxas de los que luego fueron denominados como escritores de ‘La Escuela de Astorga’ que también escribieron un libro paródico: Los cuatro filetes del Apocalipsis.

Como últimas heterodoxias astorganas citó a ‘Horizonte’, periódico astorgano incautado. Otras heterodoxias cercanas fueron el cierre del seminario motivado por el movimiento anarquista y el periódico democrático La Unión de campesinos leoneses y  los movimientos de los tractoristas.

En la actualidad, finalizaba su alocución, el movimiento heterodoxo por antonomasia en León es el movimiento de autonomía de León, al que calificó como una heterodoxia de la gente crítica que no acepta que la historia se fosilice y que ve con atención lo que está sucediendo: pueblos vacíos, gentes olvidadas promesas incumplidas.