La intolerancia de los ¿compañeros? de Victorina Alonso
    
   
	    
	
    
        
    
    
        
          
		
    
        			        			        			        			        			        			        			        			        			        
    
    
    
	
	
        
        
        			        			        			        			        			        			        			        	
                                
                    			        			        
        
                
        
        Astorga es una ciudad que a los cepedanos nos cae cercana y lo mismo que casi toda nuestra actividad comercial la realizamos en ella, también nos afectan y nos preocupan sus asuntos diarios y la politica no iba a ser menos.
Ni entro ni salgo en a quién han de votar los astorganos, ¡ellos sabrán! y seguro que lo sabrán, pero no es de justicia contemplar los tejemanejes subterráneos de quienes se resisten a perder la preponderancia que tuvieron antaño. Cuando se ha dejado la primera fila de la partida no se puede ya seguir dando las cartas. En este caso la alcaldesa, Doña Vitorina Alonso, ha tenido la valentía de no admitir sujerencias ni imposiciones, lo que le ha acarreado la intolerancia de muchos de sus ¿compañeros? No sé si es buena alcaldesa, pero sí ha demostrado tener personalidad.
Por si fuera poco se percibe que algunos estamentos mediáticos también han emprendido su guerra particular contra Vitorina Alonso y no creo que en el asunto tenga nada que ver algún constructor importante de la ciudad aunque, a simple vista, podría parecer que si.
Animo a la alcaldesa a proseguir con su politica de apoyo a la ciudad, a la cultura, a los más desfavorecidos y a la renovación de su partido y le agradezco que haya metido en su lista a gentes de valía más que demostrada. Esas gentes son necesarias para Astorga y también para las comarcas.
Como cepedano y paisano le envio a Vitorina un abrazo y mi reconocimiento a su proceder.
        
        
    
       
            
    
        
        
	
    
                                                                                            	
                                        
                                                                                                                                                                                                    
    
    
	
    
Astorga es una ciudad que a los cepedanos nos cae cercana y lo mismo que casi toda nuestra actividad comercial la realizamos en ella, también nos afectan y nos preocupan sus asuntos diarios y la politica no iba a ser menos.
Ni entro ni salgo en a quién han de votar los astorganos, ¡ellos sabrán! y seguro que lo sabrán, pero no es de justicia contemplar los tejemanejes subterráneos de quienes se resisten a perder la preponderancia que tuvieron antaño. Cuando se ha dejado la primera fila de la partida no se puede ya seguir dando las cartas. En este caso la alcaldesa, Doña Vitorina Alonso, ha tenido la valentía de no admitir sujerencias ni imposiciones, lo que le ha acarreado la intolerancia de muchos de sus ¿compañeros? No sé si es buena alcaldesa, pero sí ha demostrado tener personalidad.
Por si fuera poco se percibe que algunos estamentos mediáticos también han emprendido su guerra particular contra Vitorina Alonso y no creo que en el asunto tenga nada que ver algún constructor importante de la ciudad aunque, a simple vista, podría parecer que si.
Animo a la alcaldesa a proseguir con su politica de apoyo a la ciudad, a la cultura, a los más desfavorecidos y a la renovación de su partido y le agradezco que haya metido en su lista a gentes de valía más que demostrada. Esas gentes son necesarias para Astorga y también para las comarcas.
Como cepedano y paisano le envio a Vitorina un abrazo y mi reconocimiento a su proceder.




 
 
                        
                        