Los alegres días de 'El Fresco' (21)
![[Img #67703]](https://astorgaredaccion.com/upload/images/02_2024/1277_1-1280-copia.jpg)
El sello de droguería
Un producto de droguería va a ser difundido en todos los establecimientos del ramo astorgano. Nada tiene de extraño que el primer anuncio inserto adopte la forma de ‘consulta médica’: “El médico: -¿Qué le duele, amigo?; El paciente: -la cabeza, los brazos, las muelas y todo el sistema. El médico: -pues no sea primo y tome un sello Nayor". Se incide en el diálogo con ‘Cosas de paletos’. Entra uno en un estanco y pide un sello para franquear una carta. "La estanquera: no hay más que sellos ‘Nallor’. El cliente: -bueno, ponga uno, así no le duele la cabeza a la carta". Estos eran chistes de ‘Faber’, de ‘Ficus’, el casi miope ‘Ficus’, Federico Alonso que tan fértil ingenio exhibía. Apura el equívoco con la palabra ‘sello’. Nada extraño que intitule otra de sus variantes: ‘¡Filatelicos’¡ “¿A que en sus colecciones, por malas que sean, no falta un sello, el principal? ¿Qué cuál? Hombre, por Dios! No sean ustedes vírgenes de inocencia. ¿Cuál ha de ser? Pues el sello Nallor que cura toda clase de Dolores”. Montan el rasgo publicitario sobre dar la broma a uno de los fresquistas: "¡Prodigio! Nuestro confraternal ‘don Natalio’, enfrascado en asuntos municipales, perdió el otro día la cabeza; la encontró ayer en un bolsillo de su chaleco, gracias a la influencia de un sello ‘Nallor' de esos que toma todo el mundo para aliviar dolores". Los versillos lo transforman en este título llamativo: “Chssss… oooigan!;
“Un pollo de esta ciudad
Que en cuanto a sello elegante
Lo tiene, muy en verdad
Sintiéndose cabeceante.
Dejó su sello y tomando
Uno o dos sellos Nallor
Fue por el mundo clamando
Que sello mejor Nalló…r”.
El fresco de Fregolino
Le corresponde ahora a ‘El Campesino’, uno de los más populares cafés de la Astorga de los años 10. Y el primer tema que abordan en su publicidad es el del propio ‘Fresco’, “Ya nos ganan". -“¿En qué se parecen los artículos de nuestro semanario a los helados que hace ‘El Campesino’? -Pues que son a cuál más frescos. Este chiste nos ha resultao más ‘colao’ que el café que hace Emilio Santos". Se insiste sobre el mismo medio: ¡Los hay frescos…! ¿A que no saben ustedes porque el día de San Pedro estuvo tan frío? Pues porque heló ‘El Campesino'. No vayan ustedes a creer que este campesino es alguno de Celada, no; es Emilio Santos dueño del café de la calle Carretas ".
Vuelve el tema del fresco para hacer publicidad de los helados: “Error. ¿Creen ustedes que no hay más frescos que nuestro frigorífico compañero ‘Glacial’? Pues es un error. Porque más frescos son los helados…” Y además de la frescura y frialdad, sale a relucir un popular camarero del café:
“Frescos somos los del ‘Fresco’
Fresco lo es Fregolino,
Pero aún son más frescos
Los helaos del Campesino”.
Se anuncia una persona popular: "Morla, Jovino, que es un joven muy fino, pinta atributos divinos y profanos; le es lo mismo; por un precio modestino. -¡Vayan todos a Jovino!”. Buen anuncio indicativo de su personalidad.
La publicidad del comercio de la viuda de Novo se acoge a un título continuativo: "Observe usted que… con estos ‘Frescos’ sé que se nos han echado encima; el mejor sitio donde puede meterse es en el Comercio de la Viuda de Novo.-Además de encontrar todo lo referente a tienda encuentra usted allí trajes de todas clases de caballero, unos faldones de niño que quitan el hipo y puede usted salir, jaleándose con algún tabaco de los que vende la casa”. Otro día parte la iniciativa de aprovechar la circunstancia de haber sido sometidos a la censura: "Estamos asados con la censura! -Así no se puede vivir. Lee usted un periódico y ya puede hacerse la cuenta de que no trae más novedades que las de la Viuda de Novo tiene en su comercio de la Plaza Mayor. Vaste decirle que allí se visten niños de cero a 105 años".
El corsé de yeso
Un perfume es también objeto del publicidad veamos como lo afronta Gonzalo Goy: "Las personas de buena nariz, las muchachas bonitas y elegantes, los pollos ‘gomosos’, los pollos ‘sic’ y los pollos ‘bien’ pasean siempre con Pepe Revillo y Marcialín García para aspirar a su lado los ricos perfumes de la A…Peele y huelo mejor”.
El anuncio versificado suena más o menos así, bajo el título de "Declaración… de valores”:
“A… Peele V. a esta casa.
Me lo dijeron un día.
A…Peele y huelo mejor
Que don Rodrigo olería.
Bendita la profecía
De González y García!”.
Los hombres encargados de pintar y repintar necesitan canalizar el mundillo de su acometida y agresividad artística. Tal el caso de Eduardo Alonso. Le hacen la publicidad gratis a cambio de las caricaturas que publica en ‘El Fresco’:
“Es un guardia muy celoso
Servicial y diligente,
Que en ‘El Fresco’ colabora
Y pinta divinamente”
Como punto de referencia dice que coloca a un lado la de los ultramarinos de Manuel Rodríguez.
En el primer ‘Bicho’ de la segunda temporada apoquina su dinerillo para ‘El Fresco’. Es ‘El Barato’, de Gavela, en la calle de La Bañeza. Luego interrumpe su publicidad. Veamos cómo es la única muestra. Tiene la fuerza de la actualidad europea de entonces: Es el mundo de los submarinos; estos hacen huir a un barco. Tal barco “de La Habana ha venido; un barco cargado de…abanicos. Y, de corsés; ¿de… blusas de señora?; ¿De.. ve los? Descargó en casa de ‘El Barato’”. Por el primer ‘Bicho’, conocemos igualmente que quien vende los popularísimos sellos Nallor, es Royan, el que después fundará en Madrid una editorial en la calle San Bernardo.
Domingo López hace la barba y tiene su peluquería frente al casino. "Toma el pelo al parroquiano", y lo hace "pero archiespeluznadamente bien".
![[Img #67703]](https://astorgaredaccion.com/upload/images/02_2024/1277_1-1280-copia.jpg)
El sello de droguería
Un producto de droguería va a ser difundido en todos los establecimientos del ramo astorgano. Nada tiene de extraño que el primer anuncio inserto adopte la forma de ‘consulta médica’: “El médico: -¿Qué le duele, amigo?; El paciente: -la cabeza, los brazos, las muelas y todo el sistema. El médico: -pues no sea primo y tome un sello Nayor". Se incide en el diálogo con ‘Cosas de paletos’. Entra uno en un estanco y pide un sello para franquear una carta. "La estanquera: no hay más que sellos ‘Nallor’. El cliente: -bueno, ponga uno, así no le duele la cabeza a la carta". Estos eran chistes de ‘Faber’, de ‘Ficus’, el casi miope ‘Ficus’, Federico Alonso que tan fértil ingenio exhibía. Apura el equívoco con la palabra ‘sello’. Nada extraño que intitule otra de sus variantes: ‘¡Filatelicos’¡ “¿A que en sus colecciones, por malas que sean, no falta un sello, el principal? ¿Qué cuál? Hombre, por Dios! No sean ustedes vírgenes de inocencia. ¿Cuál ha de ser? Pues el sello Nallor que cura toda clase de Dolores”. Montan el rasgo publicitario sobre dar la broma a uno de los fresquistas: "¡Prodigio! Nuestro confraternal ‘don Natalio’, enfrascado en asuntos municipales, perdió el otro día la cabeza; la encontró ayer en un bolsillo de su chaleco, gracias a la influencia de un sello ‘Nallor' de esos que toma todo el mundo para aliviar dolores". Los versillos lo transforman en este título llamativo: “Chssss… oooigan!;
“Un pollo de esta ciudad
Que en cuanto a sello elegante
Lo tiene, muy en verdad
Sintiéndose cabeceante.
Dejó su sello y tomando
Uno o dos sellos Nallor
Fue por el mundo clamando
Que sello mejor Nalló…r”.
El fresco de Fregolino
Le corresponde ahora a ‘El Campesino’, uno de los más populares cafés de la Astorga de los años 10. Y el primer tema que abordan en su publicidad es el del propio ‘Fresco’, “Ya nos ganan". -“¿En qué se parecen los artículos de nuestro semanario a los helados que hace ‘El Campesino’? -Pues que son a cuál más frescos. Este chiste nos ha resultao más ‘colao’ que el café que hace Emilio Santos". Se insiste sobre el mismo medio: ¡Los hay frescos…! ¿A que no saben ustedes porque el día de San Pedro estuvo tan frío? Pues porque heló ‘El Campesino'. No vayan ustedes a creer que este campesino es alguno de Celada, no; es Emilio Santos dueño del café de la calle Carretas ".
Vuelve el tema del fresco para hacer publicidad de los helados: “Error. ¿Creen ustedes que no hay más frescos que nuestro frigorífico compañero ‘Glacial’? Pues es un error. Porque más frescos son los helados…” Y además de la frescura y frialdad, sale a relucir un popular camarero del café:
“Frescos somos los del ‘Fresco’
Fresco lo es Fregolino,
Pero aún son más frescos
Los helaos del Campesino”.
Se anuncia una persona popular: "Morla, Jovino, que es un joven muy fino, pinta atributos divinos y profanos; le es lo mismo; por un precio modestino. -¡Vayan todos a Jovino!”. Buen anuncio indicativo de su personalidad.
La publicidad del comercio de la viuda de Novo se acoge a un título continuativo: "Observe usted que… con estos ‘Frescos’ sé que se nos han echado encima; el mejor sitio donde puede meterse es en el Comercio de la Viuda de Novo.-Además de encontrar todo lo referente a tienda encuentra usted allí trajes de todas clases de caballero, unos faldones de niño que quitan el hipo y puede usted salir, jaleándose con algún tabaco de los que vende la casa”. Otro día parte la iniciativa de aprovechar la circunstancia de haber sido sometidos a la censura: "Estamos asados con la censura! -Así no se puede vivir. Lee usted un periódico y ya puede hacerse la cuenta de que no trae más novedades que las de la Viuda de Novo tiene en su comercio de la Plaza Mayor. Vaste decirle que allí se visten niños de cero a 105 años".
El corsé de yeso
Un perfume es también objeto del publicidad veamos como lo afronta Gonzalo Goy: "Las personas de buena nariz, las muchachas bonitas y elegantes, los pollos ‘gomosos’, los pollos ‘sic’ y los pollos ‘bien’ pasean siempre con Pepe Revillo y Marcialín García para aspirar a su lado los ricos perfumes de la A…Peele y huelo mejor”.
El anuncio versificado suena más o menos así, bajo el título de "Declaración… de valores”:
“A… Peele V. a esta casa.
Me lo dijeron un día.
A…Peele y huelo mejor
Que don Rodrigo olería.
Bendita la profecía
De González y García!”.
Los hombres encargados de pintar y repintar necesitan canalizar el mundillo de su acometida y agresividad artística. Tal el caso de Eduardo Alonso. Le hacen la publicidad gratis a cambio de las caricaturas que publica en ‘El Fresco’:
“Es un guardia muy celoso
Servicial y diligente,
Que en ‘El Fresco’ colabora
Y pinta divinamente”
Como punto de referencia dice que coloca a un lado la de los ultramarinos de Manuel Rodríguez.
En el primer ‘Bicho’ de la segunda temporada apoquina su dinerillo para ‘El Fresco’. Es ‘El Barato’, de Gavela, en la calle de La Bañeza. Luego interrumpe su publicidad. Veamos cómo es la única muestra. Tiene la fuerza de la actualidad europea de entonces: Es el mundo de los submarinos; estos hacen huir a un barco. Tal barco “de La Habana ha venido; un barco cargado de…abanicos. Y, de corsés; ¿de… blusas de señora?; ¿De.. ve los? Descargó en casa de ‘El Barato’”. Por el primer ‘Bicho’, conocemos igualmente que quien vende los popularísimos sellos Nallor, es Royan, el que después fundará en Madrid una editorial en la calle San Bernardo.
Domingo López hace la barba y tiene su peluquería frente al casino. "Toma el pelo al parroquiano", y lo hace "pero archiespeluznadamente bien".
























