El embalse de Villameca inicia un año hidrológico excepcional
El incremento de agua se atribuye a las intensas lluvias registradas recientemente
![[Img #66327]](https://astorgaredaccion.com/upload/images/11_2023/5487_902_pantano-villameca.jpg)
Las lluvias de las últimas semanas certifican un inició de año hidrológico excelente. Los embalses de la cuenca del Duero, administrados por la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), han registrado un sobresaliente aumento en sus niveles de reservas, almacenando 1.383,5 hectómetros cúbicos (hm3) de agua, lo que equivale al 48,5% de su capacidad total. Este volumen representa un aumento de casi quince puntos en comparación con el año anterior y aproximadamente seis puntos por encima del promedio de la última década.
El incremento se atribuye a las intensas lluvias registradas recientemente (especialmente en el oeste de la cuenca), que han contribuido al aumento de las reservas y evidencian una situación más favorable que en la temporada 2022/2023, con subidas notables en sistemas como el del Tuerto (Villameca) que está al 75%, el de Tormes al 73%, o el de Carrión 53%, logrando niveles de almacenamiento muy superiores a los habituales para esta época del año.
Asimismo, sistemas como el del Órbigo, Arlanzón, Alto Duero, Riaza, Adaja y Águeda, poseen niveles de agua embalsada considerablemente superiores a los habituales.
El sistema Pisuerga, que había sufrido sequías en años anteriores, muestra signos de recuperación, alcanzando cerca del 25% de su capacidad total, un notable aumento desde el 11% registrado hace doce meses. Otros como el Esla también están experimentando una recuperación significativa.
Este inicio positivo del año hidrológico es una continuación del cierre favorable del año hidrológico anterior, que se benefició de lluvias y una bajada de temperaturas en septiembre, lo que redujo considerablemente la demanda de agua de los embalses. Como resultado, todos los sistemas de explotación alcanzaron a finales del noveno mes niveles de reservas superiores a los objetivos previstos, a pesar de una primavera desafiante.
Las lluvias de las últimas semanas certifican un inició de año hidrológico excelente. Los embalses de la cuenca del Duero, administrados por la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), han registrado un sobresaliente aumento en sus niveles de reservas, almacenando 1.383,5 hectómetros cúbicos (hm3) de agua, lo que equivale al 48,5% de su capacidad total. Este volumen representa un aumento de casi quince puntos en comparación con el año anterior y aproximadamente seis puntos por encima del promedio de la última década.
El incremento se atribuye a las intensas lluvias registradas recientemente (especialmente en el oeste de la cuenca), que han contribuido al aumento de las reservas y evidencian una situación más favorable que en la temporada 2022/2023, con subidas notables en sistemas como el del Tuerto (Villameca) que está al 75%, el de Tormes al 73%, o el de Carrión 53%, logrando niveles de almacenamiento muy superiores a los habituales para esta época del año.
Asimismo, sistemas como el del Órbigo, Arlanzón, Alto Duero, Riaza, Adaja y Águeda, poseen niveles de agua embalsada considerablemente superiores a los habituales.
El sistema Pisuerga, que había sufrido sequías en años anteriores, muestra signos de recuperación, alcanzando cerca del 25% de su capacidad total, un notable aumento desde el 11% registrado hace doce meses. Otros como el Esla también están experimentando una recuperación significativa.
Este inicio positivo del año hidrológico es una continuación del cierre favorable del año hidrológico anterior, que se benefició de lluvias y una bajada de temperaturas en septiembre, lo que redujo considerablemente la demanda de agua de los embalses. Como resultado, todos los sistemas de explotación alcanzaron a finales del noveno mes niveles de reservas superiores a los objetivos previstos, a pesar de una primavera desafiante.
