El 'cuello de botella' para los peatones en la acera de la casa Granell
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Con el fin de mejorar el tránsito de peatones en la acera de la casa Granell, el PAL solicita que se desplacen las vallas situadas en ese tramo unos centímetros hacia la calzada o se ensanche la acera o se acometa cualquier otra actuación.
Las vallas situadas en la confluencia de la calle Enfermeras Mártires de Somiedo con la Avenida de las Murallas dejan un paso demasiado angosto para el paso de los numerosos peatones que acceden al centro urbano desde esa zona próxima al aparcamiento de El Melgar.
Según el PAL, el problema se acentúa durante las fiestas ya que este lugar de paso hacia el lugar donde se sitúan las atracciones para los niños, se convierte en un cuello de botella. Ante la cantidad de personas que transitan por este tramo muchos optan por utilizar la calzada para evitar los continuos colapsos con el peligro que ello conlleva.
Por ello, vecinos de la zona, y de la ciudad en general, han transmitido al PAL su malestar por esta situación y demandan una solución, ya sea desplazando las vallas unos centímetros o ensanchando la acera lo suficiente. "Es una obra pequeña con un coste ínfimo que no entorpecería el tráfico rodado y agilizaría el trasiego de peatones", concluye el PAL.
Con el fin de mejorar el tránsito de peatones en la acera de la casa Granell, el PAL solicita que se desplacen las vallas situadas en ese tramo unos centímetros hacia la calzada o se ensanche la acera o se acometa cualquier otra actuación.
Las vallas situadas en la confluencia de la calle Enfermeras Mártires de Somiedo con la Avenida de las Murallas dejan un paso demasiado angosto para el paso de los numerosos peatones que acceden al centro urbano desde esa zona próxima al aparcamiento de El Melgar.
Según el PAL, el problema se acentúa durante las fiestas ya que este lugar de paso hacia el lugar donde se sitúan las atracciones para los niños, se convierte en un cuello de botella. Ante la cantidad de personas que transitan por este tramo muchos optan por utilizar la calzada para evitar los continuos colapsos con el peligro que ello conlleva.
Por ello, vecinos de la zona, y de la ciudad en general, han transmitido al PAL su malestar por esta situación y demandan una solución, ya sea desplazando las vallas unos centímetros o ensanchando la acera lo suficiente. "Es una obra pequeña con un coste ínfimo que no entorpecería el tráfico rodado y agilizaría el trasiego de peatones", concluye el PAL.
