Ninguna empresa de Pradorrey se responsabiliza de sus vertidos contaminantes
![[Img #6875]](upload/img/periodico/img_6875.jpg)
Las obras de la nueva fosa de decantación para depurar las aguas de Pradorrey han dejado al descubierto grandes manchas de grasa.
Ninguna empresa radicada en Pradorrey se responsabiliza de sus vertidos contaminantes, ni las situadas en el polígono industrial ni las diseminadas por la pedanía de Brazuelo, incluido el almacén de residuos de carbón, "todas están vertiendo de manera ilegal", asegura quien fue alcalde hasta hace unos meses y ahora es concejal del PAL, Manuel Fernández Pereira.
La situación medioambiental de Pradorrey la conocen en la Confederación Hidrográfica del Duero, ya que periódicamente el Ayuntamiento de Brazuelo recibe sanciones que van desde los 2.000 a los 6.000 euros, que paga religiosamente sin que, quienes gobiernan y han gobernado el municipio, hayan obligado a las empresas a hacerse responsables de los residuos que vierten a través del alcantarillado público o por otros cauces. Según Manuel Fernández Pereira, a principios de este año "se les pidió que declararan el tipo de vertido que están efectuando", pero a día de hoy, ninguna empresa ha respondido a la petición.
Esta situación ha sido debatida en el pleno ordinario celebrado este jueves en el Ayuntamiento de Brazuelo, donde el portavoz del PSOE, Domingo Carro, ha planteado el tema en el turno de ruegos y preguntas, centrándolo en el "cansancio de los vecinos" ante un problema cuya competencia es del Ayuntamiento y que no acaba de resolver, "pedimos que los impuestos que pagamos los vecinos no se vayan por el alcantarillado", afirmó el concejal socialista.
![[Img #6876]](upload/img/periodico/img_6876.jpg)
Esta fotografía de las manchas de grasa en Pradorrey ha sido enviada por un vecino de la zona.
El debate sobre los vertidos que afectan a la cuenca del río Aragañoso, surgió a raíz de la puesta en conocimiento por parte de Domingo Carro, que además es el presidente de la Junta Vecinal de Pradorrey, de que las obras de la nueva balsa de decantación de Pradorrey que se ejecutan estos días, están dejando al descubierto grandes manchas de grasa provenientes del taller mecánico situado en la carretera N-VI, una situación denunciada por los vecinos a través de una recogida de firmas a los que la empresa respondió que todo lo tiene en regla, tal y como ha venido informando Astorga Redacción.
En el transcurso del pleno los portavoces de los grupos del PAL y el PSOE, junto con el alcalde del PP, Pedro Fernández, acordaron reunirse en los próximos días, por segunda vez en esta legislatura, con el propietario de la empresa Hercasa para "decirle que la función del Ayuntamiento no es pagar las sanciones de la empresa" y que instale el sistema de separado de las grasas y restos de hidrocarburos como obliga la ley y la ordananza municipal, "porque el Ayuntamiento está pagando la limpieza de sus vertidos a la fosa" de decantación, indicó el ex alcalde del PAL. El actual regidor confirmó que la última limpieza realizada hace menos de un mes por parte de un gestor especializado en este tipo de residuos, le ha costado a los contribuyentes de Brazuelo 4.000 euros.
En el caso de que la empresa vuelva a hacer oídos sordos a la petición municipal de que resuelva el problema de sus vertidos, el secretario del Ayuntamiento informó que las industrias que no tengan autorización de vertidos "se les puede suspender" -después de haberles informado- el derecho a arrojar los residuos sin depurar al alcantarillado público, o dicho en otras palabras, como sugirió Manuel Fernández Pereira, "si no lo resuelve vamos con una máquina y le cortamos el enganche" a la red de saneamiento "porque hay que ser drásticos de una vez".
Según Domingo Carro, al propietario del taller mecánico "hay que exigirle lo mismo que hace con sus dos empresas en el polígono de Astorga, tenerlo en regla, porque el Ayuntamiento controla periódicamente los vertidos levantando la arqueta y comprobando que el agua está limpia de grasas y otro tipo de residuos", por ello, Carro preguntó "¿por qué la misma empresa en Brazuelo hace lo que le da la gana?".
Las obras de la nueva fosa de decantación para depurar las aguas de Pradorrey han dejado al descubierto grandes manchas de grasa.
Ninguna empresa radicada en Pradorrey se responsabiliza de sus vertidos contaminantes, ni las situadas en el polígono industrial ni las diseminadas por la pedanía de Brazuelo, incluido el almacén de residuos de carbón, "todas están vertiendo de manera ilegal", asegura quien fue alcalde hasta hace unos meses y ahora es concejal del PAL, Manuel Fernández Pereira.
La situación medioambiental de Pradorrey la conocen en la Confederación Hidrográfica del Duero, ya que periódicamente el Ayuntamiento de Brazuelo recibe sanciones que van desde los 2.000 a los 6.000 euros, que paga religiosamente sin que, quienes gobiernan y han gobernado el municipio, hayan obligado a las empresas a hacerse responsables de los residuos que vierten a través del alcantarillado público o por otros cauces. Según Manuel Fernández Pereira, a principios de este año "se les pidió que declararan el tipo de vertido que están efectuando", pero a día de hoy, ninguna empresa ha respondido a la petición.
Esta situación ha sido debatida en el pleno ordinario celebrado este jueves en el Ayuntamiento de Brazuelo, donde el portavoz del PSOE, Domingo Carro, ha planteado el tema en el turno de ruegos y preguntas, centrándolo en el "cansancio de los vecinos" ante un problema cuya competencia es del Ayuntamiento y que no acaba de resolver, "pedimos que los impuestos que pagamos los vecinos no se vayan por el alcantarillado", afirmó el concejal socialista.
Esta fotografía de las manchas de grasa en Pradorrey ha sido enviada por un vecino de la zona.
El debate sobre los vertidos que afectan a la cuenca del río Aragañoso, surgió a raíz de la puesta en conocimiento por parte de Domingo Carro, que además es el presidente de la Junta Vecinal de Pradorrey, de que las obras de la nueva balsa de decantación de Pradorrey que se ejecutan estos días, están dejando al descubierto grandes manchas de grasa provenientes del taller mecánico situado en la carretera N-VI, una situación denunciada por los vecinos a través de una recogida de firmas a los que la empresa respondió que todo lo tiene en regla, tal y como ha venido informando Astorga Redacción.
En el transcurso del pleno los portavoces de los grupos del PAL y el PSOE, junto con el alcalde del PP, Pedro Fernández, acordaron reunirse en los próximos días, por segunda vez en esta legislatura, con el propietario de la empresa Hercasa para "decirle que la función del Ayuntamiento no es pagar las sanciones de la empresa" y que instale el sistema de separado de las grasas y restos de hidrocarburos como obliga la ley y la ordananza municipal, "porque el Ayuntamiento está pagando la limpieza de sus vertidos a la fosa" de decantación, indicó el ex alcalde del PAL. El actual regidor confirmó que la última limpieza realizada hace menos de un mes por parte de un gestor especializado en este tipo de residuos, le ha costado a los contribuyentes de Brazuelo 4.000 euros.
En el caso de que la empresa vuelva a hacer oídos sordos a la petición municipal de que resuelva el problema de sus vertidos, el secretario del Ayuntamiento informó que las industrias que no tengan autorización de vertidos "se les puede suspender" -después de haberles informado- el derecho a arrojar los residuos sin depurar al alcantarillado público, o dicho en otras palabras, como sugirió Manuel Fernández Pereira, "si no lo resuelve vamos con una máquina y le cortamos el enganche" a la red de saneamiento "porque hay que ser drásticos de una vez".
Según Domingo Carro, al propietario del taller mecánico "hay que exigirle lo mismo que hace con sus dos empresas en el polígono de Astorga, tenerlo en regla, porque el Ayuntamiento controla periódicamente los vertidos levantando la arqueta y comprobando que el agua está limpia de grasas y otro tipo de residuos", por ello, Carro preguntó "¿por qué la misma empresa en Brazuelo hace lo que le da la gana?".