"Todo está en Ti, todo eres Tú, Tú eres"
Este Viernes Santo salía la imagen del Crucificado, del Santuario de Fátima, a las 10 en punto de la noche. Iba acompañada de las autoridades eclesiásticas y ciudadanas, además de por sus cofrades y por representantes de las demás cofradías. El Víacrucis presentaba la peculiaridad de que en cada parada se leía una cartela alusiva a las estaciones de la pasión de Cristo y en consonancia con la cofradía astorgana que la portaba.
Acompañan a las fotografías poemas de la escritoria uruguaya Juana de Ibarbourou.
![[Img #68064]](https://astorgaredaccion.com/upload/images/03_2024/9483_12_dsc6716-copia.jpg)
![[Img #68062]](https://astorgaredaccion.com/upload/images/03_2024/4153_10.jpg)
![[Img #68063]](https://astorgaredaccion.com/upload/images/03_2024/5562_11_dsc6714-copia.jpg)
AMOR DIVININO
Dios
El hombre tierno y cruel, el mirlo músico,
el agua abierta en sus magnolias frescas,
la tierra henchida de metales útiles,
el trompo zumbador de las abejas;
de aquí, a lo alto de la espesa esfera,
el gemido hacia Ti, rezo implorante;
en las celestes horas, risas jóvenes;
en selva y mar los peces y elefantes
que hace tu voluntad de obrero insigne;
el musgo, fiel gamuza de Los Ángeles;
la rosa elemental que se persigue
para el amor y el verso alucinante;
la belleza y el bien que no se miden,
el carbón superado en los diamantes,
el fuego alado y el alado aire,
todo está en Ti, todo eres Tú, Tú eres,
¡Oh Padre universal, extenso Padre!
Por mi perfecta célula y el alma
que a Ti elevo en jornada de alabanza,
por la piedra que calla,
por el río que canta,
gracias, Señor, mi Dios, tan necesario
que hasta el monstruo te ama.
![[Img #68053]](https://astorgaredaccion.com/upload/images/03_2024/4282_2_dsc6659-copia.jpg)
![[Img #68055]](https://astorgaredaccion.com/upload/images/03_2024/7888_1-_dsc6656-copia.jpg)
![[Img #68054]](https://astorgaredaccion.com/upload/images/03_2024/2127_3-_dsc6665-copia.jpg)
![[Img #68059]](https://astorgaredaccion.com/upload/images/03_2024/398_7_dsc6681-copia.jpg)
RUTA
Apaciguada estoy, apaciguada,
muertos ya los neblíes de la sangre.
Silencio es, silencio,
el día que empezaba en jazmín suave.
Por otras calles voy mucho más altas,
bajo un gélido cielo de palomas.
Es limpio, enjuto, el aire que me roza
y hay en el campo frías amapolas.
Serena voy, Serena, ya quebradas
las ardientes raíces de los nervios.
Queda detrás el límite
y empieza el nuevo cielo.
![[Img #68056]](https://astorgaredaccion.com/upload/images/03_2024/7674_4-_dsc6671-copia.jpg)
![[Img #68057]](https://astorgaredaccion.com/upload/images/03_2024/1079_5-_dsc6676-copia.jpg)
![[Img #68060]](https://astorgaredaccion.com/upload/images/03_2024/7655_8-_dsc6688-copia.jpg)
![[Img #68058]](https://astorgaredaccion.com/upload/images/03_2024/1488_6-_dsc6678-copia.jpg)
DIVINO AMOR
Porque es puro y es fiel y avizorante,
y en el dolor me hubo acompañado,
porque a las fieras hubo amordazado,
canto a mi azor con lenguas de diamante.
![[Img #68061]](https://astorgaredaccion.com/upload/images/03_2024/5393_9-_dsc6703-copia.jpg)
![[Img #68065]](https://astorgaredaccion.com/upload/images/03_2024/115_13_dsc6732-copia.jpg)
Acompañan a las fotografías poemas de la escritoria uruguaya Juana de Ibarbourou.
AMOR DIVININO
Dios
El hombre tierno y cruel, el mirlo músico,
el agua abierta en sus magnolias frescas,
la tierra henchida de metales útiles,
el trompo zumbador de las abejas;
de aquí, a lo alto de la espesa esfera,
el gemido hacia Ti, rezo implorante;
en las celestes horas, risas jóvenes;
en selva y mar los peces y elefantes
que hace tu voluntad de obrero insigne;
el musgo, fiel gamuza de Los Ángeles;
la rosa elemental que se persigue
para el amor y el verso alucinante;
la belleza y el bien que no se miden,
el carbón superado en los diamantes,
el fuego alado y el alado aire,
todo está en Ti, todo eres Tú, Tú eres,
¡Oh Padre universal, extenso Padre!
Por mi perfecta célula y el alma
que a Ti elevo en jornada de alabanza,
por la piedra que calla,
por el río que canta,
gracias, Señor, mi Dios, tan necesario
que hasta el monstruo te ama.
RUTA
Apaciguada estoy, apaciguada,
muertos ya los neblíes de la sangre.
Silencio es, silencio,
el día que empezaba en jazmín suave.
Por otras calles voy mucho más altas,
bajo un gélido cielo de palomas.
Es limpio, enjuto, el aire que me roza
y hay en el campo frías amapolas.
Serena voy, Serena, ya quebradas
las ardientes raíces de los nervios.
Queda detrás el límite
y empieza el nuevo cielo.
DIVINO AMOR
Porque es puro y es fiel y avizorante,
y en el dolor me hubo acompañado,
porque a las fieras hubo amordazado,
canto a mi azor con lenguas de diamante.