La nueva ordenanza convertirá a Astorga en "uno de los ayuntamientos más hostiles para con los perros"
Así lo cree medio centenar de propietarios de perros que ha presentado alegaciones a la Ordenanza para la Tenencia, Defensa y Protección de los Animales Domésticos y de Compañía en el Término Municipal de Astorga que el Ayuntamiento va a aprobar este jueves en el Pleno Ordinario del mes de septiembre.
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"Nos hemos coordinado, hemos estudiado y valorado la propuesta del Ayuntamiento y hemos presentado en tiempo y forma los comentarios, sugerencias y alegaciones que estimamos podrían mejorar" la normativa. Los alegantes coinciden con el equipo municipal de gobierno "en el objetivo teórico de defender y proteger a los animales para su salubridad, seguridad y tranquilidad en su convivencia entre sí y con los humanos".
Muestran su satisfacción de que finalmente se ha tenido en cuenta algunas de sus peticiones: cuatro de las 12 propuestas han sido incorporadas, además de dos correcciones sintácticas, una de concordancia con la legislación autonómica y otra de "sentido común" para no exigir a los peregrinos que hagan el Camino con caballos o burros, el solicitar previamente autorización para pasar por Astorga.
Por el contrario lamentan que no se hayan atendido otras que "van a hacer de Astorga uno de los ayuntamientos más hostiles para con los perros y sus dueños de toda Europa". Son especialmente críticos con "la pretensión de que los perros hagan sus necesidades en la calzada en los imbornales del alcantarillado. ¡Cuidado conductores, pueden encontrarse perros en la calzada debatiendo con su dueño acerca de dónde mear!", señalan con ironía, porque el artículo 14 de la ordenanza dice: "las personas que conduzcan perros y otros animales deberán impedir que estos depositen sus micciones en vías públicas, en las aceras, paseos, jardines y, en general, en cualquier lugar destinado al tránsito de peatones", por lo que para evacuar "dichas micciones, si no existiera lugar señalado para ello, deberán llevarlos a la calzada junto al bordillo y lo más próximo al imbornal del alcantarillado o en zonas no destinadas al paso de peatones ni a lugares de juego". Los alegantes recuerda que las multas serán de hasta 750 € si lo hacen en la hierba y de hasta 1.500 € si el perro es reincidente.
También son críticos con el artículo 17 ("en cualquier caso queda prohibido el acceso de animales a las … zonas verdes de parques y jardines... Está prohibida la entrada de animales domésticos en todo tipo de locales destinados a la fabricación, cocinas, almacenaje, transporte, manipulación o venta de alimentos"). Entienden estos ciudadanos que habría que advertir a los turistas que piensen en parar en Astorga que "aquí no pueden encontrar ningún restaurante en el que comer con su mascota porque el Ayuntamiento les ha sustraído ese derecho de admisión".
Esos mismos turistas tampoco deberían "arriesgar" intentar contemplar los monumentos o pasear por la muralla "porque si su perro entra en la hierba puede encontrarse con una multa de hasta 750 €. Su perro tendrá que estar en el coche y no encontrarán ni un espacio en el municipio donde poder dejar que corra suelto y se relacione con otros perros".
La nota de prensa enviada por los alegantes concluye indicando que "los turistas pueden consolarse pensando que si los vecinos de Astorga cumplimos estrictamente la ordenanza, sufriremos mucho más porque siempre estamos aquí".
"Nos hemos coordinado, hemos estudiado y valorado la propuesta del Ayuntamiento y hemos presentado en tiempo y forma los comentarios, sugerencias y alegaciones que estimamos podrían mejorar" la normativa. Los alegantes coinciden con el equipo municipal de gobierno "en el objetivo teórico de defender y proteger a los animales para su salubridad, seguridad y tranquilidad en su convivencia entre sí y con los humanos".
Muestran su satisfacción de que finalmente se ha tenido en cuenta algunas de sus peticiones: cuatro de las 12 propuestas han sido incorporadas, además de dos correcciones sintácticas, una de concordancia con la legislación autonómica y otra de "sentido común" para no exigir a los peregrinos que hagan el Camino con caballos o burros, el solicitar previamente autorización para pasar por Astorga.
Por el contrario lamentan que no se hayan atendido otras que "van a hacer de Astorga uno de los ayuntamientos más hostiles para con los perros y sus dueños de toda Europa". Son especialmente críticos con "la pretensión de que los perros hagan sus necesidades en la calzada en los imbornales del alcantarillado. ¡Cuidado conductores, pueden encontrarse perros en la calzada debatiendo con su dueño acerca de dónde mear!", señalan con ironía, porque el artículo 14 de la ordenanza dice: "las personas que conduzcan perros y otros animales deberán impedir que estos depositen sus micciones en vías públicas, en las aceras, paseos, jardines y, en general, en cualquier lugar destinado al tránsito de peatones", por lo que para evacuar "dichas micciones, si no existiera lugar señalado para ello, deberán llevarlos a la calzada junto al bordillo y lo más próximo al imbornal del alcantarillado o en zonas no destinadas al paso de peatones ni a lugares de juego". Los alegantes recuerda que las multas serán de hasta 750 € si lo hacen en la hierba y de hasta 1.500 € si el perro es reincidente.
También son críticos con el artículo 17 ("en cualquier caso queda prohibido el acceso de animales a las … zonas verdes de parques y jardines... Está prohibida la entrada de animales domésticos en todo tipo de locales destinados a la fabricación, cocinas, almacenaje, transporte, manipulación o venta de alimentos"). Entienden estos ciudadanos que habría que advertir a los turistas que piensen en parar en Astorga que "aquí no pueden encontrar ningún restaurante en el que comer con su mascota porque el Ayuntamiento les ha sustraído ese derecho de admisión".
Esos mismos turistas tampoco deberían "arriesgar" intentar contemplar los monumentos o pasear por la muralla "porque si su perro entra en la hierba puede encontrarse con una multa de hasta 750 €. Su perro tendrá que estar en el coche y no encontrarán ni un espacio en el municipio donde poder dejar que corra suelto y se relacione con otros perros".
La nota de prensa enviada por los alegantes concluye indicando que "los turistas pueden consolarse pensando que si los vecinos de Astorga cumplimos estrictamente la ordenanza, sufriremos mucho más porque siempre estamos aquí".