Maikel Rodríguez / sportleon.com
Viernes, 12 de Junio de 2015

13.000 espectadores con La Roja

La selección vence (2-1) en el amistoso frente a Costa Rica, gracias a los goles de Paco Alcácer y Cesc Fábregas. Más de 13.000 espectadores abarrotaron las gradas del estadio Reino de León para animar a la selección. El campo se quedó pequeño para la cita amistosa ante Costa Rica. El público leonés disfrutó del juego de su selección, en la segunda visita de España a tierras leonesas, y del triunfo final ante el combinado costarricense. Piqué dividió al público entre alabanzas y críticas

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La fiesta comenzó siendo costarricense. Tras unos minutos de tanteo, con una fuerte presión de Costa Rica, que no facilitaba la salida de balón del combinado español, un balón arriba por la banda izquierda le caía a Campbell, que encaró a Bartra, la puso atrás y Venegas enviaba el esférico a la red. Un gol muy celebrado por el grupo 'tico'.



Pero no tardó España en nivelar de nuevo el marcador, tras una genialidad de Fábregas, que con un taconazo dejó solo a Paco Alcacer, que definió a la perfección ante Keylor Navas para hacer el empate. Empezaba el encuentro con goles, bonito para el espectador.



Nolito lo intentó, pero su disparó se cruzó en el camino con un defensa que desvió el balón a córner. Acto seguido, tras sacar Cesc de esquina, Bartra recibió la pelota en sus pies, pero la mandó arriba. Fue antes de que el partido entrara en una fase descafeniada, con el toque de España, pero sin profundidad. Un córner a favor de Costa Rica fue de lo poco reseñable. La conexión Venegas-Campbell supuso algunos problemas a la defensa española.

 

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Fase descafeinada

Menos mal que estaba Manolo 'El del Bombo' para arrancar algunos gritos de ánimo a España, que despertaron un poco el ambiente, porque sobre el césped, el partido no invitaba al júbilo. Aleix Vidal, que acaba de fichar por el FC Barcelona y que debutó en León con la selección, dejó algún detalle y se dejaba ver, como en la acción del segundo gol.



Ocupó la banda derecha, por delante de Carvajal e inició la jugada que acabó en el gol de Fábregas, tras tocar Nolito. España daba la vuelta al marcador a la media hora de juego. Parece que le sentó bien el gol a España, que contó con alguna ocasión más, pero como si de un abrir y cerrar de ojos, la primera parte del partido acabó con el susto de Aleix Vidal, que se retiró y fue cambiado al descanso por Vitolo.



En la segunda parte, mejoró el juego de España, que llegó con más claridad y convirtió a Keylor Navas en el mejor de Costa Rica. En una primera acción con su compañero Sergio Ramos, que era fuera de juego, pero donde el guardameta se empleó de manera extraordinaria, lo mismo que hasta en otras dos ocasiones en las que el público ya cantaba gol, una del propio Sergio y otra de Cazorla tras el taconazo de Silva.

 

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El morbo de Piqué

Entre medias, se produjo el momento 'morbo' del partido. Gerard Piqué entraba al terreno de juego en sustitución de Sergio Ramos y era recibido con muchos aplausos, que fueron silenciados por los pitos de otros. Sería, además, el inicio del típico carrusel de cambios que frenó el juego en la segunda mitad.



Con Silva sobre el campo, los aficionados disfrutaron de sus destellos de calidad. El canario lo intentó flojito, pero Keylor estaba bien colocado. Los 'ticos' también buscaban la jugada del empate y un centro al área al que no llegó a rematar Campbell fue un aviso para España. También Bryan Ruíz, con una jugada individual, intentó llevar peligro.



Mientras tanto, el partido se había convertido en un absurdo pique a dos bandas entre los admiradores y detractores de Piqué. Cada vez que tocada el balón el catalán, se producía una división entre los silbidos y los aplausos. Algunos se arrancaron con gritos de 'Piqué, Piqué', que rápidamente eran contestados con silbidos. Un juego que no merecía la noche.



Buscó algún gol más España, pero se volvió a encontrar con Navas. Silva probó fortuna desde la frontal y su disparo se marchó rozando el palo. Piqué se sumó al ataque, quizás en busca de un gol que callara bocas. Eran los últimos minutos de un partido que pasó volando. León tuvo que esperar 12 años para volver a disfrutar de su selección, pero lo disfrutó al máximo. Dos triunfos en dos compromisos en tierras leonesas.

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