Nicolás Pérez Hidalgo
Lunes, 17 de Marzo de 2014
En el nombre del … 'medio ambiente'
En el nombre de un ente superior o inmaterial se han cometido verdaderas barbaridades a lo largo de la historia de la humanidad. Véase por ejemplo las cruzadas para recuperar Jerusalén, que básicamente consistían en convencer a unos cuantos para que en nombre tal o cual dios supremo mataran o se dejaran matar para que los señores de la guerra (o del alma) obtuvieran poder, tierras y riqueza material. Y desgraciadamente después de varios siglos, … ahí seguimos.
Lo mismo sucede ahora con los residuos sólidos urbanos, que es así como se llama lo que tradicionalmente se ha llamado basura, aunque es cierto que hay basura de muchos tipos (y tipas). Pues resulta, que de un tiempo a esta parte hay que apelar a la mejora del medio ambiente para que la gente separe en casa la basura para después llevarla alegre a los contenedores correspondientes (si es que los hay) … ¡orgullosos así de contribuir a la mejora del planeta!
El medio ambiente no existe ni se puede tocar (como cualquier otra deidad), pero sí existen personas que dirigen y ejecutan las políticas de residuos y también existen personas (muchas) que se lucran con la basura. La mierda, en sentido amplio, se ha convertido gracias a unos y a otros en un negocio tan redondo y corrupto que incluso la mafia italiana hace décadas que puso sus ojos en ella, y en la comunidad valenciana no hay corrupto que no tenga su dosis correspondiente de vertedero o depuradora.
Por si alguien aún no sabe cómo funciona el 'negocio' dos pinceladas sobre qué estamos pagando en este asunto 'basuril' en la provincia de León. De una parte se paga una tasa por la recogida de la basura no separada (contendedores verdes) de la que se encarga el ayuntamiento de turno o la mancomunidad, si es que el servicio se ha mancomunado. Esta basura va directamente al C.T.R. provincial para, en teoría, ser separada. En nuestra provincia, además se ha creado un 'ente' llamado GERSUL, que no es más que un consorcio formado por los mismos ayuntamientos para 'separar' la basura que ellos mismos no separan en origen, y por la que cobran otra tasa de separación, que antes recaudaba la Diputación y ahora lo hace una empresa 'privada' con muchos (demasiados) vínculos políticos. Resumiendo, los políticos y las mismas instituciones (los ayuntamientos) son los únicos responsables de la recogida y de la separación de la basura y de su correcta gestión. ¿Por qué separar ambos conceptos (recogida y separación) y cobrarlos por separado?... vayan meditando que otro día se lo aclaro.
Pero volvamos al reciclaje…. En el mejor de los casos tendrá más o menos a mano un contenedor azul para papel y cartón, uno amarillo para envases, uno verde para vidrio y quizás alguno de color anaranjado para el aceite, lo de tener uno para la basura orgánica, ¡ya es para nota! Usted ha pagado cuando lo adquiere, el residuo (papel, envase, vidrio, …) o sea que es suyo. Alegremente va a depositarlo en un contendor coloreado para beneficiar al medio ambiente. Pero resulta que a quién beneficia no es al medio ambiente sino a quien obtiene dinero contante y sonante con su residuo y con su trabajo (el de llevarlo). Pero, ¿sabe usted quién es ese personaje que obtiene el beneficio? Si no lo sabe, empiece a hacerse la pregunta y pregúntele a su representante político en el ayuntamiento de turno. Porque quizás con nuestro esfuerzo y con nuestros recursos estemos manteniendo a muchos ladrones y vividores (sin ánimo de lucro, eso sí) y porque no, quizás estemos pagando también la ficha de alguna estrella mediática del fútbol.
Nuestro modelo de gestión de la basura municipal (y provincial) se ha demostrado erróneo y perjudicial para el ciudadano desde su creación hasta la actualidad y se sabe (lo saben) ya desde hace años. De nosotros depende que se produzca el cambio en ese modelo de gestión de los residuos sólidos urbanos, pero pedir el cambio de modelo implica que la gente ha de saber primero cómo funciona el modelo que tenemos.
Entre tanta mierda y mediocridad yo hace años que no reciclo nada, ni en el nombre de un dios, ni en el del medio ambiente, ni …. porque una cosa es que te roben y otra que te roben y encima se rían de ti.
Nota. Esta columna se subtitula ¿Sabemos cómo nos roban? (IV)
En el nombre de un ente superior o inmaterial se han cometido verdaderas barbaridades a lo largo de la historia de la humanidad. Véase por ejemplo las cruzadas para recuperar Jerusalén, que básicamente consistían en convencer a unos cuantos para que en nombre tal o cual dios supremo mataran o se dejaran matar para que los señores de la guerra (o del alma) obtuvieran poder, tierras y riqueza material. Y desgraciadamente después de varios siglos, … ahí seguimos.
Lo mismo sucede ahora con los residuos sólidos urbanos, que es así como se llama lo que tradicionalmente se ha llamado basura, aunque es cierto que hay basura de muchos tipos (y tipas). Pues resulta, que de un tiempo a esta parte hay que apelar a la mejora del medio ambiente para que la gente separe en casa la basura para después llevarla alegre a los contenedores correspondientes (si es que los hay) … ¡orgullosos así de contribuir a la mejora del planeta!
El medio ambiente no existe ni se puede tocar (como cualquier otra deidad), pero sí existen personas que dirigen y ejecutan las políticas de residuos y también existen personas (muchas) que se lucran con la basura. La mierda, en sentido amplio, se ha convertido gracias a unos y a otros en un negocio tan redondo y corrupto que incluso la mafia italiana hace décadas que puso sus ojos en ella, y en la comunidad valenciana no hay corrupto que no tenga su dosis correspondiente de vertedero o depuradora.
Por si alguien aún no sabe cómo funciona el 'negocio' dos pinceladas sobre qué estamos pagando en este asunto 'basuril' en la provincia de León. De una parte se paga una tasa por la recogida de la basura no separada (contendedores verdes) de la que se encarga el ayuntamiento de turno o la mancomunidad, si es que el servicio se ha mancomunado. Esta basura va directamente al C.T.R. provincial para, en teoría, ser separada. En nuestra provincia, además se ha creado un 'ente' llamado GERSUL, que no es más que un consorcio formado por los mismos ayuntamientos para 'separar' la basura que ellos mismos no separan en origen, y por la que cobran otra tasa de separación, que antes recaudaba la Diputación y ahora lo hace una empresa 'privada' con muchos (demasiados) vínculos políticos. Resumiendo, los políticos y las mismas instituciones (los ayuntamientos) son los únicos responsables de la recogida y de la separación de la basura y de su correcta gestión. ¿Por qué separar ambos conceptos (recogida y separación) y cobrarlos por separado?... vayan meditando que otro día se lo aclaro.
Pero volvamos al reciclaje…. En el mejor de los casos tendrá más o menos a mano un contenedor azul para papel y cartón, uno amarillo para envases, uno verde para vidrio y quizás alguno de color anaranjado para el aceite, lo de tener uno para la basura orgánica, ¡ya es para nota! Usted ha pagado cuando lo adquiere, el residuo (papel, envase, vidrio, …) o sea que es suyo. Alegremente va a depositarlo en un contendor coloreado para beneficiar al medio ambiente. Pero resulta que a quién beneficia no es al medio ambiente sino a quien obtiene dinero contante y sonante con su residuo y con su trabajo (el de llevarlo). Pero, ¿sabe usted quién es ese personaje que obtiene el beneficio? Si no lo sabe, empiece a hacerse la pregunta y pregúntele a su representante político en el ayuntamiento de turno. Porque quizás con nuestro esfuerzo y con nuestros recursos estemos manteniendo a muchos ladrones y vividores (sin ánimo de lucro, eso sí) y porque no, quizás estemos pagando también la ficha de alguna estrella mediática del fútbol.
Nuestro modelo de gestión de la basura municipal (y provincial) se ha demostrado erróneo y perjudicial para el ciudadano desde su creación hasta la actualidad y se sabe (lo saben) ya desde hace años. De nosotros depende que se produzca el cambio en ese modelo de gestión de los residuos sólidos urbanos, pero pedir el cambio de modelo implica que la gente ha de saber primero cómo funciona el modelo que tenemos.
Entre tanta mierda y mediocridad yo hace años que no reciclo nada, ni en el nombre de un dios, ni en el del medio ambiente, ni …. porque una cosa es que te roben y otra que te roben y encima se rían de ti.
Nota. Esta columna se subtitula ¿Sabemos cómo nos roban? (IV)