Patético
El ambiente de crispación e indignación que se vive en las calles de la provincia y de España se trasladó este jueves al Salón de Plenos del Ayuntamiento de Astorga, donde una pregunta sobre la inexistencia de ayudas municipales para la compra de material escolar desembocó en el abandono de la sesión por parte de los concejales del PP.
La desnaturalización del sentido de los plenos municipales sin puntos de interés en el orden del día para resolver los asuntos de calado de la gestión municipal, ha desembocado en un concierto desafinado en el que cada grupo político va a hablar de lo suyo. Y eso fue exactamente lo que volvió a ocurrir en la sesión celebrada en la noche de este jueves, en la que el 'sopor' se vio trastocado por el inesperado plante de los ediles del grupo 'popular', ante lo que entendieron como una afrenta máxima por parte de la concejala de Servicios Sociales, Mercedes González Rojo. En esta sesión se levantaron los concejales del PP, una práctica que ya escenificaron las periodistas que cubren la información municipal en el pleno del mes de septiembre, por entender que no era necesaria su presencia en debates en los que los protagonistas sin escucharse entre sí van a defender su 'parcelita', olvidándose del interés general que debería primar en la casa de todos los astorganos. Oigan, que la entrada que compramos era para otra película.
Desde hace meses el enredo del debate (por llamarlo de alguna manera) burdo y sin finura deja entrever el desafine de la orquesta: PP y PSOE no se soportan, PAL y PSOE tampoco, y si me apuran los bloques en los que se ha dividido el PSOE se aguantan aún menos. Todos funcionan como versos sueltos y sin sentido en el endiablado reparto de fuerzas que dejaron las urnas en 2011 y que la miopía de quienes se sientan en la bancada del Salón de Plenos no ha hecho más que empeorar.
Si la intención del grupo de concejales del PP con su sobreactuación fue lograr el titular, enhorabuena porque lo consiguieron. Si la intención de la concejala socialista fue ir poniendo en práctica los discursos de carga ideológica ante la inminencia de la campaña electoral, pues felicitaciones porque lo bordó. Pero, perdonen sus señorías, ¿ésto es lo que ustedes entienden por servicio público al ciudadano? Que Dios nos asista en la recta final de la legislatura. Patético.
El ambiente de crispación e indignación que se vive en las calles de la provincia y de España se trasladó este jueves al Salón de Plenos del Ayuntamiento de Astorga, donde una pregunta sobre la inexistencia de ayudas municipales para la compra de material escolar desembocó en el abandono de la sesión por parte de los concejales del PP.
La desnaturalización del sentido de los plenos municipales sin puntos de interés en el orden del día para resolver los asuntos de calado de la gestión municipal, ha desembocado en un concierto desafinado en el que cada grupo político va a hablar de lo suyo. Y eso fue exactamente lo que volvió a ocurrir en la sesión celebrada en la noche de este jueves, en la que el 'sopor' se vio trastocado por el inesperado plante de los ediles del grupo 'popular', ante lo que entendieron como una afrenta máxima por parte de la concejala de Servicios Sociales, Mercedes González Rojo. En esta sesión se levantaron los concejales del PP, una práctica que ya escenificaron las periodistas que cubren la información municipal en el pleno del mes de septiembre, por entender que no era necesaria su presencia en debates en los que los protagonistas sin escucharse entre sí van a defender su 'parcelita', olvidándose del interés general que debería primar en la casa de todos los astorganos. Oigan, que la entrada que compramos era para otra película.
Desde hace meses el enredo del debate (por llamarlo de alguna manera) burdo y sin finura deja entrever el desafine de la orquesta: PP y PSOE no se soportan, PAL y PSOE tampoco, y si me apuran los bloques en los que se ha dividido el PSOE se aguantan aún menos. Todos funcionan como versos sueltos y sin sentido en el endiablado reparto de fuerzas que dejaron las urnas en 2011 y que la miopía de quienes se sientan en la bancada del Salón de Plenos no ha hecho más que empeorar.
Si la intención del grupo de concejales del PP con su sobreactuación fue lograr el titular, enhorabuena porque lo consiguieron. Si la intención de la concejala socialista fue ir poniendo en práctica los discursos de carga ideológica ante la inminencia de la campaña electoral, pues felicitaciones porque lo bordó. Pero, perdonen sus señorías, ¿ésto es lo que ustedes entienden por servicio público al ciudadano? Que Dios nos asista en la recta final de la legislatura. Patético.