Derriban por sorpresa el nido de cigüeñas de Murias
![[Img #20015]](upload/img/periodico/img_20015.jpg)
El 15 de enero por la mañana, un operario subido en una grúa destrozaba el nido de las cigüeñas de Murias de Rechivaldo, para sorpresa de los vecinos que no tenían noticia de que esto se iba a llevar a cabo.
Preguntado el Seprona por el procedimiento, y la presidenta de la Junta Vecinal, se ha sabido que la presidenta avisó del peso del nido y pidió rebajarlo, y según ella alguien prefirió derribarlo. Teniendo en cuenta que las dos cigüeñas habitan el nido durante todo el año desde hace al menos dos décadas, lo mejor habría sido reubicar el nido, y más en el mes de enero cuando las aves seguramente no emigren y esos dos ejemplares corren peligro durante este invierno.
Algunos vecinos, sorprendidos, preguntan quién tomó esta decisión y dónde se avisó al pueblo (cosa que no sucedió) puesto que en las juntas vecinales no se debe proceder de esta forma sin haber consultado en un concejo (no en reuniones privadas como se sospecha), y, sobre todo, por qué no se decidió reubicar el nido. Entendemos que si había peligro o daño en la iglesia (que no se aprecia) hay que retirarlo, pero no destruirlo como se ha hecho.
Particulares informan de que pedirán responsabilidades tal como aconsejó Seprona, primero en el Ayuntamiento de Astorga y después, una vez visto el expediente, donde consideren oportuno.
Si estamos luchando para conservar nuestro poder de decisión en los pueblos por medio de las juntas vecinales, esperamos que esto no haya sido una decisión caciquil por parte de la Junta Vecinal.
![[Img #20015]](upload/img/periodico/img_20015.jpg)
El 15 de enero por la mañana, un operario subido en una grúa destrozaba el nido de las cigüeñas de Murias de Rechivaldo, para sorpresa de los vecinos que no tenían noticia de que esto se iba a llevar a cabo.
Preguntado el Seprona por el procedimiento, y la presidenta de la Junta Vecinal, se ha sabido que la presidenta avisó del peso del nido y pidió rebajarlo, y según ella alguien prefirió derribarlo. Teniendo en cuenta que las dos cigüeñas habitan el nido durante todo el año desde hace al menos dos décadas, lo mejor habría sido reubicar el nido, y más en el mes de enero cuando las aves seguramente no emigren y esos dos ejemplares corren peligro durante este invierno.
Algunos vecinos, sorprendidos, preguntan quién tomó esta decisión y dónde se avisó al pueblo (cosa que no sucedió) puesto que en las juntas vecinales no se debe proceder de esta forma sin haber consultado en un concejo (no en reuniones privadas como se sospecha), y, sobre todo, por qué no se decidió reubicar el nido. Entendemos que si había peligro o daño en la iglesia (que no se aprecia) hay que retirarlo, pero no destruirlo como se ha hecho.
Particulares informan de que pedirán responsabilidades tal como aconsejó Seprona, primero en el Ayuntamiento de Astorga y después, una vez visto el expediente, donde consideren oportuno.
Si estamos luchando para conservar nuestro poder de decisión en los pueblos por medio de las juntas vecinales, esperamos que esto no haya sido una decisión caciquil por parte de la Junta Vecinal.






